Salidas con la secretaria Chinita..

Que tal amigos, quisiera compartirles una experiencia que tuve hace un tiempo, hace mucho que quise hacerlo pero por temas de tiempo y trabajo siempre lo pospuse .

Es la segunda oportunidad en la que escribo un relato, espero que lo disfruten.

La empresa se dedica al rubro de la construcción y tengo ya algunos años ahí, esta cuenta con muchas áreas y en el último año me habían designado al área de Costos, según dijeron inicialmente como apoyo por un par de meses y finalmente terminé quedándome ahí.

Era un día normal en la oficina. Como a las 10:00 am recibo una llamada de mi jefe indicándome que me acerque a su oficina ya que quería conversar conmigo. Deje las cosas que estaba haciendo y me dirigí hacia allá, pensé que quería hacerme alguna consulta sobre los proyectos que estaban a mi cargo o quizás alguna reunión del área que eran para las cosas que siempre me llamaba.

Ingrese a la oficina y me contó que había venido a verlo el Gerente del área de proyectos y el motivo de su visita era solicitarle mi participación en una obra en Piura, según sabia, el proyecto para ese entonces ya tenía tiempo de haber empezado porque yo participe en sus inicios del desarrollo hasta que me cambiaron de área. Mi jefe continúo su explicación indicándome que el ingeniero responsable del área técnica se estaba retirando por motivos personales y necesitaba que ocupe el cargo de Jefe del Área Técnica ya que tenía bastante familiaridad con este proyecto por haber estado en la etapa inicial como comente anteriormente.

La verdad es que no me dio opción para escoger ya que todo ya estaba coordinado, un compañero se haría cargo de mis proyectos así que solo quedaba regularizar la transferencia de información y confirmar la fecha en la que estaría viajando.

Uno de los pendientes era ir a una visita a los proveedores de los equipos de compresión para la obra, a los cuales se les iban a realizar unas pruebas y debería estar presente para certificar el funcionamiento de estas. Al final del día me llamo el Ingeniero encargado y quedamos de qué iría el día siguiente en el transcurso de la mañana.

El día acordado llego una movilidad a la oficina, baje a recepción y nos dirigimos rumbo a Breña. Una vez ahí, baje del vehículo y me indicaron que debía dirigirme hacia la oficina de recepción. Ingrese y me dirigí hacia la secretaria; ella se encontraba hablando por teléfono. No quise interrumpirla por lo que tome asiento en hasta que terminara con su conversación. A pesar que no la pude ver muy bien porque se encontraba un poco de lado conversando pude notar que era una mujer muy bella.

Un par de minutos pasaron y finalmente colgó el teléfono, giro al darse cuenta de mi presencia.
- Buenos días – Me dijo.

Prácticamente me quede sin habla cuando pude verla más a detalle, era de tez blanca, cabello lacio, linda sonrisa y ojos con un poco de rasgos orientales sin llegar a serlo demasiado, ella estaba vestida con una blusa blanca y un chaleco (Es lo único que note en ese momento porque se encontraba en su escritorio), pero a pesar de eso pude ver también que tenía una buena delantera

- En que lo puedo ayudar - Volvió a preguntar, al notar que no le respondí al “Buenos días” que inicialmente me dijo.
- Buen día – Le respondí – Busco al ingeniero Fernández, tengo una reunión con él.
- Viene para realizar unas pruebas de equipos, verdad? – continua ella – Por favor, tome asiento mientras le aviso para que lo atienda.

Luego de esto cogió algunos documentos de su escritorio, se levantó y se dirigió por el pasadizo hacia una oficina que estaba a unos metros más allá. Cuando paso por mi lado vi que no solo tenía un rostro bonito sino que también tenía un cuerpo fenomenal, al atuendo que describí anteriormente lo complementaba una falda pegada tipo sastre y tacos (Típico atuendo de secretaria). En su conjunto se dibujaba muy bien su cuerpo.

Al rato salió una persona que se identificó con el Jefe de planta y me dijo que el Ing. Fernández había tenido una urgencia y había salido, pero que las pruebas las podríamos realizarlas con él sin ningún inconveniente, cosa que hicimos y luego de unas horas ya habíamos terminado y quedamos de ellos enviarían los documentos al dia siguiente ya que necesitaban la firma del ingeniero encargado y este como indique líneas arriba, no se encontraba. Antes de retirarme voltee a ver el lado de la recepción para ver si aún estaba la secretaria, la vi regresando a su lugar de trabajo, aunque solo era con el propósito de deleitarme la vista ya que veía muy difícil que llegara a algo más… o eso pensé hasta ese momento.

Al día siguiente, recuerdo que era miércoles, mi último día en Lima ya que el jueves a primera hora estaba viajando, recibo una llamada de un celular que no tenía registrado.

- Aló, buenos días – Respondí.
- Buenos días Ingeniero, le saluda Melissa, lo llamo por encargo del ingeniero Fernández para hacerle entrega de unos documentos que tenía pendiente, debo estar en su oficina en unos 20 minutos.
- Está bien, voy a estar aquí, por favor, llámeme nuevamente cuando este en la recepción para poder bajar – Le dije.
- Ok ingeniero, lo llamo cuando llegue.

Así terminó la conversación, luego de un rato me puse a pensar y tenía la duda que si la chica que me llamó era la secretaria. Cogí mi celular y guarde el nuevo, luego entre al Whatsapp, la busque como contacto y si, efectivamente era ella, en la foto salía con unos lentes oscuros pero definitivamente era la chinita y ahora sabía que se llamaba Melissa.

A pesar de tener muchas cosas que hacer, mi mente se centró únicamente en pensar de como entablar una buena conversación con ella y que quizás con algo de suerte ganar su confianza para poder escribirle después, se me vinieron a la cabeza muchas ideas pero cada una más ridícula que la anterior jajaja, sin haber podido pensar en algo concreto pasaron los 20 minutos y recibo nuevamente la llamada de la Melissa.

- Ingeniero, buenos días, ya me encuentro en la recepción – Me dijo cuándo contesté la llamada.
- Ok, espérame unos minutos y bajo – Le respondí.

Baje a la recepción y la vi parada en una esquina, estaba vestida con una blusa color blanca, falda de vestir muy ajustada color azul (la cual contorneaba todo su cuerpo y resaltaba más sus curvas), tacos y una cartera que llevaba colgada del hombro. Además de eso tenía unos folders y sobres de manila los cuales los tenía abrazados sobre sus pechos. Me dirigí hacia ella y esta al darse cuenta de mi presencia también se acercó hacia mí.

- Hola Melissa, buenos días – Le dije mientras nos saludábamos con un beso en la mejilla.
- Buenos días ingeniero – Me dijo – Le he traído los documentos que estaban pendientes - Cogió uno de los sobres que tenía en sus manos y me los entrego – Además necesito que me firme el cargo de entrega.
- No te preocupes, yo te firmo el documento – Le respondí, aunque la verdad que esa flaca estaba tan buena que para ese momento le hubiera firmado lo que sea.
- Y dime Melissa, se te hizo muy difícil dar con la dirección? – Le pregunte, mientras firmaba el documento.
- La verdad que no ingeniero. He venido algunas veces para hacer unos trámites en la notaria que está a unas cuadras, incluso ahora debo recoger unos documentos urgentes y estoy algo apurada – Respondió Melissa.

Ni bien termine de firmar, se podría decir que me arranco el documento de las manos, se despidió y salió rápidamente. Bueno, no siempre se gana pensé y luego subí a mi oficina, me dedique a terminar con mis asuntos pendientes y la chinita paso a segundo plano.

Ya estaba por finalizar el día y toda la información fue entregada a mi reemplazo. Luego de eso fui a ver a la secretaria de gerencia para que me entregara el check in de avión ya que mi vuelo salía al día siguiente a primera hora.

