coreana en Neuquen Argentina.

Saludos nuevamente a la cofradía, siento necesidad de compartir, comunicar, narrar la novedad que he vivido, un poco de la experiencia mía, y de las personas con las que convivo.
Tomo conciencia, es decir, trato de entender y de descifrar lo que me está pasando con esta interacción, concreta con la realidad, es como una travesía que hacemos, en diferentes ocasiones, en el camino de la vida, este es el recorrido que solemos hacer, de una u otra forma.

Hacen seis meses, llego a nuestra casa y entro en nuestras vidas, una mujer coreana de treinta y cinco años, llamada Jiyu, de carácter fuerte, fuerte en espíritu, pero muy sensible, es la mejor manera de describir a una mujer resiliente que hay que admirar de verdad. Porque el amor fue más grande que sus miedos, sus fuerzas fueron más grandes que sus dudas, peleo y tuvo la virtud de esperar por lo que realmente le lleno el alma.
Ha sido un tiempo aprendizaje. Para ella y para nosotros. Diferentes costumbres, valores culturales, creencias, ideas, objetivos, tradiciones, formas de comida, de celebrar fechas especiales, diferente forma de encarar la vida, de resolver problemas, diferentes interpretaciones de los significados en los idiomas, diferente lenguaje corporal, un choque cultural.
Aprendimos Jiyu y yo a ser tolerantes y a respetar las diferencias y características del otro.
Mi familia y yo aprendimos a conocer las costumbres de otra cultura. Que su sistema de valores, es la familia, la benevolencia, rectitud, responsabilidad, sabiduría, decoro.
La aceptación de mi madre fue lenta, difícil, por consejo de un amigo tuve que hablar muy fuerte con ella y recurrir a la biblia Genesis 2:24.
Jiyu aprendió a lidiar con el carácter de mi madre, en su cultura le tienen respeto al adulto mayor, los valores de la familia.
Jiyu a veces decía muy triste solo vine a cambiarte la vida, no hubiera venido.
Aprendimos a la construcción de vínculos para adoptar a una nueva integrante en nuestro entorno, como dirían mis hijos apareció en sus vidas, así de pronto sin haberla visto ni conocido antes, como seria en una relación normal, donde las cosas van pasando de a pocos.
Aprendimos a desarrollar nuestros lazos emocionales, hacia una persona, aceptarla, respetarla y quererla tal como es.
Aprendimos a compartir espacios materiales, pero los más importantes respetar los espacios personales.
La matriarca de la casa poco a poco le fue delegando autoridad, y que haceres de la casa, entendió que Jiyu llegó para quedarse, y acepto que ya no estoy solo, que comparto mi vida y mi cama con Jiyu, también acepto que algunos fines de semanas es solo para nosotros dos.
Aprendimos que, si bien es cierto que mi madre, abuela y madre para mis hijos fue la brújula que guio nuestro camino por muchos años, ahora hay una nueva inspiración para seguir en el camino, que nadie se queda atrás y a nadie se le olvida.
Fueron muy duras las seis primeras semanas.
Aprendimos que, con tiempo lo que hoy es difícil, mañana será un tesoro.
Aprendimos a divertirnos más en familia sin la tecnología moderna e interactuar sin importar las edades intergeneracionales.
Aprendí a conocer cuáles son mis mejores cualidades y limitaciones, y aceptarlas, aprendí,
a querer, amar, respetar a la persona que dejo todo, por estar a mi lado. eso no significa que sea una persona sumisa, ni conformista, ni que ha renunciado a sus sueños porque estos son los que nos marcan el camino a seguir y las metas por alcanzar, porque un guerrero, no es que siempre gana, es el que siempre lucha.
Mi madre acepto que sus bebes ya son jóvenes, por muchas insinuaciones de Jiyu acepto que traigan a sus enamoradas, y se vean en casa, mis hijos están felices.
Mis hijos volvieron aprender que podemos salir los cinco, ellos dos, mi madre, Jiyu y yo, en domingo, o feriados, a quemar gasolina sin ningún apuro, ni destino, solo el hecho de pasear y gozar en familia.
Aprendí a vivir sin un aparato de tv en el dormitorio, Jiyu fue lo primero que hizo al segundo día de llegar a casa, su filosofía es que el dormitorio es para la pareja, para tener tiempo de conversar, de tener más intimidad, descansar mejor, resolver problemas cotidianos, es algo que funciona muy bien con nosotros. Experimentamos con nuevos sabores y olores, con los aceites de masajes corporales, nuevas fragancias de aromaterapia, lubricantes con sabores, chocolate negro en el cuerpo, me baila desnuda, o en lencería, practicamos juegos en la cama, nuestra vida sexual esta tan activa como antes. Vivimos nuestra sexualidad más allá del contacto físico y lo expresamos atreves de fantasías, deseos, erotismo, desterramos los tabúes y perjuicios, de nuestra intimidad. Me sigue preparando te de canela, canela y kion, jugo de sandia y limón.
Aprendí a dejar el móvil en la puerta del dormitorio en una bolsita que Jiyu compro especialmente para ese fin, La opinión de Jiyu es. quien después de las diez quien te va a llamar del trabajo, todos están descansando y los amigos buenos están en sus casas.
En cuanto al dinero, quincenalmente le daba a mi madre una cantidad para los gastos de la casa, al poco tiempo que llego Jiyu, dice mi madre que el dinero no se lo de a ella, que se lo de mejor a mi mujer, para que ella se encargue, le digo a Jiyu que era ahora la encargada de administrar el dinero del gasto de la casa, su contestación fue que lo deje en una cajita como hacíamos en la argentina que ella tomaría lo necesario y que si sobraba lo guardamos
En este tiempo la veo más alegre, que ríe más, no la sonrisa que siempre está a flor de labios, la risa sonora, que expresa alegría, esta relajada, tranquila, bromea más con mis hijos el último de ellos le dice Jiyu no hermano, lo mira, me mira con esa forma tan de ella de poner los ojos y sonreír para contestar, no hermano ahora tu saber primero si hermano hacer.
Mi madre le dice hablas como ese muñeco de las galaxias, se refiere al maestro yoda

