Rompiendo falsos mitos

LA INDIFERENCIA QUE SEDUCE.....


Estaba recordando hace poco entre nubes difusas que se van distorsionando por el paso del tiempo, algunas situaciones algo particulares vividas allá en esos años "locos".... no ha pasado mucho en realidad, pero se siente lejano.
Me siento tan alejada de aquel YO de fantasía que en realidad no existe, solamente fue un personaje que duró un poco más de lo que dura una película. Por ejemplo Julia Roberts solamente fue por unos meses la famosa chica de "Pretty Woman", después de eso siguió siendo Julia Roberts y nada en su vida cambió, salvo estar en la memoria de unos cuantos televidentes (y haber ganado unos Oscars jaja). Pienso ocasionalmente en que uno que otro "amigo" de aquellos días se detendrá a preguntarse que fue de mi vida y como estaré, pero serán recuerdos fugaces que se van y todo sigue su curso exactamente igual sin alterar su vida o la mía ya que no es algo relevante.
Bueno, a mi me pasa lo mismo, recuerdo ocasionalmente alguna gente que pasó en aquella época por mi vida, más concretamente pasó por mi cuerpo y se posó entre mis piernas.


En este caso hablaré de alguien que me intrigó mucho. Lo ví casi cada fin de semana que asistía al club, sentado siempre acompañado de lindas chicas en su mesa. Solamente recuerdo que no parecía que hablaba mucho, de rato en rato se le pintaba una sonrisa de media luna, es decir una sonrisa a medias nada más. Iba algunos días solo, algunos días acompañado de un grupo de amigos. Se quedaban casi toda la noche pero el no participaba en el bullicio, bailes o picardías subidas de tono que ahí comunmente se veía, simplemente pintaba su sonrisa de media luna y miraba los bailes fijamente.
Parecía que conversaba poco también. Digo que parecía, ya que nunca me invitó a acompañarlo, no me miraba, no me sonreía, no me saludaba. Exactamente era la actitud que cualquiera puede tomar con una chica que no le gusta y eso precisamente fue lo que me atrajo, cual estocada en el orgullo simplemente no podía admitir que el se sienta atraído a chicas que físicamente eran muy parecidas a mí o con similares atributos físicos. ¿Porqué no conmigo?


Ya he dicho que me gusta lo difícil y es así como este hombre que físicamente no me hubiera llamado la atención ni para bien ni para mal, se volvió en mi objetivo de guerra. Pero, qué hacer y como hacer para que se fije en mí? definitivamente yo no me regalo a nadie, no soy inoportuna, no me voy a ir a sentar donde no me llaman y no voy a ir a hablar a alguien que ni siquiera me ha saludado a pesar de que ha pasado por mi lado. Más difícil aún considerando que siempre estaba rodeado de lindas mujeres que como pirañas se le acercaban ya que era considerado "un buen cliente". A mi no me interesaba lo que pudiera gastar, simplemente quería entender si en realidad no le gustaba y porqué.... si, si, soy un tanto caprichosa y vanidosa jaja.


Bueno, decidí hacerme notar por lo que a el evidentemente le prestaba atención, y eso era en los bailes.
Yo bailaba, no siempre pero si bailaba. No se puede decir que soy una chica "Perutops" digna de un concurso y que se trepa 4 metros arriba del caño y baja de cabeza milímetros antes de estrellarse contra el piso. No, no tengo esas destrezas. Humildemente y de manera auto didacta aprendí a hacer un par de giros simples en el caño, suaves sensuales combinados con caídas ligeras al piso donde lentamente me levantaba ligeramente despeinada y excitada de poder mostrar mi cuerpo a aquellos extraños mientras me despojaba de a poco de la poca ropa que me cubría la piel. Tenía algunos trajes, colegiala, angelita, diablita, enfermera, policía, baby dolls, ligueros, panties, bebé, secretaria, gatita y algunas otras prendas más que había adquirido para no tener vestuarios monótonos.