La secretaria de gerencia es una mujer de aproximadamente 37 años, cabellos castaño, ojos azules, tiene 2 hijos, uno mayor de edad (18 años) y otro aproximadamente de 14 años (Lo sé porque ella no hacía nada más que hablar de ellos). Sin embargo se conserva muy bien y tiene un cuerpo que muchas mujeres jóvenes matarían por tener, ella siempre ha sido muy hermética, incluso varios han tratado de caerle (Sobre todo en las fiestas de la empresa donde todos se emborrachan), lo que más resalta en ella aparte de tener un rostro muy bonito son sus senos, estos son grandes y paraditos, su nombre es Tania, pero en la empresa es más conocida por todos los hombres como TETANIA obviamente por lo que ya les comenté. (En otra oportunidad espero escribirles acerca de mi historia con ella)

Volviendo al relato, eran las 5:00 a.m. del dia siguiente y ya me encontraba en el aeropuerto, luego de los controles respectivos me quede esperando en la sala de embarque para finalmente abordar el avión y estar en Piura aproximadamente a las 8:00 de la mañana, una camioneta de empresa me recogió y me llevo al hospedaje donde deje mis cosas, tome un desayuno rápido y me dirigí a la obra. Fui presentado con el equipo del proyecto y de inmediato me indicaron que tendríamos una reunión con el cliente.

Estábamos en plena reunión, cuando en eso empieza a sonar mi celular, inmediatamente reviso y me doy cuenta que era una llamada de Melissa, obviamente no podía contestar así que solo atine a silenciarlo; sin embargo ella siguió insistiendo, casi al final de la reunión tenía más de 20 llamadas perdidas de ella y finalmente le mande un mensaje en el Whatsapp indicándome que por favor le devolviera la llamada.

Continuara..

 

Se perfila bien la historia cofrade.. salud!!

 

interesante interesante continue continue

 

Continúe con la historia cofrade! Se ve interesante sobre todo por lo de tetania xD ✌️

 

Uyuyuyyyy que entretenido fwlato cofrade. DsperEspe pronto su continuación,saludos.

 

Continue cofrade está buena

 

Que Melisa eh!!! Esperando deseoso la continuación

 

Muy buen relato. Esperamos continuación

 

Estimados, continuo con el relato..

Tenía aun cosas que hacer así que no le devolví la llamada al momento que terminé, aunque tenía curiosidad, antes de medio día recién tuve un respiro y la llamé.

- Buenos días Melissa, me estuviste llamando, disculpa que no te pudiera contestar pero recién me desocupo – Le dije.
- Ingeniero no se preocupe – Me contesto – Más bien discúlpeme usted por ser tan insistente pero tengo un GRAN problema.
- Que paso? – Le respondí, y ahora tenía más curiosidad.
- El día de ayer antes de ir a su oficina fui a recoger una carta fianza del Banco, luego de eso fue a la notaria a recoger otros documentos para entregarlo a un cliente y nos puedan gestionar un adelanto – Se notaba que sus palabras tenían un tono de desesperación y luego continuo – Estoy segura de haberlo puesto con los demás documentos que tenía, sin embargo luego entregar el sobre, me llamaron más tarde y me indicaron que estaba faltando esta carta y por tal motivo no podrían tramitar el pago.

Había escuchado toda su explicación, pero aun no entendía porque me había llamado, luego continue diciendole:

- Melissa, siento lo que te paso. Pero.. que tiene que ver eso conmigo?? – Le respondí – Quizás lo has dejado en la notaria, ya preguntaste?? o se te pudo haber caído. Porque no gestionas otra carta de garantía, el banco lo puede emitir.
- Ya fui a notaria y no la han encontrado ahí, también consulte con el banco y debo hacer la denuncia primero y luego la gestión y eso demora unos días, por lo que me lo estarían entregando la otra semana y necesito entregarlo a más tardar mañana sino, no nos pagarán el adelanto, es una cantidad fuerte de dinero y si no se desembolsa será mi culpa.

La voz de Melissa se hacía cada vez más melancólica, se notaba que estaba desesperada y a punto de llorar.

- Melissa, tranquilízate – Le dije – En que te puedo ayudar, por algo me has llamado.
- Bueno – Continuo ella – En ese lapso, entre que recogí la carta fianza y la notaria, solo fui a dejar documentos a su oficina, quizás ahí pude haber puesto la carta, se ha fijado??
- La verdad que aún no he tenido tiempo de verlos, recién llegue hoy en la mañana y he estado ocupado, incluso esos documentos los he dejado en mi hospedaje.
- Por favor Ingeniero, en serio estoy en un gran problema, puede fijarse.
- Mira Melissa, ahora estoy en obra y mi hospedaje no está cerca (Cosa que era totalmente falso porque se encontraba a 2 cuadras y en 5 minutos podría haber ido a revisar) Voy a intentar escaparme a la hora de almuerzo.
- Gracias Ingeniero, se lo voy a agradecer – Dijo ella aun con la voz entrecortada.
- Trata de tranquilizarte un poco, te escribo cuando reviso los documentos.

Nos despedimos y me quede pensando que cavia la posibilidad de que ella se hubiera confundido hubiera puesto ese papel en el sobre que me entrego. Media hora después mientras todos salían a almorzar me fui al hospedaje. Cuando llegue busque en mi maleta y ahí encontré el sobre. Al abrirlo pude ver que efectivamente, ahí se encontraba la famosa carta del banco. Luego llame a Melissa.

- Melissa, buenas tardes, encontré tu carta fianza, estaba en el sobre que me entregaste.
- Es en serio?? De verdad ingeniero – Me respondió.
- Si, la tengo en mis manos. Supongo que ahora estas más tranquila.
- Si, lo estoy – Dijo, además el tono de su voz había cambiado, se le notaba más aliviada y escuchaba risas de rato en rato de parte de ella, se notaba que no podía contener la emoción – Muchísimas gracias, ahora tengo que pedirle otro favor.
- Cuál es ese favor? – Le pregunte.
- Quisiera que me envíe el documento, lo necesito de manera urgente – Me dijo.
- Melissa, he tenido que escaparme de la obra para poder revisar si tenía el documento, ahora me pides que salga nuevamente. Es mi primer día.. Tú quieres que me boten verdad?? Jajaja
- No ingeniero, no quiero eso, como cree – Lo dijo en tono tan dulce que hasta dude que era la misma mujer con la que había conversado anteriormente ya que siempre había estado bastante seria en las pocas palabras que habíamos tenido.
- Mire ingeniero – Continuo diciendo Melissa – Lo puede enviar por Courier, pero debe ser antes de las 5:00 p.m. para que el documento esté temprano en lima y lo pueda recoger.
- Aun tengo varios pendientes en la obra, voy a tratar de escaparme casi al final del día porque ahora debo volver – Le dije.
- Por favor ingeniero, debe ser temprano – Insistió ella.
- Ok, pero si me botan será tu culpa y quedará en tu conciencia. Jajaja.
- Ayy ingeniero, no creo que le digan nada jajaja.
- Está bien – Le dije – Pero eso tiene otro precio, estoy arriesgando mi puesto por ti.
- Y cuál es el precio ingeniero?? diga nomas, yo pago.. jajaja

La verdad que no costaba nada hacer el favor, tenía una agencia muy cerca de la obra, así que era muy sencillo dejarlo, pero por lo menos hacerme el difícil me sirvió para poder ganar un poco de confianza.

- De eso hablamos después – Le dije - Primero voy a enviar tu carta y luego te pasaré mis honorarios.
- Está bien Ingeniero, jajaja, Está bien.

Le pedí que me enviara su número de DNI, nombre completo y la agencia de destino para poder hacer el envío, lo cual lo hizo por whatsapp. Deje el documento para envío, almorcé y volví a la obra para seguir con lo mío. Se hizo las 6:00 de la tarde y me fui al hospedaje, me sentía bastante cansado por haber madrugado, el viaje, las reuniones y toda la información nueva que había que procesar. Cuando llegue a mi cuarto me tire en la cama y ahí quede dormido por un par de horas.

Al despertarme tomé el celular y vi que había varios mensajes en el whatsapp y uno de estos era de Melissa que me preguntaba si había podido enviar el documento. Le respondí con una foto del ticket a lo que ella me contesto con un icono de cara feliz con corazones en los ojos – jajaja – después de eso empezó nuevamente a darme la gracias indicando que le había salvado la vida, que pensaba que iba a perder su trabajo ya que había discutido con su jefa y que esta la había amenazado diciéndole que si perdían ese adelanto la sacarían de la empresa motivo por el cual estaba tan nerviosa, además que estaba desesperada por no saber dónde había dejado ese documento.