La presente a las amistades personales muchos quedaron asombrados porque nadie sabía de ella, también a los amigos de trabajo, en un compartir por fiestas patrias en la Cía. Donde laboro, fue la envidia de un par de damas, y la admiración de muchos caballeros.
Mis dos hermanos, sus esposas, y parte de la familia la conocieron durante la reunión por los 71 años de mi madre, la aceptación de ellos fue muy rápida y le hicieron bromas suaves, pesadas, Jiyu solo atinaba a mirarme y sonreír a los presentes, hasta que las enamoradas de mis hijos la salvaron de las preguntas indiscretas, demostró ser una buena anfitriona.
Se reúne con mis cuñadas, van de shopping a gamarra, al centro de lima. En el barrio chino hace de las suyas comprando cosas para hacer sus comidas coreanas, Jiyu aprendió a comer casi sin ají porque la comida coreana es un poco picante.
Jiyu dice que en argentina no tenía con quien hacer esas caminatas maratónicas viendo cosas ni visitando tiendas, todo es nuevo para mí.
A echo muy buenas migas con mis cuñadas que la están llamando para salir o simplemente para reunirse en nuestra casa o en la casa de alguna de ellas.
Aprendí que el dinero y las tarjetas se administran mejor siempre entre dos, Jiyu estableció un presupuesto mensual, establecimos un objetivo financiero juntos.
Mis hijos están aprendiendo coreano, Jiyu mejora su español esta es la ventaja de ser una pareja intercultural siempre, hay dos idiomas, dos gastronomías, dos familias en diferentes países, más adelante nuestra descendencia tendrá dos nacionalidades, siempre habrá dos de todo.
Mi madre está muy contenta con Jiyu dice que hace bastante tiempo no veía la casa así de limpia y ordenada.
Aprendimos a darle su espacio personal, festejamos sus pequeñas victorias, le demostramos empatía, y le damos nuestro apoyo y amor a Jiyu cuando esta triste, cuando se frustra, cuando tiene nostalgia por su familia, porque Jiyu se ganó a punta de mucho tesón y amor, el respeto y el amor de mi madre y el de mis hijos.
Salimos de paseo a Pachacamac, de paso por los viveros me lleno la camioneta de plantas, creo que por eso mi madre la quiere porque ambas comparten el mismo gusto de las plantitas.
Estuvimos fuera de casa varios fines de semana, fuimos al norte chico, la pasamos maravillosamente bien, Jiyu probo nuestra gastronomía norteña, quedo encantada.
En agosto tome vacaciones después de tres años, tomamos un tour de cinco días cuatro noches a la selva central, fue emocionante para Jiyu, gozar de los paisajes, pueblos, gentes comidas, nunca olvidaremos esta experiencia nueva para ella.
Por motivos personales hicimos un viaje a Tacna por tres semanas, durante este tiempo de viajes, aprendí que la felicidad no se mide por el dinero que tenemos o dejamos de tener, sino por esas cosas sencillas que nos da la vida, las risas, las conversaciones, los juegos, nuevos lugares, los paisajes, la variada gastronomía de nuestro Perú, las viejas y nuevas amistades que conoces, viajar con Jiyu fue una experiencia inolvidable que fortaleció nuestra relación llena de aprendizajes que recordaremos por siempre, entendimos cómo se hace más grande el amor por las experiencias malas o buenas que se viven con la persona que amas.
Estamos regularizando su situación en el Perú.
Ya está registrado en el consulado coreano su ingreso al Perú, tuve que firmar una declaración que se está quedando en mi casa, como mi invitada, estamos esperando que migraciones peruanas le otorguen el permiso temporal de permanencia.
Si quisiera casarme con ella no puedo porque sigue casada en corea,
Así figura en el consulado coreano. Tiene que viajar a corea para regularizar su situación matrimonial y poder pedir un permiso del padre para traer a su pequeña.
Jiyu dice que por ahora no, más adelante quizás para agosto del próximo año.
