ROMPIENDOLE EL CULO A VACA VENEZOLANA

jaja si están grandes créemelo bro.

 

Me pondré a mirar Animal Planet, en cuanto encuentre similitud, te digo.
Respecto al placer que sentiste, cuando te la tiraste estabas con los ojos abiertos o los cerraste y pensabas en Pamela Franco.

 

jajaja, con los ojos abiertos y solamente pensando en ella.

 

Buena historia, se ve prometedora, espero continuación

 

Vale la respuesta con educación, gracias cofrade.

 

Continuamos con el relato.
Entramos al cuarto, una vez adentro comenzamos a besarnos bien rico, mientras nos comíamos los labios le apretaba el culo y manoseaba sus enormes tetas, ella disfrutaba mucho cada metida de mano. Después de los besos y los manoseas mi verga ya estaba a punto de estallar, tenía que liberar a la bestia, así que procedí a quitarle la blusita, debajo de la blusita tenía puesto un gran brasier de color blanco, estaba alusinando con el enorme tamaño de sus senos, luego empecé a quitarle el pantalón jean, al ver lo que traía puesto debajo del pantalón se me hizo agua la boca, se había puesto una braga de encaje transparente de color blanco, se podía apreciar muy bien su totona (vagina) gordita y carnosa, me enamoré en esos momentos de esa rica concha, la tenía bien limpia, blanca y rasurada, le quité los zapatos después, solamente la deje con su brasier y su braga, no se imaginan lo bien que se miraba de blanco, me pene ya no aguantaba más estaba loco por salir del boxer, así que la tome por el cabello y la puse de rodillas ante mi, en esos segundos pensé en lo anterior que le había dicho, creo que le había gustado y así fue.

- Sarid me encanta lo que te pusiste, luces increíble y muy rica.
- Que bueno que te guste mi amor.
- Si mucho bebe, mira como me tienes.
- ¿Yo provoque todo esos papi?
- Si, eres una PUTA CERDA Sarid, bajame el pantalón que mi verga esta a punto de estallar y romper el boxer.
- Hay papi me gusta mucho que me digan cochinadas así.
- ¿Si perrita?
- Si, si mucho
- Anda bajame el pantalón y el boxer que te voy a follar esa boquita perra sucia.

La gordita putona procedió a bajarme y quitarme el pantalón, mientras yo me quitaba lo demás, estaba solo en boxer, vio como mi pene se marcaba por lo duro que estaba, empezó a sobar mi pene por encima del boxer para luego lentamente ir bajandolo, yo andaba como un toro en celo, quería tomarla de la cabeza y follarle la boca sin compasión, pero deje que haga lo suyo y a su ritmo, cuando me quito el boxer por completo mi pinga salió disparada y moviéndose de un lado a otro, ella con su mano lo tomo y lo tranquilizó, me dijo que se sentía muy caliente y parecía que le había quemado la mano, comenzó a frotar mi pinga suavemente y con una delicadeza, se sentía increíble, eso me relajo un poco, luego empezó a lamer todito el tronco de arriba hacia abajo, lamía también la cabecita y metía la punta de su lengua en el huequito, lo hacía muy bien la perrita, estaba disfrutando como nunca, después ella misma se lo metío a la boca, la chupaba muy rico, una de las cosas que me encanta es que cuando me la chupen suban la mirada y me vean a los ojos, ella lo hacía y encima sonría, esa carita de puta me tenía loco, estaba chupe y chupe mi pinga, yo la tomaba del cabello y le empujaba todo hasta adentro, cuando se lo sacaba salía babeando y con los ojos llorosos, pero eso le encanta a ella, también se metió mis dos bolas a la boca, son pocas las chicas que me han hecho eso, yo estaba al borde ya de llenar su carita de puta con mi abundante leche, le dije que ya me la quería coger, saque un condon y se lo tire al piso, ella aún estaba de rodillas, ya sabía lo que tenía que hacer, abrió el condon y me lo puso lentamente. Ya tenía el poncho bien puesto y listo para darle con todo a la gordita, le ayude a ponerse de pie porque había estado mucho tiempo de rodillas y le quite el brasier, tenis unos pezones enormes, eran como de un color rosado, primero empecé a acariciarlas y a decirle lo mucho que me encantaban, luego me puse a lactar como un bebé, no quería despegar mi boca de esas enormes tetas, chupaba y mordía suavemente sus pezones, eso le encantaba y la ponía más caliente, mientras le chupaba los senos con su mano me pajeaba. Después de comerme sus tetas hasta más no poder y recibir tremenda paja con sus suaves manos estaba como una bestia loco por romperle todo, la tire a la cama y le dije que se ponga como lo que es, como una perra, se puso en cuatro al borde de la cama, no se imaginan lo enorme que se miraba su culo en esa posición, la vista era increíble, en ese momento me volví un animal salvaje, me acerque y sin pensarlo le arranque la braga, se lo rompí con las dos manos y lo tiré al piso, creo que se molesto un poco pero en esos momentos ni me importo, le metí unas buenas nalgadas a ese enorme culo y le dije:

- Eres una perra muy rica y tienes un enorme culo de marrana mi amor.
- Si soy muy perra papi.
- Si, eso eres, por eso te puse así como perra para castigarte y darte lo que te gusta.
- Dame ese wuebo ya papi.
- Espera perrita, primero quiero darte una pequeña lubricada.
- ¿Una pequeña lubricada papi?
- Si mi amor, voy a chuparte esa rica y carnosa concha que tienes.
- Hazlo, me encanta eso amor.

Metí mi cara entre sus nalgotas y me puse a chupar su gran concha, que rico besaba y chupaba esos carnosos labios, le metía la lengua y soltaba unos gemidos, pedía y pedía más, esa noche quería darle por el ano así que miéntras me comía su gorda totona con mi dedo índice busque el huequito de su ano, una vez que lo encontré fui metiendo mi dedo suavemente, ella soltó un pequeño grito y me pidió que no lo haga, obviamente no le iba hacer caso, seguí metiendo mi dedo hasta que entró completo, se sentía tan calientito y apretadito ahí adentro, estuve comiéndome su concha y metiéndole dedo por un rato, quize meterle más dedos pero dije mejor después, ya quería meterla la pinga y hacerla mi puta. Termine de lubricar su rica concha y me puse atrás de ella, manoseaba sus nalgotas y con me pene la golpeaba, ya estaba listo para clavarle toda mi pinga, abrí sus nalgotas y se la fui metiendo de a poco, una vez que se lo metí completo empecé a cacharla con todo, que rico gemia y decía groserías la gorda puta, pedía más y más pinga, me la estaba culeando en 4 a mi antojo, le golpeaba el culo y le decía perra, zorra, miles de insultos qué la volvían loca, a ella le encanta el sexo rudo y que la traten de esa forma, si vieran como se pone cuando le digo miles de cochinadas al oído, la gorda estaba sudando como cerda y gimiendo sin parar, con cada insulto se ponía más y más caliente, movía su enorme poto en círculos, de atrás para adelante, se estaba devorando por completo mi pinga, mientras meneaba el culo como si estuviera bailando le abrí las nalgotas y me metí nuevamente mi dedo por el ano, pero esta vez fueron dos dedos juntos, se lo metí en seco y de una, soltó un grito y hasta me dijo:

- AHHHHHH, coño e' tu madre, hijo de puta.
- Callate zorra, ya te dije que esta noche te voy a reventar ese ano.
- Mi ano no papi.
- Que si zorra hija de puta, mira como estas sudando como cerda y gimiendo como loca.
- Se siente muy rico papi.
- Si mucho, te gusta el maltrato y la pinga, eres una gorda muy puta.
- Lo soy, lo soy AHHHHHH.