Por mi parte le daba ánimos diciendo que esas cosas pasan, que afortunadamente se dio cuenta a tiempo y finalmente la pudo solucionar. Sin darnos cuenta estuvimos conversando por más de 2 horas hasta que finalmente nos despedimos y quedamos que ella me escribiría al día siguiente para contarme como le había ido.

Luego de este suceso, nuestras conversaciones se hicieron bastante frecuentes siempre al final del día con lo que ganamos bastante confianza, finalmente y con todo el trabajo que había no me había percatado que ya tenía 18 días en Piura y al día 21 me tocaba mí bajada a Lima.

Esa noche le escribí a Melissa y nos pusimos a conversar, ahí le dije que llegaría en 3 días y quedamos de salir durante la semana cuando este de regreso.

Continuara .....

 

Uta cofrade, que la haces mas larga que pedo de culebra

 

Bueno señores, aprovechando la cuarentena voy a terminar con el relato que deje pendiente hace buen tiempo...

Regrese a Lima en el último vuelo del miércoles y me fui a casa de mis padres a dormir ya que queda más cerca del aeropuerto y aproveche que les había traído algunas cosas de mi viaje, estuve con ellos hasta el día siguiente.
Como a las 10:00 a.m. tenía un mensaje de Melissa:

- Ya estás en Lima??
- Si, llegue ayer en la noche – Le escribí.
- Estoy por tu oficina, nuevamente me mandaron a la notaria.
- Ten cuidado con perder los papeles de nuevo, jaja – Le dije
- Jajaja, estas gracioso hoy!!– Me respondió – Pero no te preocupes, no volverá a pasar además estas tú para salvarme, ya voy a llegar, te escribo después.
- Esta bien, pero que no se te haga costumbre jaja, conversamos en la noche, voy a hacer algunas cosas también.
- Yap, bye.

Después de almorzar me fui a mi departamento; me puse a hacer algo de limpieza y ver películas para hacer hora, en la noche le escribí a Melissa.

- Hola Melissa, ya llegaste a tu casa?
- Aun no, pero debo llegar en unos 20, te escribo cuando llego.
- Ya pues, me escribes y te llamo.
- Está bien.

Luego de casi una hora me escribió un icono con una cara feliz.

- Ya estás en tu casa? – Le pregunte.
- Si
- Te llamo entonces – Le volví a escribir.
- Ok

Me fui a la sala, de ahí la llame y al momento me contesto.

- Hola, como estas? – Me respondió
- Bien, recién llegaste a tu casa? – Le dije yo.
- No, llegue hace buen rato, pero estaba cenando con mi familia.
- Mañana estas desocupada para vernos luego de tu trabajo? – Le pregunte
- Mañana ya quedamos con la chicas del trabajo para salir, una de las abogadas de la empresa trabaja solo hasta mañana y vamos a hacer una reunión de despedida, pero podemos vernos el sábado. – Dijo ella.
- Está bien, el sábado entonces, Y tienes algo en mente?
- Jaja, algo tranqui, vamos al cine o a comer algo. – Me respondió
- Por mi está bien.

Quedamos de encontrarnos en el Jockey plaza a las 7:30 de la noche, ella vive en Salamanca así que se nos hacía algo cerca para ambos.
Al día siguiente como habíamos quedado me fui al Jockey y llegue unos 25 minutos antes, demore como 10 más para encontrar un estacionamiento. Pensé que estaba con el tiempo justo pero vi que Melissa me había escrito diciéndome que iba a demorar unos 20 minutos por lo menos, le dije que estaría dando vueltas por el centro comercial y que me avise cuando llegue.

Pasaron 20 minutos, luego 30, 40 y finalmente casi una hora cuando me llama al celular.
- Alo – Le dije con voz seria.
- Ayy sorry, perdón, me demore un mundo, perdón perdón, donde estás?? No me digas que ya te fuiste?? – Me respondió.
- Jajajaaj – Me dio mucha risa la forma que se disculpaba con una voz de niña y luego le conteste – Estoy en Ripley, ya llegaste? En qué lugar estas?
- Estoy frente al cine, acabo de llegar.
- Ok, voy para allá, espérame ahí – Le dije.
- Yap – me respondió ella.

Para ese momento me encontraba en el tercer piso de la tienda así que baje y me fui a buscar a Melissa, llegue al lugar y la vi parada a un lado del cine mirando de un lado a otro.

Estaba vestida con un pantalón negro pegado que contorneaban muy bien sus piernas, unos tacos del mismo color, una blusa beige con algunos unos detalles de flores y una casaca liviana de color azul acero, además de un bolso pequeño. Estaba preciosa, en eso se da cuenta de mi presencia y me hace un gesto con la mano mientras también se acercaba a mí.

- Hola, disculpa la demora – Me dice mientras nos saludábamos con un beso en la mejilla.
- La espera valió la pena, estas bellísima – Le dije
- Gracias, ayer nos quedamos hasta tarde con las chicas del trabajo y hoy se acumularon las cosas. Viste algo que te guste? – Me pregunto.
- Por su puesto, lo estoy viendo ahora, jajaja – Le respondí.
- Jajaja, te hablaba sobre alguna película
- Creo que la mayoría ya empezó, pero vamos a ver si aún hay alguna que no empiece tan tarde.

Nos fuimos a ver la programación y como la mayoría ya había empezado decidimos ir a comer algo y conversar, buscamos algo cercano y finalmente terminado en el Fridays, donde pedimos algo para comer y unos tragos mientras conversábamos. Como estaba con el carro solo la acompañe con un pequeño brindis; llego la comida y al terminar pedimos algunos tragos más (para ella) y pasamos buen tiempo hablando sobre todo lo que había pasado con el famoso documento que me entrego por accidente, la preocupación que tuvo y sobre todo la discusión con su jefa. Poco a poco me di cuenta que estaba más alegre por los tragos - Aunque verdaderamente casi no se siente que contengan alcohol.

- Vamos - me dijo.
- Aún es temprano le dije, pedimos una más y nos retiramos – Le propuse.
- Mañana tengo que hacer, además aún estoy cansada de lo de ayer – Me dijo.
- Está bien, voy a pedir la cuenta.
- Gracias, voy a aprovechar para ir al baño.

Pedí la cuenta mientras ella se retiraba a los servicios y no podía dejar de verla mientras se dirigía hacia allá y me di cuenta que el alcohol le había chocado un poco por la forma de caminar y además que en un par de ocasiones se apoyaba en las paredes. Unos minutos después ya había pagado la cuenta y la vi volviendo del baño, me levante para darle el alcance y salimos del local. Ella me cogió del brazo y me dijo:

- Creo que estoy un poco mareada
- De verdad?? No me había dado cuenta, jajaja – Le respondí.
- El alcohol se me sube muy rápido.

Llegamos al módulo de pago y había 3 personas antes que nosotros, Melissa se puso delante de mí y yo la cogí de la cintura, en eso giro su rostro y me brindo una sonrisa hermosa.

Cuando fue mi turno de pagar ella se puso a una lado y una vez que termine de cancelar fui nuevamente a su lado, ella se acercó a mi quedando uno en frente de otro, puse nuevamente mis manos en su cintura y ella paso sus brazos alrededor de mi cuello para luego terminar besándonos…

Presione su cuerpo hacia mí y ella se empino sin dejar de besarnos, su lengua y la mía no dejaban de moverse en nuestras bocas y mis manos fueron moviéndose poco a poco hasta quedar a los lados de su cadera.

En un descuido Melissa se separa de mí, coge mi mano y se da un paso a un lado para seguir hacia donde estaba estacionado mi auto. Empiezo a caminar también dejándome llevar hasta ponerme a su lado, ella aprovecha para pegarse, colgarse de mi brazo, mirarme y darme una hermosa sonrisa.
Las cosas en el auto no fueron diferentes, ella me tomada de la mano y de rato en rato nos besábamos en alguna parada mientras manejaba. Luego de unos minutos estábamos en salamanca y según sus indicaciones llegamos a su casa.