Conocí a sus padres por video llamada, se asombraron de saber que se encontraba en Perú, con una nueva familia, Jiyu traducía todo lo que los señores decían, gritaron y se enojaron muy fuerte, después el padre de Jiyu antes de despedirnos, menciono que nada en este mundo sucede al azar, todo sucede día a día y ese es el destino que nosotros vamos construyendo, si él hubiera sabido cual sería el destino de Jiyu no hubiera dejado que viaje ella sola sin su hija. Nos dieron sus bendiciones y que las puertas de su casa estarán siempre abiertas para nosotros, su pequeña niña está bien cuidada por ellos.
El día 26 de octubre hizo un año que conocí a Jiyu en Neuquén Argentina en su pequeño local, cerca de la plaza Julio Argentino Roca, donde aprendí que un deseo no cambia nada, una decisión lo cambia todo, que todo lo bueno que sucede en la vida, sucede por algo que cambio.
Mi vida cambio y el resultado final es la casualidad, y hoy es la casualidad de mi felicidad.
Compre un anillo de promesa, dirían mis hermanos y cuñadas, si ya es tu mujer para que, es ridículo, estoy agradecido con los que dijeron no, gracias a ellos lo hice, por nosotros que bien se siente dar un momento de felicidad a la persona que amas.
Ese día 26 salimos a cenar fuera de casa, estaba linda, Jiyu tenía una falda negra entallada ligeramente debajo de las rodillas, con una blusa color palo rosa, con una cinta de la misma blusa que le caía por el lado derecho, cabello suelto, maquillada levemente, zapatos de tacos altos, estaba radiante, para mi simplemente hermosa, a mitad de la cena me paro y le muestro el anillo, Jiyu, grito, salto, se emocionó hasta las lágrimas, me abrazo no le importo donde estábamos ni que hubiera personas extrañas para darme un gran beso, muchos besos, varios de los presentes aplaudieron, al retirarnos algunas personas nos deseaban lo mejor, suerte y bendiciones, terminamos la noche entre las sábanas del hotel Selina en Miraflores, donde hubo mucho amor y sexo.
No duda en demostrarme su amor en todo instante, un buen día mi hijo mayor invito a su flaca, su hermano y su flaca, Jiyu y yo, al shimaya a tomar ramen, estábamos comiendo cuando Jiyu muerde la mitad de un Rolls y el resto me lo da en la boca, todos se rieron Jiyu se puso colorada, se inclinaba y pedía perdón, muchas veces eso hace en algún restaurante cuando estamos los dos.
Cuando salimos de paseo, de compras, o algún centro comercial, me toma de la mano para entrar, en su cultura no se dan besos en público, Jiyu rompe esa regla, no le importa donde estemos.
Ella es mi yeojachingu, novia en coreano. Y la saranghae la amo.
Esta es mi vida en estos seis últimos meses de vivir con Jiyu, cada día que pasa me enamoro más de su forma de ser, sencilla, sin perjuicios, ni miedo al qué dirán, aprendí a conocer sus gestos, cuando se enoja cierra los ojos y voltea la cabeza, cuando algo no le sale bien pone sus labios como trompita, cuando esta nerviosa se muerde el labio inferior, cuando logra algo abre los ojos y hace la forma de corazón con sus dos manos, cuando esta alegre es difícil hacerla callar, simplemente es ella, es mi mundo o como diría Jiyu es nuestro mundo.
Jiyu nos unió más como familia solo con comprensión y mucha, pero mucha paciencia
Estoy próximo a viajar nuevamente a Argentina, pero esta vez solo por tres semanas Jiyu, dice, sabes que siempre hay muchas aventuras allí afuera esperando, yo estaré aquí para ti siempre
Elevo la mirada y una oración al cielo y le doy gracias al todo poderoso y a la vida de poner a esta hermosa mujer como mi compañera en este duro camino que es la vida.
El significado de su nombre en coreano es, mujer valerosa, hay que ser muy valiente, por todo lo que dejo atrás, renunciando a una vida casi echa, se arriesgó demasiado lejos y encontró, un amor entero, intenso, verdadero, estamos viviendo una luna de miel que ya dura seis meses, y va para más.
Creo que un hombre hace lo que puede para cambiar su destino, si no somos capaces de cambiar una situación, nos encontramos ante el desafío de cambiarnos a nosotros mismos.