Decidí anotarme para bailar todas las veces que iba y varios de esos días el asistía y miraba mi baile. Mientras bailaba alguna música lenta y sensual lo miraba fijamente pero de una manera tímida y hasta inocente para ser discreta. Me iba desprendiendo de mis prendas poco a poco y cuando mis pechos quedaban al descubierto pasaba por unos pocos segundos mi mano suavemente acariciando mis senos mientras lo miraba, él se quedaba con la mirada fija en mí. Eso precisamente era lo que yo buscaba, que él desee tocarme, que sienta que era él quien posaba sus manos sobre mi piel. Eso se lo transmitía.
Ya a ese punto sabía que no le era indiferente.

Comenté que él ocasionalmente iba con un grupo de amigos, bueno yo conocía levemente a varios de esos chicos, ellos eran algo más desenvueltos y de vez en cuando compartíamos uno que otro trago, así que por ese medio también había veces que estábamos de frente a frente en con este misterioso sujeto, aunque él nunca estaba solo, ya empezó a dedicarme una que otra sonrisa de media luna de manera disimulada.
Ya había captado su interés y posiblemente su intriga, ya que yo aún no le ofrecí nunca una sonrisa, simplemente miradas furtivas.
Él ya estaba exactamente donde yo lo quería.......

 

LA INDIFERENCIA QUE SEDUCE, PARTE 2

Aquel misterioso sujeto que antes no me dirigía ni una mirada ahora ocasionalmente me sonreía pero solamente por unos leves segundos y eso me calentaba, me excitaba. Entre mi siempre me preguntaba si realmente él no se sentía atraído hacia mí y eso molestaba a mi ego.

Mis bailes si miraba, me veía desnudarme solamente para él, es que en cierta medida se los dedicaba. Bajaba las tiras de mi brasiere y dejaba al descubierto mis pechos blancos, abundantes delante de su mirada y yo me sentía sensualmente vulnerable a sus miradas furtivas aunque él nunca podía mantener su mirada fija en mi, la bajaba nerviosamente (o desinteresadamente), no lo sé.... y seguía después como si nada, con su vaso de cerveza casi eterno en su mesa solo mirando al infinito (pocas veces) o casi siempre acompañado de una chica linda y hablando poco.

Porqué este sujeto me atraía tanto? no era el biotipo que me llame la atención, simplemente por el capricho idiota del ser humano de siempre querer alcanzar lo más difícil. Y así pasaron los meses. Yo deseando a aquel extraño y él mirándome solamente segundos. No lo niego, el juego era interesante, ya que mientras tanto las noches eran largas y habían más aventuras por vivir....

Un día era algo temprano, la noche iniciaba yo salía recién cambiada y arreglada lo único que deseaba era comprar una botella de agua y en la barra ahí estaba él, solo, me mira y me dice si le acompaño a tomar algo. Sentí un calor por dentro, al finnnn!!! meses y meses de sentirme ignorada habían llegado a su final, mi ego estaba en las nubes, que tipo más exquisito por favor, nunca lo ví con una sola chica medianamente fea. Si me invitaba algo de tomar, era por algún motivo, a nadie le gusta botar la plata al agua, o no? acepto de manera indiferente y calma. Yo regalada, jamás! pido cerveza (no es mi elección preferida, la cerveza la asocio a las panzas cheleras y es algo que detesto y de ahí mi leve rechazo a tomar cerveza jajaja yo y mis manías), pero sé que a él le gusta la cerveza y quiero agradar porque esta oportunidad no se me escapa. Quiero aclarar algo y ser sincera, si este hombre en cualquier otra situación se me insinuaba, pienso que no aceptaba, ya lo he dicho no me atrae físicamente, pero contradictoriamente el hecho de que quiera pagar por mí, me excitaba solamente pensarlo, me sentía mojada, y no era el dinero, era el estúpido sentido de competencia y amor propio de saber que podía conquistar al inquebrantable hombre de acero con gustos exquisitos y bueno, el que tiene plata hace lo que le da la gana! en ese momento yo incluida, que me haga lo que le de la gana!