Me estacione y me incline hacia Melissa, ella hizo lo mismo luego de sacarse el cinturón de seguridad, no abrazamos y seguimos en lo nuestro. Mis manos empezaron a acariciarla sobre su ropa por su espalda, hombros y cintura; al parecer esto le gustaba ya que Melissa se movía de un lado a otro y en algunos momentos soltaba un suspiro, ella jugaba con mi cabello y me besaba con más fuerza hasta que empecé a bajar mi mano y la puse sobre una de sus piernas y comencé a acariciarla a la vez que también le besaba el cuello. La respiración de Melissa se le entrecortaba y en un rápido movimiento, puso su mano sobre la mía evitando que continúe y se alejó quedándose en el asiento del copiloto.
Se llevó sus manos al rostro, empezó a arreglarse el cabello y con una sonrisa en su rosto dice:

- Hay que dejar algo para el siguiente encuentro. Esas manos están muy traviesas.
- Jajaja – Me reí – Será que me tú me pones así – Le respondí.
- Mejor me voy, mañana tengo que hacer muchas cosas, gracias por lo de hoy, fue una muy bonita salida
- Segura que tienes que irte.
- Siii y no insistas – Me dijo.

Luego de eso se bajó de mi carro, yo hice lo mismo, nos dimos un último beso y ella siguió hacia su casa. Por mi parte, me dirigí a mi departamento, cuando llegue vi el celular y me había escrito al whatsapp diciéndome nuevamente que la había pasado muy bien y que le escriba cuando llegue a mi casa, cosa que hice y luego me fui a dormir.

 

Al día siguiente le escribí temprano pero no me respondió hasta después de mediodía, le dije si podíamos vernos más tarde (ya que me había dejado con todas las ganas del mundo la noche anterior), pero me dijo que saldría a hacer unas cosas ya que por MI CULPA y como no es de tomar mucho, se había quedado dormida y no pudo hacer las cosas que debía en la mañana. Finalmente no pude convencerla pero quedamos que el lunes pasaría a recogerla a la salida de su trabajo.
Como a las 4:00 pm del día lunes salí rumbo a su trabajo según habías quedado, como dije anteriormente ella trabaja en breña pero quedamos de encontrarnos en la Rambla de la Av. Brasil. Para mi suerte no había mucho tráfico a esa hora y llegue bastante rápido. Una vez en el punto le mande un mensaje.

- Ya estoy en la rambla, te espero.

Melissa se demoró en responder y luego de un rato me respondió.

- Aun me quedan cosas que hacer, voy a salir un poco tarde, me esperas o lo dejamos para otro día??

Le dije que esperaría y me puse a hacer hora en las tiendas, ella demoro bastante y recién me escribió como a las 7:00 pm.

- Ya estoy aquí. Por donde nos vemos? – Me escribió.
- Estoy en el segundo piso, sube y te encuentro en las escaleras – Le respondí.

Me dirigí a las escaleras y pude ver como ella estaba subiendo, estaba vestida con su traje de oficina y se veía muy bien.
La espera había sido larga y cuando la tuve en frente, puse mis manos en su cintura y nos dimos unos besos, empezó a disculparse por haber llegado tarde, la abrace y empezamos a caminar sin rumbo.

- Que hacemos ahora?? – Me pregunto.
- No sé, la última vez dejamos unas cosas pendientes – Le conteste
- Así?? Que será?? No recuerdo muy bien, alguien me hizo tomar mucho jajaja
- Te puedo hacer recordar – Le dije.
- Mejor vamos a cenar algo – Me respondió cambiando de tema.

Intente convencerla para irnos a otro lado pero todo fue en vano, finalmente fuimos a comer comida china y luego de eso la lleve a su casa.
Cuando llegamos, me estacione y empezamos a besábamos, igual que la ocasión anterior podía sentir como Melissa se excitaba y su respiración se entrecortaba, me besaba con más fuerza, seguimos así un rato y puse mis manos en sus piernas y las empecé a acariciar y empecé a subir poco a poco, con eso su respiración se aceleró y como la vez anterior puso mano sobre la mía evitando que siga metiéndose debajo de su falda.

- Ya me voy.
- Quédate un rato más – Le dije.
- Ya es tarde, además esas manos tuyas no se saben controlar, jajaja

Me hizo gracia su comentario y también me reí. Quedamos que al día siguiente también iría a recogerla. Melissa se bajó del auto y se fue a su casa. Al día siguiente la fui a recoger como habíamos quedado y las cosas no fueron diferentes, cada vez que quería avanzar ella me frenaba y termine dejándola en su casa como lo había hecho la noche anterior sin poder llegar a nada más. Ya era miércoles, los días habían pasado rápido y el jueves volvía a Piura en el primer vuelo por lo que debía estar en el aeropuerto a las 5:00 am, como tenia aun cosas pendientes me dedique a estas toda la mañana y a alistar mis cosas para el día siguiente.
Eran como las 3:30 pm y no le había escrito en todo el día a Melissa, la mañana se había pasado volando y no había terminado todo lo que tenía que hacer. Había dejado el celular a un lado y cuando lo vi me di cuenta que Melissa me había escrito como a las 2:30 pm.

- Hello, estas?? – Decía su mensaje.
- Hola Melissa, recién me doy cuenta de tu mensaje – Le respondí.
- Hola Sr desaparecido, que estarás haciendo para estar tan distraído!!, jajaja.
- Nada malo – Le dije - mañana vuelvo a Piura y estoy terminando de alistar mis cosas.
- Tan rápido
- Ya casi tengo una semana y salgo mañana en la madrugada. – Le escribí.
- Eso quiere decir que hoy no vendrás a recogerme??
- No creo, aun debo hacer unas cosas, además tu siempre me dejas con ganas, jajaja. – Le dije.
- Jajaja, seguro que no quieres pasar por mi?? Quizás hoy las cosas sean diferentes. – Respondió Melissa.
- Uhmm, no sé, me estas tentando, que más ofreces?? Jajaja
- Jajaja, tampoco te voy a decir pues. Vienes o no?? – Me escribió.
- Está bien, voy a apurarme para ir a recogerte.

Quedamos de vernos a las 6:30 pm en la rambla por lo que me apure para alistar mis cosas, me di un baño y salí de mi departamento como a las 5:20 pm para llegar un poco antes. Desde donde vivo hasta la rambla de la av. Brasil me toma algo de 30 a 40 minutos y cuando estaba por llegar suena mi celular; era Melissa.

- Hola – Le dije.
- Por dónde estás? Ya llegaste? – Me contestó.
- Estoy por entrar al estacionamiento, tú ya llegaste?
- Si, pude salir antes, no había mucho trabajo hoy. Donde nos vemos? O mejor voy a donde estas y de ahí vamos a otro lugar – Me respondió.
- Está bien, te veo en el hall de ascensores del sótano. Te espero ahí.

Llegue a donde habíamos acordado y ella ya estaba esperando, estaba vestida con una blusa de color crema, una falda de color gris claro, tacos y tenía su saco y cartera en sus brazos, me vio y subió a mi auto. Nos saludamos con un beso en la boca y salimos del centro comercial, en el camino me iba contando como le había ido y que finalmente había sido un día tranquilo por lo que no tuvo que quedarse más tiempo.

- Y a dónde vamos? Alguna sugerencia – Le pregunte con una expresión de malicia. Melissa me miraba y pude notar una sonrisa cómplice.
- No sé, a donde quieres llevarme? – Respondió.

Ambos ya sabíamos a lo que íbamos, así que recordé un Hotel por república de Chile, estaba bastante cercano y había ido hace buen tiempo, en el camino íbamos besándonos de rato en rato, ponía mi mano en sus piernas y las acariciaba metiéndolas debajo de su falda, lo cual era un poco difícil por lo apretada que estaba (Ya saben, falda de secretaria). Melissa no decía nada y no puso ninguna resistencia y al cabo de unos minutos ya estábamos en la puerta del hotel.
Toque el claxon y salió el vigilante que nos abrió la puerta de la cochera, nos estacionamos y luego fuimos a la recepción, Melissa se quedó esperando en el sillón que había ahí mientras hacia el pago y dejaba mi dni. Nos dieron una habitación en el quinto piso, fui donde estaba Melissa, la tome del brazo y nos fuimos hacia el ascensor rumbo a la habitación.