Gracias a los cofras y a todos que nos desearon todos los parabienes y sus buenos deseos
Gamsahamnida, Jal gayo.

 

Solo me queda felicitarlos y desearles lo mejor en esta vida

 

Que historia, que hermosa es la vida!
un abrazo de gol!! buenas vibras.

 

Muy erotico el relato y sobre todo con un final feliz para uds.... felicitaciones cofrade por el lindo destino que encontro...... saludos

 

Excelente relato cofrade, espero que todo le vaya bien

 

Los mejores deseos para ustedes, y qué hermoso relato. Gracias por tomarte el tiempo de compartirlo. Saludos.

 

las mejores vibras... creo que encontraste lo que te faltaba en la vida

 

Excelente relato y muchas felicidades

 

Cuando llegan sus amigas avisas al foro

 

"También creo que ya me cansé que la única ventana a la vida sea, a través de mis hijos." Qué buena frase cofra! Acabo de salir físicamente de la casa de una relación de 12 años, y siento que nunca tan cierta la frase, buenas vibras!

 

No es momento para juzgar sino para poner las ideas de manera positiva y dejarte en claro que si puedes salir de esta situación, por qué la vida continúa, y si te caiste ayer levántate hoy cofra pparamo suerte y mis mejores vibras para UD.

 

Felicidades bro. Realmente una historia que va más allá del placer y que termina enlaza do los sentimientos y buenos pensamientos. Que sigan unidos por el bien de uds.

 