Es callado, reservado, esas personas que si no inicias una conversación, el puede estar sin decir palabra. Yo no soy así, soy un torbellino y tenía muchas dudas. Poco a poco me explica la situación, no es creído, no es antipático, es extremadamente tímido. Tiene amigas que conoce desde hace bastante tiempo y se le pegan cada vez que llega y no puede despegarse de ellas, es educado y no se anima a decirles que quiere conocer a alguien más, pero además disfruta de la compañía de ellas y las respeta en los momentos que comparte, es por eso que es tan difícil llegar a él. Es trabajador, tranquilo, respetuoso y por todo eso sumado a lo anterior, lo único que quiero es cogérmelo! jajaja hay soy de lo peor, pero ese era mi objetivo de guerra desde hace mucho y esta oportunidad no la dejo pasar.

La cerveza me dura bastante, no es algo que me puedo bajar de un sorbo mientras conversamos de varias cosas y cruzo mis piernas, sutilmente él las mira. He dicho que mis piernas y mis senos son mi arma de seducción? claro que si! soy del gusto peruano promedio, piernas y senos blancos, abundantes, suaves y firmes y eso señores no pasa desapercibido. Rozo leve y sutilmente su pierna con mi pierna desnuda, muy suavemente mi brazo acaricia el costado de su pecho cuando me inclino a mi mesa a buscar mi vaso de cerveza. Dejo que sienta mi piel por unos segundos y huela mi perfume suave y sensual mezclado con el aroma de mis cabellos recién lavados. Cayo! su sonrisa de media luna ya no es indiferente, tiene un dejo de morbo y excitación y me pide que me vaya con él. Me quedo en silencio, termino mi vaso de cerveza ahora más rápidamente, me levanto y lo tomo del brazo y lo llevo, él se deja llevar.... casi no hablamos un silencio más que tenso, sensual.....

Una vez en la habitación pido pasar al baño y que él se ponga cómodo. Me doy un duchazo rápido y salgo envuelta en toalla solamente, mis cabellos mojados y al natural, quiero gustarle al natural. El está en ropa interior, jodidamente tímido; le pido que se relaje, le doy un suave masaje en su espalda, él se empieza a calentar. Es un momento que fue planeado por mi parte estratégicamente y lo pienso disfrutar, primeramente le daré una mamada de película. El sentado en la cama, bajo hasta sentir el frío del piso en mis rodillas, le desprendo la ropa interior, delicadamente agarro su verga ya grande e hinchada, la masajeo de arriba a abajo suavemente mientras desprendo mi toalla, dejando al descubierto mi cuerpo desnudo, mojado. Siento una ráfaga de frío y se me erectan los pezones, aprovecho la ocasión para masajear con mis pezones erectos su glande, esto le produce cosquillas y emite unos gemidos ahogados. Ahora tomo con mi mano uno de mis senos y lo empiezo a frotar en su verga de la raíz a la punta, luego son los dos, lo que termina en un riquísimo ruso. Suavemente su verga se hundía dentro de mis pechos y volvía a aparecer. Decido acercar mi boca y primero mi lengua es la que saborea de abajo hacia arriba como un chupetín su pene duro, muy duro. En mi boca se siente como la sangre fluye con toda rapidez por las venas de su miembro, es una sensación que las mujeres lo podemos describir, es sentir latir la verga cuando está en su máximo tamaño y hace cosquillas en la boca. Empiezo a saborear primero la punta de su pene moviendo mi lengua en círculos perfectos bordeando todos sus puntos débiles. Las ganas son muchas y me lo trago completo, siento mucha humedad, se me hacía agua la boca y saboreo y saboreo mientras el hace movimientos de meterlo y sacarlo, mi lengua se mueve rápidamente masajeando ese hermoso miembro.