Mientras subíamos ella se puso frente a mí, puso sus brazos en mi cuello y empezamos a comernos a besos, apreté su cuerpo contra el mío presionando mi pene que para ese rato ya quería explotar. Entramos a la habitación y el panorama no fue diferente, seguimos por un rato besándonos y ahora mis manos pasabas a recorrer su espalda, bajaba a sus caderas y subía nuevamente, ella puso sus manos en mi rostro y no dejaba de besarme, su lengua se movía dentro de mi boca y al tener su cuerpo bien pegado a mi podía sentir sus pechos lo cual me excitaba más.

Por su parte, Melissa bajo su mano y la coloco sobre mi pene que para ese rato esta duro y listo para empezar la faena. Poco a poco fui quitándole el saco primero y luego la blusa, mis manos fueron directamente a sus senos y procedí a acariciarlos sobre su brassier que era de color blanco, presionándolos y juntándolos a la vez en movimientos circulares, cosa que pareció gustarle porque empezó a hacer fuerza hacia mí cogiendo ella misma sus senos por los costados y empezando a gemir mientras se mordía los labios. Nos separamos un poco y ella empezó a quitarme la camisa mientras yo puse mis manos en sus caderas y empecé a subir poco a poco su falda, luego bajes mis manos para acariciar sus piernas y subirlas nuevamente hasta sus nalgas. Luego de eso me termine de quitar la camisa y empezamos a besarnos nuevamente pero ahora con mayor intensidad. Melissa se separa nuevamente, me empuja hacia la cama y parada frente a mí empieza a quitarse la falda quedándose solo en ropa interior y tacos.

El panorama que me dio fue hermoso y eso me excito mucho más, procedí a desnudarme mientras ella de inmediato se subió sobre mí, volvimos a besarnos y de un giro rápido cambie de posición para ponerme sobre ella y empezar a besarle el cuello mientras una de mis manos acariciaba sus piernas.

- Esto es lo que querías?? – Me dijo entres suspiros
- Si – Le respondí – Y tú me hiciste sufrir..
- Pues aprovecha ahora, hazme lo que quieras – Dijo Melissa.

Baje mi mano hacia su vagina y puede notar que su calzón está húmedo, mis manos empezaron a subir y bajar con lo que note que ella se estaba excitando mas, había cerrado los ojos, empezó a dar pequeños gemidos y su respiración se aceleró.
Busque mi pantalón y cogí un preservativo que tenía y me lo puse, separe las piernas de Melissa y procedí a quitarle el calzón que estaba completamente húmedo.
Puse mi pene en la entrada de su vagina y empecé y meterla suevamente. Melissa empezó a dar pequeños gritos seguidos de gemidos mientras yo seguía entrando en ella.

- Ahhhh, métemela despacio, ahh ahh, asi, asi, ahh ahh

Su vagina estaba muy húmeda y caliente, luego de entrar totalmente, la saque suavemente y procedí a penetrarla una y otra vez, ella seguía gimiendo y también empezó a moverse por lo que también subí la intensidad, cogí una de sus piernas y la puse en mi hombro y seguí dándole sin bajar el ritmo. Los gemidos de Melissa se hicieron más fuertes.

- Asi, asi, ahhh ahh, así mi amor – Decía mientas las embestía una y otra vez.

Seguimos así un buen rato luego cambiamos de posición, baje de la cama y la jale hacia la orilla, la puse de espaldas quedando ambos frente al espejo que había en la pared, la cogí de las caderas y nuevamente la empecé a penetrar, esta vez mas rápido, ella se arqueaba y levantaba las nalgas para sentirla mejor y podía ver la cara de placer que ponía en el espejo, se mordía los labios, cerraba los ojos y de rato en rato soltaba gritos y gemidos

- Ayyy, ahhh, ahhh, que rico, ahh – decía ella.

Segui dándole y en un momento ella se levanta y queda muy cerca de mí, gira su cabeza y nos besamos mientras la seguía bombeando, en eso pone sus manos en su espalda y se quita el brassier que aun llevaba puesto, haciendo salir esos bellos senos que no dude en cogerlos con mis manos, luego Melissa volvió a poner las manos en la cama hasta que ella se dejó caer y yo la seguí, estábamos sudando ambos, me gire a un lado y ella hizo lo propio, me abrazo y nos quedamos quietos mientras recuperábamos el aliento.

- Parece que te gusto – Me dijo Melissa, tenía una sonrisa de satisfacción en su rostro.
- Claro, y a ti también por lo que veo – Le respondí.
- Me gustó mucho – Dijo ella.
- Entonces porque no quisiste hacerlo antes, mira que me has tenido con muchas ganas – Le volví a decir.
- Jajaja – Se empezó a reír – Una mujer que se respeta no se acuesta a la primera jajaja– Dijo Melissa. La verdad que ese comentario me causo mucha gracia y terminamos riéndonos los dos.
- Bueno, pero me has hecho sufrir hasta la cuarta vez.
- Pensaba hacerte esperar un poco más, pero yo también tenía ganas y como te vas de viaje quise darte tu despedida.

Luego de eso me abrazo y nos dimos un beso, ambos seguíamos sudando así que nos fuimos a la ducha, mientras nos bañábamos pasaba mis manos por todo su cuerpo nos besábamos, la coloque de espaldas y mis manos empezaron a acariciar sus senos mientas le besaba en el cuello, Melissa agarro mi pene con su mano, luego giro y se arrodillo, empezó a menearlo y luego a lamerlo de arriba hacia abajo; después de un rato ya lo tenía metido en tu boca chupándolo como una experta, de rato en rato se sacaba mi miembro y lo golpeaba contra su lengua, yo estaba a punto de venirme pero ella se levantó y me dijo, vamos a la cama.
Nos secamos lo más rápido posible y ya nos encontrábamos nuevamente en la cama, Melissa siguió con lo suyo, bajo nuevamente hacia mi pene lo empezó a lamer de arriba abajo y luego de lado a lado; después de un rato introdujo de un bocado mi pene lo más que pudo al punto que parecía atragantarse y después empezó a succionarlo y chuparlo.

- Ponte el pre –Me dijo luego de un rato de estar mamando mi verga.

Jale el preservativo que tenía en la mesita de noche y me lo coloque lo más rápido que pude, mi pene estaba recontra duro y una vez que me lo puse, ella se puso sobre mí, cogió la punta y se lo puso en la entraba de su vagina y empezó a bajar despacio, esta vez la sentí mucho más caliente y cuando llego hasta el fondo empezó a subir y bajar, empezó a acelerar sus movimientos, por mi parte me sentía en el cielo, puse mis manos en sus caderas y podía ver como saltaban sus senos con el vaivén de sus movimientos. Nuevamente empezó el concierto de gemidos, luego puso sus manos en mi pecho, se sentó en mi pene y empezó a mover sus caderas de atrás hacia delante cada vez más rápido, sus gemidos se tornaron más rápidos y entrecortados, hasta que finalmente dio un suspiro y se quedó quieta, pude sentir la contracción de su vagina sobre mi pene que aún seguía duro, finalmente se dejó caer sobre mí.

Yo aún no había terminado así que la puse de perrito procurando ponerla de costado para poder verla en el espejo mientras la penetraba, cogí sus caderas y empecé a meter y sacar, podía ver en el espejo como sus senos se movían con cada embestida mía, eso sumado a los gemidos de Melissa me excitaba más y empecé a darle con más fuerza.

- Ahh ahh ahh, sigue, sigue
- Uhmm, asi mi amor, asi cariño…
- Mas, mas, ahh ahh ahh….