Saludos, nuevamente a toda la cofradía. una vez más para compartir con Uds. La experiencia de desafíos que pueden cambiar nuestras vidas, el saber adquirido viviendo el día a día, de vivencias que trascienden lo cotidiano, porque esto ocurre con el paso del tiempo, sin posibilidad de adelantarse a él, somos seres humanos y los que tenemos la perspectiva única de experiencia de vida y los que mejores conocemos los detalles.
Ha transcurrido un año desde que Jiyu llego a Perú, parece que fue ayer, cuando la esperaba en el aeropuerto, a las siete y cuarenta y cinco, de la mañana, verla salir, con un pantalón Jeans, casaca de color oscuro, hasta la cintura, botines de tacos no muy altos, el cabello amarrado en moño, con el carrito y sus maletas, temerosa, ansiosa, desorientada, después de más seis horas de vuelo, más el tiempo de espera, en los aeropuertos de NQN y de Ezeiza BS AS. sin conocer, nada, ni a nadie, un país extraño, confiando solamente en mi honestidad y el amor que le pudiera tener, porque fueron solamente tres meses, de convivir juntos, donde aprendimos a conocernos y disfrutar de la vida, aprovechando todos los momentos felices.
Volver a ver esos ojos rasgados, ojos de sosiego y esperanza que no esperaba ver en mucho tiempo. Unos ojos que han visto y han vividos muchas cosas.
Unos ojos que aún les falta por conocer otras muchas cosas.
Muchas veces Cometemos el error de apresurarnos, en entrar en una relación por, evadir la soledad, por escapar de situaciones personales, o pretender que alguien más llene el vacío de nuestros corazones.
Al verla parada allí en el pasadizo central, esperando, buscando el rostro de la persona que conoce, que la llame por su nombre, que le diga aquí estoy, le cambiaria la vida por siempre.
Me preguntaba estoy listo para empezar una etapa nueva en la vida, será esto lo que busco, como será la aceptación de mi madre, de mis hijos, después de haber hablado con ellos, escuchar los reproches nada constructivos, ni alentadores de mi progenitora, y el aliento de mis hijos a seguir adelante, que ya era tiempo de reconocer mis errores y estar preparado para una nueva relación, a mis cuarenta años asuma más responsabilidades y consecuencias, que deje el miedo de volver a fracasar,
Será amor, deseo sexual, o solo será que Jiyu, sin una educación universitaria y siendo tan competitiva su sociedad, solo quera asegurar el futuro, es un desafío, pero se trata de aprender, con seguridad y confianza, enfrentando el temor.
Pero todos sabemos que hacer algo diferente es lo que nos hace sentir vivos.
Son muchas las cosas que nos animan para seguir adelante, conformar una nueva familia es una aventura.
Igualmente, Jiyu a sus treinta y cinco años, pero aparenta ser menor, se le ve, más joven debido quizás a las dietas alimentarias o a los cuidados que le da a su piel, tenía un desafío, al vivir en otro país, tendría que adaptarse al cambio, a un nuevo ambiente, a la sociedad y en muchas ocasiones también a la diferencia cultural.
Empezar en otro lugar es abandonar ciertas cosas, de la antigua rutina y afrontar el proceso con fortaleza y debilidades, buscando oportunidades, para sumar vivencias.
Decidí explorar las nuevas propuestas que encontrare y antes no conocía, porque las oportunidades están allí y si ellas no vienen entonces caminare hacia ellas.
Puse en la balanza lo ganado y lo perdido en ambos casos reúnen el aprendizaje.
Acepte el reto, me arriesgue, para seguir con lo que iniciamos en un país extranjero para ambos
Solamente levanté el brazo y dije amor
Para que Jiyu reaccionara, dejara el coche y las maletas, para correr a mi lado, nos abrazarnos y besarnos, no paraba de darme las gracias por estar allí, por no abandonarla, no le importaban las maletas, solo abrazarme y estar junto a mí, fueron minutos que parecieron una eternidad,
Salimos del aeropuerto, en la camioneta tenia, un ramo de flores, un regalo y un cartel de bienvenida, pegado en el parabrisas, sorpresa que le emociono mucho a Jiyu.
La lleve a dar un pequeño paseo por, Bellavista, Maranga, San Miguel, hasta llegar a tomar desayuno en la chicharroneria kio de la Av. Universitaria, donde disfruto de unos chicharrones y tamales peruanos, fue momento para adelantarle algo de lo que le esperaba, pues mi madre no es una perita en dulce.
