sagem
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Cófrades vengo a contarles lo que me sucedió hace meses, resulta que en mi centro de labores fui al baño como todos los dias a hacer pipí y bueno me doy la sacudida y rascadita de rigor en los testículos, una rascada tipo masaje y cosquilleo como siempre suelo hacer (no sé uds pero es casi como un hábito porque no me pica ni nada de eso sino es como un ritual de estima y adoración al compañero de batallas).
Resulta que ya estoy por salir cuando siento que mi bóxer está húmedo y un olor a sangre aparece; bajo un poco mi pantalón y veo el bóxer manchado con sangre, una cosa que nadie se espera en una sesión de pichi cotidiana. De inmediato me bajo todo para ver de donde pues sale y al mismo tiempo tratando de que no se manche mas mi ropa. Limpio un poco con ph y resulta que era un puntito en mis testículos de donde goteaba sangre sin parar, no era un chorro sino goteo, goteo que no se detenía. Calculé que pudo ser en la rascadita previa pero era bien diminuto y en contraparte generando un goteo escandaloso. Una posibilidad es que haya sido una venita que estaba demasiado expuesta y no soportó la frotada.
Intenté hacer presión por tiempos de 10 y 15 minutos pero no hay forma ahí ya que no tenemos hueso donde fijar la presión y el goteo seguía. Probé con trozos de jabón, bloques de ph gruesos pero era en vano. Tenia que pensar rápido en una solución pero se me acababan las ideas, ahí me tenias sentado en la taza sangrando como mujer con andrés. En la chamba casi todo el personal es femenino y ni pensar en pedir ayuda, aparte ya llevaba casi 1 hora sin salir y de hecho había gente queriendo entrar (giraban la perilla).
Me jugué la ultima carta que era gastar todo el ph haciendo una gran pelota y ponerla dentro del boxer para que aguante el sagrado mientras iba a comprar alcohol, gasa, ph y esparadrapo a una farmacia que está a 2 cuadras.
Mi plan resultó solo que días después el conserje me pregunto porqué caminé como pato asustado.
La farmacéutica me atendió entre confundida y curiosa porque como se imaginarán yo cada 3 o 5 segundos me tocaba abajo.
Volví al baño que felizmente estaba desocupado y descubrí a media pelota de ph con sangre pero ya se había detenido el goteo. Con todo mi arsenal en el lavatorio puse en práctica mis clases de primeros auxilios y me instalé un señor parche ahi por si las moscas para regresar a mi casa y pues ya era hora de salida. Eso sí, dejé el baño y lavatorio impecable y llevé mi basurita a mi casa. Pensé ir al doc pero no fue necesario hasta el momento no hubo mas fugas.
Les cuento esto porque me asusté mucho, y que tengan cuidado de no rascar demasiado ahi. De imaginar que pude terminar en un hospital de emergencias y todo por un miserable puntito en las bolas producto de una rascada cotidiana.
Resulta que ya estoy por salir cuando siento que mi bóxer está húmedo y un olor a sangre aparece; bajo un poco mi pantalón y veo el bóxer manchado con sangre, una cosa que nadie se espera en una sesión de pichi cotidiana. De inmediato me bajo todo para ver de donde pues sale y al mismo tiempo tratando de que no se manche mas mi ropa. Limpio un poco con ph y resulta que era un puntito en mis testículos de donde goteaba sangre sin parar, no era un chorro sino goteo, goteo que no se detenía. Calculé que pudo ser en la rascadita previa pero era bien diminuto y en contraparte generando un goteo escandaloso. Una posibilidad es que haya sido una venita que estaba demasiado expuesta y no soportó la frotada.
Intenté hacer presión por tiempos de 10 y 15 minutos pero no hay forma ahí ya que no tenemos hueso donde fijar la presión y el goteo seguía. Probé con trozos de jabón, bloques de ph gruesos pero era en vano. Tenia que pensar rápido en una solución pero se me acababan las ideas, ahí me tenias sentado en la taza sangrando como mujer con andrés. En la chamba casi todo el personal es femenino y ni pensar en pedir ayuda, aparte ya llevaba casi 1 hora sin salir y de hecho había gente queriendo entrar (giraban la perilla).
Me jugué la ultima carta que era gastar todo el ph haciendo una gran pelota y ponerla dentro del boxer para que aguante el sagrado mientras iba a comprar alcohol, gasa, ph y esparadrapo a una farmacia que está a 2 cuadras.
Mi plan resultó solo que días después el conserje me pregunto porqué caminé como pato asustado.
La farmacéutica me atendió entre confundida y curiosa porque como se imaginarán yo cada 3 o 5 segundos me tocaba abajo.
Volví al baño que felizmente estaba desocupado y descubrí a media pelota de ph con sangre pero ya se había detenido el goteo. Con todo mi arsenal en el lavatorio puse en práctica mis clases de primeros auxilios y me instalé un señor parche ahi por si las moscas para regresar a mi casa y pues ya era hora de salida. Eso sí, dejé el baño y lavatorio impecable y llevé mi basurita a mi casa. Pensé ir al doc pero no fue necesario hasta el momento no hubo mas fugas.
Les cuento esto porque me asusté mucho, y que tengan cuidado de no rascar demasiado ahi. De imaginar que pude terminar en un hospital de emergencias y todo por un miserable puntito en las bolas producto de una rascada cotidiana.