Seguí dándole y en un momento ella deja caer sus pechos sobre la cama haciendo que su trasero quede levantado, luego coge una almohada, la abraza y empieza a morder. Esa imagen fue una de las mejores que recuerdo de ella, me puso a mil y me puse a darle con más fuerza y rapidez hasta que finalmente expulse todo mi semen.
Quede unos segundos así y cuando sentí que mi pene empezaba a bajarse lo saque de la vagina de Melissa. Ella cayó a un lado, seguía abrazando la almohada y yo sentado a un lado tratando de recuperar el alimento, fui al baño a tirar el preservativo y luego volví a con ella. Había pasado unos minutos y no se había movido de esa posición, me puse a su lado y me puse a acariciarla, ella giro, sus mejillas estaban algo coloradas, como si hubiera estado tomando, me dio un beso, puso su cabeza en mi pecho y con su mano empezó a jugar con mi pene que aún estaba en medio tiempo. Luego de un rato se levantó y se metió al baño. Cuando volvió lo hicimos una vez más, al igual que las veces anteriores terminamos exhaustos, después nos fuimos a bañar y procedimos a arreglarnos.

Ver como Melissa poniéndose su ropa interior y la ropa de secretaria era un espectáculo, tenía un precioso cuerpo.

- Que miras sapo?? Me dijo, lanzándome mi camisa que estaba en el suelo.
- Me gusta cómo te queda tu vestido de secretaria; la próxima vez quiero hacértelo mientras lo tienes puesto – Le dije con una sonrisa en la cara.
- Jajaja, eres un enfermo jajaja - me dijo – mientras se hacía su cabello a un lado y empieza a peinarse – Alístate tú también que ya es tarde y mañana debes madrugar.

Obedecí sus órdenes y también me aliste, una vez que estábamos listos y que nada dejábamos en la habitación, tome las llaves y el control remoto para dirigirnos a la recepción y luego al auto.
Salimos sin novedad y el camino hasta su casa estuvo lleno de besos y paleteos. Cuando llegamos nos despedimos con un beso y le dije que le escribiría al día siguiente cuando esté rumbo a Piura.

Continuara...

 

Amigos buenas tardes, continuo con el relato...

Al día siguiente me levante muy temprano y me fui hacia el aeropuerto, en el camino pensaba la noche anterior con Melissa, cuando llegue hice mi checkin y habiendo pasado todos los controles me puse a esperar a que llegara el vuelo. En ese intermedio le escribí a Melissa, diciéndole que ya estaba a punto de partir hacia Piura.

- Ya estoy despierta, me estoy alistando para irme al trabajo. Gracias por la noche de ayer, espero que te haya gustado tu despedida – Me escribió.
- Así da gusto irse, jajaja. Lo malo es que vamos a tener que esperar casi 21 días para repetirlo – Le respondí.
- Si pues =(

Seguimos conversando hasta que finalmente llegó la hora de abordar y me despedí de Melissa diciéndole que lo más probable era que iba a tener que ponerme al día con el trabajo y que le escribiría en la noche. Como había anticipado había mil cosas que hacer en el trabajo, trate de hacer las más urgentes y me fui temprano porque tenía sueño debido a que había madrugado para ir al aeropuerto. Llegue a mi cuarto, me di un baño y me puse a descansar un par de horas, como a las 8:30 pm desperté y le escribí a Melissa, ella respondió, le conté como me había ido en el día, ella hizo lo propio con su trabajo y luego nos pusimos a recordar lo que habíamos hecho la noche anterior esperando que los días pasen rápido para poder repetir nuestro encuentro. Esta rutina se repetía casi todos los días, salvo algunos días y fines de semana que salía con sus amigas o su familia.

Era viernes en la obra, regrese de dar una inspección en la obra y encontré a varios de mis compañeros conversando y me acerque a ellos.

- Te apuntas para mañana – Me dijo Héctor, un compañero del área de costos.
- A dónde?? – Les pregunte.
- Verdad, tu no estabas la semana pasada – Respondió Héctor.

Luego Luciana – Otra compañera, Luciana era de Piura, la habían contratado para la obra, era aproximadamente de 1.55 m delgada y caderona, hablaba hasta por los codos y era casi imposible callarla, a pesar de eso era bastante simpática y había varios que querían levantársela – Me contó que el sábado de la semana pasada habían ido a Mancora y que se habían quedado hasta el domingo; tenían planeado hacer lo mismo esta semana y como prácticamente me la pasaba los fines de semana en mi cuarto avanzando algo de trabajo decidí irme con ellos para distraerme.
El sábado y según lo acordado tomamos un colectivo saliendo del trabajo rumbo a Mancora, llegamos aproximadamente a las 4:30 pm, como señale antes, mis compañeros habían ido anteriormente así que ya habían separado un hospedaje, éramos 5 hombres y 4 chicas, dejamos las cosas y nos fuimos a pasear a la playa. Aproveche en tomar unas fotos y se las mande a Melissa.

- Es en serio??, donde estás??? – Me respondio.
- Estoy en Mancora, vine con amigos del trabajo, salió de improviso y nos quedaremos hasta mañana – Le escribí.
- No me llevas y encima me mandas fotos para presumir, jajaja

Nos pusimos a conversar un rato y le dije que le escribiría después.

- Provecho pues, como te vas a divertir, ya me choteas, está bien, mientras yo en casa jajaja – Me respondió – Diviértete, me escribes después.

Le mande una flor y ella una carita feliz, luego de eso la pasamos en la playa un rato, volvimos al hospedaje, salimos en la noche a uno de esos locales frente a la playa y nos la pasamos bailando y tomando, como a las 2:00 am volvimos a descansar. Al día siguiente a medida que nos despertábamos nos fuimos a desayunar y luego nuevamente a la playa. Ahí la pasamos hasta casi las 5, nos dirigimos al hospedaje y como a las 9:00 pm estábamos nuevamente en Piura. El lunes en la noche salí temprano de la obra, aún estaba golpeado por la juerga del fin de semana y las 3 horas en colectivo de regreso no ayudaron y luego de descansar un rato le escribí a Melissa.

- Hola Melissa, como estas???
- Si señor??, quien es usted?? Nos conocemos?? – Me escribió.
- Claro que nos conocemos, y muy bien – Le respondí.
- Ahhh, si algo creo que me acuerdo, es que hace TAAANNNNTOOO que no me escribe, que ya me olvide de usted. Claro, como se fue de juerga, ya se olvidó de por lo menos saludar.
- Yooooo??? De juergaaaaa?? - le respondí – Creo que me confundes jajaja

Luego de eso le mande una foto donde salgo con mis amigos, todos con cerveza en mano en el local frente a la playa tomando.

- Ups, disculpa esa foto era para el otro grupo, que vergüenza, has como si no la hubieras visto por favor. Jajajaja – Le escribí.
- Jajajaja, encima presumes jajaja, como la pasaste???

Después le conté todo lo que habíamos hecho desde que salimos, el paseo en la playa, el hotel, la juerga en la noche y el día siguiente que la pasamos en la playa, luego le mande algunas fotos para que viera el lugar.

- Parece bonito el lugar, me encantan esas playas pero no he tenido oportunidad de ir – Me dijo.
- Pero puedes venir, pides un par de días en tu trabajo, tú no trabajas el sábado, pides lunes y martes, tendrías 4 días. – Le respondí.
- Sí, es buena idea pero tú trabajas hasta el sábado, quien me acompañaría??
- Puedes programas tu viaje los días que tengo bajada, en lugar de irme a lima me quedo y nos podemos ir a pasear tranquilos el fin de semana y los días que te quieras quedar.

Le di la fecha en las cuales me tocaban regresar a Lima, Melissa me dijo que al día siguiente hablaría con su jefa. Como a las 4:00 pm suena mi celular, era ella:

- Alo – Le respondo
- Adivina!! – Me respondió.
- Uhmm, te caíste de la cama??? – Le dije.
- Jajaja, gracioso – Me lo dijo en un tono sarcástico – Noooo, hable con mi jefa y accedió a darme permiso, incluso me dijo que podía tomar desde el viernes a cuenta de vacaciones, así que iré a Piura.
- Perfecto, entonces así quedamos, voy a reprogramar mis vuelos de regreso – Le respondí – Te espero entonces.
- Conversamos después, voy a seguir con mis cosas y terminar con unas cosas que me pidió mi Jefa antes de irme.
- Está bien, conversamos en la noche – Le dije.