Después de haber lidiado con tres hijos y dos nietos varones, será una situación tensa, apenas amistosa, se trata de dos mujeres que no son familia ni amigas, y se ven forzadas a relacionarse, por un tercero, que, además, es el objeto de sus afectos.
Jiyu tendría que aprender a compartir el mismo techo con mis hijos de 19 y 20 años y mi madre, aprender a respetar sus espacios, sería un escenario un tanto complejo, compartir labores a tiempo completo en casa, eso no quiere decir que Jiyu tenga que cambiar su estilo de vida, ella es muy independiente, es la mujer que realmente quiere ser, lucha por alcanzar las metas que se ha propuesto, sabe expresar sus pensamientos, y sentimientos de forma honesta, directa, y asume las responsabilidades de sus propias decisiones y sentimientos.
Paseamos por la costa verde conversando y tratando de explicarle, el carácter, las costumbres de mi madre, nos estacionamos cerca de la playa, besos caricias, metía la mano entre las piernas, llegando hasta sus partes íntimas, tenía el pantalón desabotonado, estaba con lencería negra, nos emocionamos tanto que casi terminamos teniendo sexo en el carro.
Bueno llego el momento menos deseado para Jiyu llegar a casa, su sonrisa se iba desvaneciendo, los nervios ganaban terreno, pero no importaba yo estaba cerca de ella.
Tomo mi mano y el miedo fue desapareciendo poco a poco, le decía tu solo sonríe y todo estará bien, tú eres única, sé que al inicio será frio, pero con el tiempo todo va a cambiar,
Como es su costumbre muy arraigada de Jiyu se quitó el calzado para entrar a la casa, solo en medias, tener los pies desnudos al entrar a una casa es de mala educación.
Momentos de presentaciones, madre te presento a Jiyu ella es mi pareja de la que ya hablamos
Ola, que tal viaje, le llamo la atención que no use calzado, solo medias y los zapatos pregunto, a lo respondí inmediatamente, es su costumbre, ya te darás cuenta.
Jiyu hizo una reverencia muy formal las manos en el abdomen, cuarenta y cinco grados gusto de conocerla Sra. soy Jiyu, en la cultura coreana se respeta la jerarquía y son muy respetuosos con las personas mayores.
Bueno este fue el primer contacto de las dos damas. Mi madre no le dio la bienvenida solo un frio ola como estas y se retiró a seguir con sus cosas.
Momento para que Jiyu conozca su nueva casa, el jardín, nuestro dormitorio, desde muy lejos la cocina, Etc. etc.
En el dormitorio, abrió una maleta para buscar ropa y ponerse cómoda, nos bañamos, hicimos un delicioso bajo la ducha, terminamos mojados en la cama disfrutando como conejos. Tiempo de abrir maletas nunca vi tantas cremas juntas, colonias para damas, los regalos que traía para la familia, el conocido dulce de leche y los alfajores, los cuales mis hijos dieron cuenta rápidamente de ellos, reconozco que en toda mi vida nunca tuve tantas colonias, como ahora.
Mis hijos se alegraron mucho, de la llegada de Jiyu, al menos el mayor, más efusivo, más cariñoso, la saludo con abrazo y beso, bienvenida seas Jiyu, esta es tu casa desde ahora, cualquier cosa, alguna duda, si quieres salir, ir algún lugar, a comprar, pregúntame no tengas temor siempre seré un amigo para ti.
El segundo también le dio la bienvenida con abrazo, igual que mi hermano no dudes en preguntar, si no sabes algo estamos para ayudarnos ahora eres parte de la familia.
Nos sentamos a la mesa para almorzar y aquí comenzaron los problemas. apareció el matriarcado.
Jiyu muy amablemente entro en un territorio prohibido, la cocina de mi madre, su reino
Que no es solo cocinar para alimentarnos, también donde se entretiene y se relaja,
Olvidar algunos problemas del día a día, donde se pone a meditar, mientras surgen los olores reconfortantes. Algo que no fue del agrado de la matriarca de la casa.
Fueron seis semanas donde no le dio tregua a Jiyu, no con esto quiero decir que la trato mal ni le falto el respeto, era una letanía de un, no hagas esto, no así no se hace, está mal, las cosas las lavo yo, no riegues el jardín eso lo hace el chico jardinero, la ropa de cama tiene sus días de lavado, no uses la lavadora, deja eso la Sra. Charo lo va a hacer, entrar al dormitorio nuestro para arreglar mi ropa, y decirle a Jiyu, las camisas, los polos, no van juntos, tu ropa no la pongas allí, cosas sin sentido, tratando que el hogar funcione a su ritmo, forma y manera.