Se sentía demasiado rico ese ano, quería ya mismo que mi pene estuviera adentro, pero ya estaba por venirme, le había dado bien duro por la concha que ya tenía que soltar la leche, ella andaba ya bien mojada, sudada y cansada, tenía que acabar ya para descansar y darle por el ano en el siguiente round, le dije que aguante y siga moviendo así de rico su culo que ya estaba por venirme, siguió moviendo su culo y pidiéndome a gritos que le diera lechita, al final termine soltando la leche, llene por completo el condon, ella cayó rendida y se tiro boca abajo a la cama, estaba bien sudada y mojada, yo estaba más que feliz en esos momentos, me quité el condon y se lo tire al culo, me acosté a su lado, la abracé y le dije que descansemos un poco para lo que se viene, no le dije nada más, deje que descanse un rato y luego nos pusimos a conversar un poco.

Miéntras conversábamos salió el tema de los tríos, yo la verdad aún no eh participado en en ninguno, pero ella me comentó que con su segundo enamorado hicieron uno, fue un trío MHM, fue más que todo por complacerlo a él, según estaba bien enamorada y el se lo pedía mucho, con ese tema de conversación mi pinga empezó a crecer rápidamente, me pare a traer un condon, le dije que me lo ponga mientras nos comíamos los labios, ya era hora de darle por el ano y llenarselo de leche caliente, le dije que se volteé y se ponga de perrito porque me encantaba como se miraba se enorme culo en esa posición, se puso como perra en cuatro y levantado en culo, ya estaba listo pero tenía que preparar primero el terreno, se lo empuje de un solo golpe por la concha, empezó a gritar, gemir, y pedir más la gordita, le estaba follando la concha a mi antojo, en ese momento estaba totalmente sumisa, así que suavemente empecé a meter mis dedos en su ano, la potona estaba chillando y pidiendo que no, pero le dije:

- Te dije claramente que esta noche te rompería el ano perrita.
- Yo casi no lo hago por ahí papi, me vas a lastimar.
- Tranquila, relájate perrita, lo vas a disfrutar mucho.
- ¿Me lo prometes amor?
- Si mi amor te lo prometo.
- Esta bien pero con cuidado.

Ya tenía luz verde para romperle ese anote a la gordita, se lo quería meter a pelo, así que me quité el condon y comencé a abrir sus nalgotas, estaba bien sudada y mojadita, use ese sudor y esa agüita como lubricante, ya el terreno estaba listo, tome mi pinga y la llevé directamente a su ano, al parecer no mintió cuando dijo que casi nunca hace sexo anal, ese ano estaba selladito y casi como nuevo, lentamente fui metiendo primero la cabecita, costó un poco porque gritaba y se quejaba mucho que le dolía, me ayude con un poco de saliva y su sudor, hasta que por fin entro la cabeza, no se imaginan esa tremenda vista, todo el tronco afuera y solamente la cabecita adentro, se sentía muy calentito y me apretaba tan rico, que sensación tan exquisita, ella estaba soltando gritos y bien agitada, pero tenía que seguir metiendo el resto, me dijo que me conforme con meter la mitad porque todo completo la va a lastimar, le dije que se callara y le metí par de nalgadas para que se tranquilicé, seguí metiendo poquito a poquito, se sentía de lo más rico, el mejor ano de mi vida, ella no paraba de gritar, le dije que se incline un poco más para abajo y que se agarré bien de las sábanas, de un golpecito logré meter más de la mitad, grito tan fuerte la gordita, estaba super agitada y manchando las sábanas de sudor, ya faltaba poco le dije que aguante, se sentía claramente como por dentro se dilataba más y más su ano, me dijo que ya no se lo metiera de golpe y que meta lo que falta de a poquito, fui metiendo poco a poco hasta que entro todo por completo, se sentía de maravilla ahí adentro, ese placer era único, nos quedamos unos minutos ahí pegados sin hacer nada, le acariciaba el culo y le decía lo mucho que estaba disfrutando, ella me decía que era un cabron muy malo, pero que al final se logró y que no estaba nada mal. Yo comencé a moverme suavemente, ya se estaba acostumbrado al tamaño, me pidió que ya le diera, así que a un ritmo normal empecé a tubearla, poco a poco fui subiendo la intensidad, ambos estábamos gimiendo y disfrutando al máximo de ese momento, yo con una mano la tome del cabello y con la otra la daba nalgadas, la tenía gimiendo y gritando, me pedía que pare y que le dea más suave, pero al contrario empecé a embestirla con más fuerza y darle más duro a ese enorme poto, tenía las nalgotas bien rojas, me decía:

- Papi eres un cabron pero me gusta.
- Lo se mi amor, se que esto te gusta.
- Si mucho, al principio sufrí pero ahora estoy gozando.
- Y vas a gozar más putita culona.
- Soy tu putita, méteme todo.
- Si, esto era lo que quería hacerte desde que te vi gorda zorra.
- ¿Desde el principio siempre quisiste mi ano no cabron?
- Desde el primer día supe que eras una puta cerda que le encanta la pinga.
- Me encanta tu pinga y como me revientas el culo.
- Te voy a dejar el ano bien abierto y escurriendo semen perra.
- Lléname el tanque papi.
- Ando pídeme que te llene el culo zorra.
- Papi lléname de tu leche.
- Sigue así gorda puta, ya estoy por correrme.
- Me encanta como me hablas amor, dame tu lechita.
- Sigue perra, sigue perra, ya se viene.
- Esta perra quiero leche papi, dame.

Ya estaba a punto de soltar la leche y llenarla por completo, ella no paraba de pedirme leche y decirme groserías, hasta que por fin llegó le momento de depositar todo mi semen caliente, me vine por completo adentro de su ano, ella nuevamente cayó boca abajo a la cama y yo sin sacársela del culo me recosté encima de su espalda, se sentía muy rico las pulsaciones que hacía mi pinga, estaba soltando las últimas gotas de leche, ambos quedamos rendidos, yo no se la quería sacar y no me quería bajar de su espalda, espere a que mi pinga vuelva a su tamaño normal y ella se relaje un poco, después de un rato mi pinga se tranquilizó y volvió a su tamaño normal, me lavante y le dije que quería ver como había quedado su ano, se puso de cuatro patas y ella misma se abrió el culo, su ano estaba rojito y escurriendo mi leche, con mis dedos el semen que escurría se lo metía nuevamente a su ano, metía y sacaba mis dedos de su ano, al final mis dedos salieron llenos de leche y de sus fluidos, se lo metí a la boca y le dije que probará, me limpio los dedos y se trago mi lechita, al final me tire a la cama, la abracé de cucharita y nos quedamos dormidos desnudos.

Cuando despertamos ya era bien tarde, nos metimos a la ducha, me dijo que tenía prisa y que tenía que irse ya, pero yo había amanecido muy caliente y con ganas de más, me dijo que sería para la próxima y que me aguante un poco, accedí y le dije que para la próxima quiero verla tragando toda mi leche, me dijo que me daría la mejor mamada de la vida, cuando se estaba cambiando no se acordaba que le había rotó su braga, le dije que le compraría una y muchas más para cada encuentro que tengamos, al final se tuvo que ir solamente con el pantalón y sin ropa interior, baje a embarcarla y nos despedimos con un rico beso.

Luego les estaré contando como la gordita golosa se trago todita mi leche, también hemos estado platicando sobre hacer un trío, le dije que hagamos un MHM, me dijo que si pero con una condición, que después tendríamos que hacer un trío HMH, esperemos se logre y podamos encontrar con quienes cumplir esa fantasía.

 

Que rico carajo soy hincha de las Gordibuena s siempre se prestan para el anuel. Cuando dicen no no, se traduce como un si como sea

 

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Exacto, tu si sabes. Todas las gorditas con las que eh estado se han prestado para el anuel, aunque digan que no y no quieran siempre terminan entregando el asterisco porque en el fondo les encanta el sexo anal.

 

Esas gordas sudan cómo mier... y les apesta el anuel por la transpiración. Solo sirven pa una noche. Veo que se la mandaste a guardar sin protección por el ano. Hasta ahora no entienden que el sexo anal transmite más fácil el VIH que por la vagina??
Usen protección colegas, no jueguen a la ruleta rusa.

 

cual es su numero para contactar

 

Dónde encuentro una vaca de esa dimensión que rico