De ese día en adelante nos pusimos a conversar sobre su llegada y las cosas que debería traer en el viaje, además de que tenía muchas ganas de verme y obviamente yo también ya que algunos días nos pasábamos recordando lo que hicimos en el hotel lo cual nos calentaba bastante.
Los días pasaban y solo era cuestión de esperar un poco más para poder ver a Melissa…

....

 

Buen relato estimado cofrade, por lo que noto usted es muy fiel a su chinita, bien por eso.
Saludos.

 

Que buen relato cofrade usted no vee a otra mujer que a su jermita tu si la conoces espero que haya continuacion del relato

 

Gracias por los comentarios compañeros, pero tan santo no soy, ya lo notaran mas adelante cuando continue con la historia..

Como habíamos planeado, las fechas que me tocaban bajar a Lima me quedé en Piura, aproveche los días previos para hacer unos preparativos, alquile un hospedaje alejado de donde normalmente nos quedábamos con mis amigos en Mancora, no quería encontrarme con ellos, aunque no tenían planeado ir ese fin de semana, nunca está de más tomar precauciones.

Además en el hospedaje donde estaba quedándome también había varios compañeros del trabajo por lo decidí buscar otro alojamiento para poder quedarme con Melissa ya que el primer día la pasaríamos en Piura y al día siguiente recién partiríamos a Mancora. Encontré uno en la Urb Miraflores cerca de la universidad Nacional de Piura por lo que lo alquile un día antes y aproveche para dejar mi equipaje que llevaría en el viaje. Según lo habíamos acordado, el día viernes me levante temprano, Melissa me había mandado un mensaje diciéndome que estaba en la sala de embarque y que pronto subiría al avión, 15 minutos después de ese mensaje me escribió que ya estaba a punto de despegar. Me duche y me fui al aeropuerto a recogerla. Espere unos 10 minutos más y en el aeropuerto anunciaron la llegada del vuelo proveniente de lima y luego de un rato, el mensaje de Melissa confirmándome que había llegado. Le conteste que estaba esperándola en la zona de pre embarque.

Luego de un rato finalmente salió, estaba vestida con un leggins color negro el cual hacia resaltar muy bien su cuerpo, un polo con manga tres cuartos color gris, zapatillas blancas, una casaca ligera, lentes oscuros y con el cabello amarrado con una cola de caballo, además de eso traía una maleta, mochila y un bolso.
Al verla fui a darle el alcance, ella noto mi presencia también y apuro el paso, nos abrazamos y nos besamos. Luego del efusivo saludo, ella se quitó la casaca ya que empezaba a sentir el calor de Piura, tome su maleta y la cogí de la mano para dirigirnos fuera del aeropuerto para tomar un taxi hacia el hospedaje. En el camino me iba contando todo su trayecto y que dijo en su casa que iría con un grupo de amigos.

Llegamos al hospedaje finalmente, pedí la llave a la recepción y nos fuimos hasta la habitación que quedaba en el segundo piso. Una vez dentro de la habitación, me abalancé sobre Melissa, nos empezamos a besar y mis manos fueron directo a la cintura y de inmediato a sus hermosas nalgas.

- No puedes aguantar hasta la noche?? – Me dijo
- No, te voy a hacer mía ahora - Le respondí,

Continúe besándola y mis manos se metieron dentro de su leggins, podía tocar su calzón, inmediatamente después levante mis manos para quitarle el polo, ella levanto sus brazos ayudándome a que saliera más rápido, de igual forma y con algo de torpeza también empecé a desvestirme ya que aún estábamos de pie. Luego Melissa se hecho en la cama, de un par de movimientos se quitó las zapatillas dejando sus piernas frente a mí, cosa que aproveche para coger el leggins y de un golpe se lo saque. Me puse sobre ella, la bese y luego baje hasta su cuello, seguí bajando hasta sus senos, Melissa seguía con el brassier puesto así que con mis manos baje las tiras de sus hombros y luego el brassier quedando finalmente libres esos senos que de inmediato empecé a acariciar y luego procedí a chuparlos.
Melissa empezó a dar pequeños gemidos y su respiración estaba acelerada, nuevamente baje mi mano hasta tu vagina, se sentía húmeda a través de su calzón y luego metí mi mano dentro y me di cuenta que estaba totalmente depilada; empecé a jugar con su vagina lo cual ocasiono que empezar a lubricar con mayor rapidez. Termine de sacarme el bóxer y mi pene salió como punta de lanza, estaba duro y listo para entrar en Melissa.

- Tienes como cuidarte?? – Pregunto Melissa.
- Claro que sí, vengo preparado - Le respondí.

Afortunadamente en la maleta que había traído el día anterior tenía varios preservativos así que me apresure a sacar uno y ponérmelo, me acerque nuevamente a Melissa que se encontraba en la cama, simplemente esperando a que continúe y para ese rato ya se había quitado el brassier, me senté a su lado; cogí su calzón con ambas manos, ella levanto las piernas y se lo quité suavemente.

Esta vez, ella misma abrió las piernas, una perfecta invitación para poner mi pene en la entrada de su vagina.

- Métemela – Susurro Melissa con una voz suplicante - Métemela despacio – continuo pidiendo.

Hice lo que me pidió, mi verga fue entrando poco a como en Melissa, sus manos apretaban el cubrecamas y en su cara se podía ver el placer que sentía y de rato en rato hacia un gesto de dolor seguida por un gemido, finalmente entro todo en ella, lo cual fue seguido de un suspiro de alivio, pero esa sensación fue solo un momento ya que empecé con las embestidas, verga empezó a entrar y salir.
Melissa comenzó a gemir como desesperada, también empezó a moverse, el calor de la cuidad sumado a todo el movimiento que estábamos haciendo hicieron que en pocos minutos terminemos sudando, puse una de sus pierna a un lado y empecé a darle de costado y con más fuerza, al parecer eso le gusto más ya que empezó a gritar.

- Ahhh, ahhh, así asi, dame ahhhh
- Así mi amor, dame así así así - Decia con voz suplicante.

Me acomode nuevamente, esta vez puse sus piernas en mis hombros y empecé a darle con más fuerza y su excitación era tanta que ella misma puso sus manos en su boca para que sus gritos y gemidos no se escucharan en todo el hotel. A mi realmente no me importaba, seguía entrando y saliendo, hasta que finalmente termine eyaculando. Me retire de encima de Melissa, ella cerro sus piernas y se puso de costado aun con la respiración agitada, fui al baño a tirar el condón y cuando volví me puse a su lado.

- Hemos sudado demasiado, hace mucho calor – Me dijo Melissa.
- Y eso que recién empieza el día, luego se pone más caluroso, pero con el tiempo te acostumbras – Le respondí.
- Y tampoco pudiste aguantarte, no paso ni una hora de lo que llegue y te aprovechaste de mi jajaja.

Melissa dio un salto de la cama y desnuda fue hacia su maleta, saco unas cosas y se fue hacia el baño.

- Voy a darme un duchazo, me acompañas?? – Me pregunto.

Ni corto ni perezoso también salte de la cama, fui a mi maleta, saque una toalla, mis sandalias y fui tras ella.
En la ducha no pasó mucho, solo algo de paleteo y en un rato cogió mi pene y empezó a masturbarme. Luego de terminar de bañarnos nos cambiamos y nos fuimos a tomar desayuno.

Continuara...

 

Felicidades!! Muy buen relato! Esperamos su próximo episodio

 

Ta bueno buen relato men prosige y aver si te animas a subir un par de fotitos

 

Buenas noches gente, espero que la cuarentena no les haya afectado tanto y para distraerlos un poco, prosigo con mi relato...

En el transcurso del día nos dedicamos a hacer turismo por la cuidad, fuimos a la plaza de armas, la catedral, la casa de Miguel Grau y el museo municipal Vicus. Luego de eso nos fuimos a catacaos y las ruinas de Narihualá que están cerca de ahí.