Jiyu renegaba no podía hacer cosas que ella quisiera, no podía preparar, alguna de sus comidas, no podía atender a la familia como ella decía, se sentía un estorbo, no importa que yo tenga la razón, nunca está de acuerdo conmigo, no respeta mi opinión, critica todo lo que yo hago, me saca que quicio, me desespera, me deja sin energías.
Reconozco que no sabía cómo poner freno a esta situación, no sabía cómo defender a mi mujer.
Mis hijos también se incomodaban por la forma que su abuela no dejaba que Jiyu se desarrolle, tan solo deambulaba por la casa.

llegaba a casa, allí estaba Jiyu siempre cariñosa, amable, con su sonrisa, un hola te extrañe, un beso, un te quiero, le preguntaba que paso, nada, respuesta que nos adentra en un mundo de contrastes, una lucha consigo misma, y con la realidad que le ha tocado vivir, las dificultades de la vida diaria en un país desconocido, pero buscando siempre aquello que más nos una, las lágrimas que brotan alguien tiene que secarlas, no importa él por qué.
Hasta que sucedió lo impensado, era sábado por lo general me quedo en mi habitación hasta un poco más tarde, ocho treinta, nueve, de la mañana.
Queda como anécdota, estábamos con Jiyu desnudos en la cama, haciendo los previos para el delicioso, Jiyu arrodillada entre mis piernas tocaba la flauta.
Momento en que irrumpe mi madre en el dormitorio, como era su costumbre, sin tocar la puerta, no había puesto el seguro, no fue a adrede, nada preparado, pura casualidad.
Se quedo allí parada sorprendida, sin palabras, solo cerró la puerta, sin decir nada.
Creo que en ese momento mi madre entendió que Jiyu, era mi mujer, mi compañera, la mujer que yo había elegido.
Me vestí de prisa y Sali para hablar con mi madre, fue un día un poco raro, me salió todo lo que tenía guardado, todo lo que en estas semanas no había tenido el coraje de decirle,
No fueron momentos de reproches, sino de hablar, de una vez por todas, madre sé que tus sentimientos están lastimados, y estoy determinado aponer las cosas en claro, así es como cambian las cosas, y deberías esperar esto, solo puedo pedir tu apoyo, creo que Jiyu no ha cometido ninguna falta para que la trates así, déjala participar en los quehaceres de la casa, ahora ya conoces que pasa en la intimidad nuestra.
Me gustaría que se resolvieran todas las cosas y sea una relación, transparente, y sin obstáculos, Jiyu es una persona sincera y directa en sus apreciaciones y las expresa sin reserva, vas a la iglesia entonces entiende lo que dice la biblia en Genesis 2:24 por favor.
No te pido que seas una suegra perfecta, pero ubica a Jiyu en el rol familiar, no la prejuzgues, dale la oportunidad para que la conozcas mejor,
Sabemos que se puede equivocar muy fácilmente, por sus tradiciones o la forma de comunicarse, si te es posible y cuando puedas ayúdala, ahora tengo una compañera, un nuevo comienzo por favor no lo destruyas ayúdame a conservarlo.
Hazlo por Jiyu y por mí, tú también pasaste por esto en algún momento, con enfados y enojos no se logra nada, no somos perfectos madre.
Desde ese momento mi madre cambio y dejo que Jiyu vaya tomando de a pocos el lugar que le correspondía en nuestra familia.
Jiyu participo en la cocina y que haceres en la casa, nos dejó sin jueves de pizza, sin coca cola, pollo a la brasa sin exceso de piel, sin comida chatarra, mi madre peleo por mucho tiempo por que dejemos estas costumbres, sin lograrlo, aprendimos a comer más verde, más sano diría Jiyu, lo que más siento que la Sra. Que ayudaba a mi madre en los quehaceres en casa, después de varios años, se quedó sin empleo.
Entre Jiyu y mi madre se hizo un vínculo más fluido sin llegar a ser una amistad, Jiyu escucho sus consejos y opiniones, mi madre acepto y también escucho sus opiniones, y sus aportes.
Mis hijos son los que más disfrutaran de esta amistad, si bien es una confusión y adaptación al nuevo circulo y espacio familiar, la inclusión de Jiyu fue rápida, en nuestra dinámica familiar, debido a asociaciones y a situaciones agradables con ellos.
Y aunque suene paradójico, la única persona en protestar y criticar mi nueva relación, fue mi ex esposa, diciendo sin ninguna lógica, ni sentido, que no estaba bien que sus hijos sean atendidos por una extranjera y asiática menos, que la cultura los iba a transformar, entro en una pugna sorda con nosotros por querer llevarse a sus hijos después de trece años sin saber los traumas que les produjo la separación, el tiempo, esfuerzo y comprensión que le tomo a mi madre para sacarlos adelante, ser su guía y trasmitirles su sabiduría a través de la calidad de su tiempo.
Mis hijos adultos con buenos valores morales, tolerancia, solidaridad, respeto, tuvieron que poner las cosas en claro con su madre, precisando sin ofender, a la persona que tenían adelante una negativa rotunda, sentimos un alivio mi madre y yo por no tener más que discrepar con mi ex.
En el mes de noviembre tuve que viajar a Neuquén Argentina, donde tuve que dar muchas explicaciones al entorno familiar y amical de Jiyu, porque era necesario enfrentar la situación, lo que había sucedido con el repentino viaje de Jiyu, donde hubo muchos reproches, que esa no era la manera de actuar, pero al mostrar fotos, videos, y hacer video llamadas, sobre todo con su primo, fui aceptado nuevamente por todas las personas que estiman a Jiyu.
Cómo es de esperar no tenía que decirle nada al amigo Bruno que es lo que había acontecido con Jiyu y yo, solo me hizo un comentario muy pequeño que la china había desparecido de Neuquén, y que se había ido a Buenos Aires.

Llegaron las fiestas de diciembre, reunión de la familia, hermanos, cuñadas, sobrinos, hijos, mi madre, Jiyu.
Este año fue diferente para nosotros compartimos las costumbres de Jiyu y las nuestras, compartimos bulgogi, (carne a la parrilla) fideos de camote, kimchi y postre navideño una torta bien elaborada. Nuestro tradicional pavo. Paneton y chocolate.
Celebramos nuestro año nuevo de la forma más tradicional las trece uvas con champan, con la familia completa y algunos invitados, donde una vez más Jiyu demostró ser la buena anfitriona que es.
Nuevamente en febrero celebramos el año nuevo coreano, Jiyu se preparó para honrar a sus antepasados, con su charye ritos ancestrales, compro regalos para la familia, a mi madre le dio una bolsita con un presente, cocino su sopa tteokguk de pastelitos de arroz, preparo una mesa con diferentes alimentos, y postres coreanos, lo disfrutamos mucho, una fiesta muy diferente donde se respiró paz y amor.
El catorce de febrero día del amor y la amistad. También es una celebración un tanto especial para Jiyu, se regalan chocolates y tarjetas cargadas con muchos sentimientos según su tradición. la celebración del amor en Corea en muy curioso son varios días en diferentes meses las celebraciones.
Jiyu y la enamorada del mayor de mis hijos tienen un nuevo emprendimiento desde hace tres meses en el cual les va bastante bien, debido al carisma de ambas y forma de ser de Jiyu, porque también quiere aportar con algo a la economía familiar y gastos de su viaje a Corea del Sur

Jiyu ya hizo contacto a través de su familia y de un abogado con el padre de su niña en Corea, estaba planeado que Jiyu viaje en setiembre a Corea, para arreglar su situación matrimonial, esta persona ha pedido una compensación monetaria para darle el divorcio de mutuo acuerdo y firmar todos los documentos para que Jiyu pueda traer al Perú a su hija Hee – Ran, una linda niña muy activa y curiosa, me conoce como su samchon, mis hijos son sus chingu, mi madre es sugnyeo, tío, amigos, señora en ese orden.
Pero los planes se truncan, por cosas que suceden sin pensar, y porque Jiyu para esa fecha tendrá siete meses de embarazo, no la dejare que arriesgue su salud o integridad física, ni exponerla a que su ex la vea con la pancita, otra manera de traer a Hee- Ran, es que la madre de Jiyu, traiga a la niña con una autorización del padre, firmada ante un juez de familia en Corea, o esperar el tiempo prudente para que Jiyu pueda viajar y hacer todos los trámites que sean necesarios, para los procedimientos del caso, dejando al nuevo o nueva integrante de nuestra familia en Perú por unas semanas al cuidado de mi madre.
Hee -Ran llegaría a Perú bordeando los casi 6 o 7 años de edad.
Pero la vida continua Jiyu, asume esto con mucho esfuerzo y disciplina personal, y se levanta más fuerte, para seguir adelante con sus nuevos proyectos, metas que juntos nos hemos trazado.
Tengo la firme convicción de que todos tenemos un lugar en el universo, nuestro sitio completo quizás aun esta por descubrirse en nuestra vida, esa medida de paz que todos buscamos y pocos encontramos, aun que desgraciadamente muchos aun, no lo han encontrado, y otros muchos luchan por mantenerlo alejado de sí mismos.
Son en los momentos como ahora que abro los ojos, respiro profundamente y miro al cielo.
Pienso en mis recuerdos, en la gente que está conmigo y en la gente que ya no lo está.
Doy gracias por ello, y por todo el recorrido realizado, y el que falta realizar, todo lo que me ha ido guiando en el último año para encontrarme en el punto donde me hayo ahora.
Estoy aquí sentado escribiendo estas líneas acompañado de mi mujer, ahora es cuando me doy cuenta de que he encontrado esa paz y sosiego, que mi ser iba pidiendo, porque antes incluso rodeado de la gente y las cosas que supuestamente quería, y me querían me sentía solo, estado que cambiaba cuando llegaba a la comodidad de casa y estar con mi madre mis hijos, mientras que mis pensamientos y sentimientos internos dormían en la oscuridad de mi habitación.
Me forje una máscara con la que me acondicionaba a la sociedad y a veces a la familia que promovían con sus comentarios, lo que a ellos les parece correcto o lo incorrecto de mi soltería, en la forma de vivir de cada uno de ellos.
No obstante, en el último año las cosas cambiaron en mi vida he conocido aspectos y a la persona que me ha demostrado que lo que mi corazón pedía a gritos, existía más allá de mi entorno habitual sin necesidad de usar la máscara social que había fabricado frente a otros.
Nadie puede imaginar la fuerza con la que Jiyu irrumpió en mi vida, nadie sabe el amor que le tengo. Me gusta su forma de ser sencilla, directa, verla caminar desnuda por la habitación, cuando toma el control durante el sexo, sexualmente también ella conoce su cuerpo, sabe cuáles son las caricias que nos hacen llegar al clímax, experimentar y explorar lugares para hacer le delicioso, poner las cosas en claro como pareja, hablar de sexo sin tabúes y atrevernos a probar la pasión y alegría, para aprender y madurar más como pareja, que dicho sea de paso a mí me agrada mucho.
No suelo publicar cosas tan personales, como ya lo he mencionado antes, ya que suelo ser bastante reservado, pero de vez en cuando rompo esta regla
Hasta aquí llego la experiencia de mi propia vida, he tratado de expresar la trayectoria vital y de muchas de las experiencias adquiridas, tratando de organizar mis recuerdos desde mi punto de vista personal, en un relato, en primera persona.
Tengo fe en los seres humanos, porque todos viajamos, por esta vida en el mismo planeta, no importan las diferencias políticas, razas y cultura, se trata simplemente que la gente ayude a la gente,
Gracias a toda la cofradía no pensé que personas ajenas podrían hacerme sentir esa confianza fuera de las cuatro paredes de mi domicilio, Nuevamente gracias agradezco su valioso tiempo y sus comentarios. Hasta siempre.

 

Muy buen Relato de una Experiencia que le Valla muy bien en esta nueva está de su Vida

 

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Felicidades cofra que los buenos tiempos siempre estén contigo , buen relato , buenas experiencias disfrute la vida.