Regresamos como a las 7:30 pm al hospedaje ya que nos quedamos tonteando en la plaza, Melissa estaba cansada debido a que había madrugado para tomar el vuelo y todo lo que habíamos caminado en el día por lo que decidimos bañarnos en la habitación y luego cenar cerca al hotel para regresar rápido y que pueda descansar. Le dije a Melissa que iría a mi hospedaje un rato ya que me había olvidado de traer el cable de mi celular, mis lentes de sol y algunas otras cosas que necesitaría en Mancora. Al terminar de comer, la deje en la habitación del hotel y me fui según le había explicado, llegue a mi cuarto y busque las cosas que me faltaban, saliendo en la pequeña terraza que había encontré a algunos amigos del trabajo que estaban conversando y tomando unas cervezas, me quede un rato con ellos y luego salí para ir nuevamente al hotel donde estaba Melissa.

Llegue a como a las 9:30 pm y entre a la habitación, la luz estaba apagada, la tv encendida y Melissa se había quedado dormida. Vi que estaba con un pijama que era un pequeño short y un polo, además estaba a medio cubrir con una manta ligera. Para no despertarla prendí la luz del baño y apague la TV, tratando de no hacer mucho ruido también me puse mi pijama y luego de apagar todas las luces me acosté a su lado.

Como estaba de costado me puse detrás de ella y procedí a abrazarla, según yo, tenía la idea de descansar pero al parecer mis manos y mi pene tenían otras intenciones. Al estar en esa posición y sentir su perfume, instintivamente mis manos fueron directo a los senos de Melissa los cuales los empecé a acariciar sobre el pijama y luego sin darme cuenta ya tenía mis manos bajo su polo y estaba acariciando sus pechos que eran perfectos, redondos y duritos. Al mismo tiempo que hacia esto mi miembro se pegó al trasero de Melissa y empezó a ponerse duro.

Al parecer esto tampoco pasó desapercibido por Melissa, poco a poco empezó a entrecortarse su respiración y empezó a dar gemidos secos, sin hacer tanto ruido como había pasado antes. Al momento ella también tiro para atrás su cuerpo ocasionando que se pegue más aun mi pene a sus nalgas. Los minutos pasaron y no sabía qué hacer, Melissa seguía con los ojos cerrados pero se notaba que me seguía el juego y mientras seguía pensando en dormir o tirármela, ella misma me dio la respuesta pues se bajó el short y me di cuenta que no tenía ropa interior.

Ya con la consigna establecida hice lo propio, me quite la pijama y mi pene salió como un resorte, quise buscar un preservativo pero para ese momento la arrechura pudo más y acomode sus caderas, levante más su culito y se la metí por la vagina sin protección.

Cuando hice esto escuche un largo suspiro seguido de un ahhhhhh de Melissa, ella no hacía nada, seguía con los ojos cerrados, que bien se sentía estar así, era una sensación de calidez y humedad, además que podía sentir mejor como sus paredes vaginales apretaban mi verga. Solo cuando empecé a bombear volvieron los gemidos, como no sabía si había peligro de que quedara embarazada empecé a meter y sacar mi pene a un ritmo constante pero no tan rápido para evitar venirme dentro de ella. Así seguí buen rato, ella no dejaba de gemir, y cuando finalmente sentir que iba a terminar, saque mi miembro justo a tiempo pero termine manchándole la espalda. Busque una toalla del hotel y trate de limpiarla lo mejor que pude. Luego de eso me volví a poner el pijama, me acosté a un lado y me quede dormido.

Al día siguiente nos levantamos bastante temprano, tomamos desayuno en el hotel y alistamos las cosas que llevaríamos, y las que nó, se quedarían encargadas en la recepción hasta nuestro regreso para no pagar hospedaje en los días que estaríamos en Mancora.

Llegamos al lugar donde salen los colectivos y salimos rumbo a Mancora, luego de 2 horas y media por fin llegamos, tomamos una moto la cual nos llevó al hospedaje. El hotel era bastante simpático, si bien estaba un poco alejado de la zona céntrica, tenía vista a la playa, aire acondicionado, wifi, piscina y restaurant.
Nos acomodamos y luego nos fuimos a pasear, nos pusimos a pasear por la playa, luego fuimos al mercado donde Melissa compro algunos aretes y pulseras, también fuimos a ver los tours que ofrecían y decimos tomar uno para el día siguiente para ir hasta Tumbes y pasear por los manglares (Yo ya he hecho este tour dos veces con dos de mis ex, con ellas también nos escapamos unos fines de semana). Luego de almorzar volvimos al cuarto del hotel.

- Vamos a la playa, quiero nada y broncearme un poco – Me dijo Melissa.

Luego agarro su maleta, la abrió y empezó a sacar unas cosas y se fue al baño.

- Que haces – Le pregunte.
- Voy a ponerme mi traje de baño – Me respondió.
- Y no puedes ponértelo acá? Quiero verte – Le dije.
- No, es una sorpresa – Me dijo mientras me sacaba la lengua y se metía al baño.

Aproveche para poner algunas cosas en mi mochila y ya estaba listo para irnos, unos minutos después salió Melissa, estaba con un short bastante corto y un polo manga corta color blanco, Luego de eso salimos pero no pudimos encontrar ninguna moto, como indique anteriormente el sitio estaba un poco alejado. Fuimos a la recepción y la chica que atendía nos dijo que ella llamaría un mototaxi para nosotros; nos dijo también que ellos trabajan con un grupo de choferes que son de confianza y nos recomendó que tengamos cuidado porque en la noche esa zona es un poco oscura y no recomendaba que caminen a esas horas. Seguimos su consejo y le pedimos que nos diera los teléfonos de los choferes que trabajan con ellos para llamarlos cuando los necesitemos.

Al rato llego un muchacho manejando una moto y nos llevo a la playa. Una vez ahí buscamos un buen sitio y alquilamos una sombrilla, pusimos las toallas y Melissa se sacó el polo y el shortcito.

Woww, tenía un cuerpo bellísimo y resaltaba más con el bikini que se había puesto, me quede admirándola un rato mientras ella guardaba su ropa en su bolso, luego saco el bloqueador y empezó a echarse, después me pidió que se lo ponga en la espalda, así que ni corto ni perezoso empecé a hacer y me di un poco de maña para mis manos de manera “casual” toquen sus senos.

- Oye, controla esas manos, jajaja – Me dijo.

Luego se echo en la toalla y se dispuso a tomar algo de sol, por mi parte luego de echarme bloqueador me puse un rato a observarla, se veía tan bien, tenía un hermoso cuerpo, todo en su lugar, su cintura no tenía nada de grasa, sus piernas bellísimas y unos senos que solo al verlos provoca besarlos.

Todos eso pensamiento hicieron que mi pene empiece a despertarse por lo que decidí distraerme con mi celular. Al cabo de un rato me aburrí y me fui a nadar mientras Melissa seguía tendida en toalla.

Cuando volví, Melissa se encontraba boca abajo y sus nalgas redondas y firmes hacían que más de un pata voltee a verla cuando pasaban cerca a ella.

- Como está el agua??- Me pregunto cuando llegue.
- Muy buena, pero no tanto como tu – Le respondí.
- Jajaja, que floro eres – Respondió

Luego de un salto se levanto, se quitó los lentes de sol, extendió su mano hacia mí y me dijo:

- Vamos??, también quiero meterme al mar – Me dijo – Acá no hay tiburones verdad??
- Jajaja, no, no tengas miedo, el único que te va a comer soy yo.

Me levante y nos fuimos de la mano al mar, ahí la pasamos bien, nadando y lanzándonos un poco de agua, ella se subía a mi espalda y trataba de hundirme, yo por mi parte no perdía oportunidad de cogerla de la cintura o del trasero y así pasamos buen rato. Luego de eso volvimos a donde estaban nuestras cosas y nos pusimos a conversar, la hora paso volando por lo que decidimos meternos una vez más y luego irnos al hospedaje. Una vez ahí nos metimos a la piscina y como estaba frente al mar pudimos ver el Sunset juntos, cosa que a ella le gusto.

Bueno amigos, continuaré mañana porque ya me dio sueño..

 

Buen relato amigo. Continue