El introduce sus dedos en mi vagina, soy un mar de fluidos. Me encanta sentir unos dedos curiosos y mañosos dentro mío, es algo que siempre me gustó, de hecho en mi época colegial tuve varios orgasmos con un compañero que metía sus deditos traviesos bajo mi falda del uniforme en horario escolar. El quedaba con el olor de mi vagina hasta la hora del próximo recreo y en medio de la clase los olía disimuladamente mientras me miraba con picardía... qué épocas. Si pudiera volver el tiempo, pienso que sería más putita, ya que solamente se vive una vez!!
Volviendo al acto en aquel hotel con aquel desconocido, aquellos dedos eran firmes entraban y salían por mi orificio húmedo y yo gemía de placer, totalmente desnuda siento que mis piernas flaquean de la excitación y otra vez mi cara está a nivel de su miembro. El empieza a masajearme la cara con su verga, me la restrega suavemente sobre mis ojos, sobre mi boca, saco la lengua para querer lamerla pero él no me deja, la retira y me empieza a golpear el rostro con su miembro. Que ricura, me encanta ser sometida de esa manera, deseando tragarme una verga que no se deja y me castiga. Mientras tanto me introduce sus dedos a mi boca, los que salieron de mi vagina y yo empiezo a tomar mis propios fluidos, mezclados con su verga que también se abre paso dentro de mi boca al mismo tiempo.

En ese punto ya no puedo más y como fiera me incorporo y abalanzo sobre él, lo tumbo sobre la cama y estando arriba le ofrezco mis pechos para que sean manoseados y lamidos a su antojo y eso precisamente es lo que hace, los introduce a su voluntad en la boca, chupa y lame sin piedad, muerde ligeramente los pezones y sigue lamiendo mientras los amasa, junta, separa y vuelve a lamer. Me siento sobre él y empiezo a frotar su verga sobre mis glúteos, se siente delicioso y yo ya siento las cosquillas propias de algo hermosamente placentero que se aproxima. Introduce su miembro dentro mío y se lo agradezco con la mirada. Al fin me mantiene la mirada fija mientras me penetra. Me siento para que pueda sentirla más profunda a la vez que me toco el estómago porque la siento así de adentro y dio varios saltitos cortos para que ingrese aún más. Me duele un poco y eso me gusta así que empiezo a moverme como loca. Mi forma de tomar muchas veces el sexo es de una manera agresiva y desenfrenada. No pretendo que lleguen rápido, pero para alguien que no tenga mucho aguante, puede ocurrirle un accidente. El por suerte me aguanta. Me muevo frenéticamente sobre su cuerpo y me vengo abruptamente, pero de manera tan salvaje que no me importa y sigo hasta volverme a venir. Estaba cumpliendo mi objetivo de cogerme a ese hombre hermético e inalcanzable y así me vengo una vez más.... me rindo sudorosa en su pecho. El me maniobra como su fuera una muñeca de trapo y me deja en 4. Con aquel panorama empieza a indagar mis agujeritos con sus dedos traviesos y yo no hago nada para detenerlo, solamente gimo de placer, estoy rendida a sus caprichos.... abre con sus manos mi vagina e introduce su pene erecto con tal fuerza y potencia que apoyo mi pecho en la cama y así con mi culito al aire me dio en perrito cuanto pudo, sacando y volviéndolo a poner, suave, fuerte, intenso, frenético, hasta que se vino con todas sus fuerzas. Fue muy rico, delicioso y sobretodo era algo que deseaba desde hace mucho tiempo.

Volví a darme una ducha rápida, el hizo lo mismo. Salimos y nos despedimos con un piquito en los labios.
Nunca más volvimos a repetir el encuentro, creo más por falta de tiempo que de ganas ya que poco después de eso ya abandoné mis andanzas kineras. Sé que el sigue frecuentando chicas lindas, es algo que él colecciona. Yo en cierta medida me parezco a él en que solamente tomo lo que me interesa y no le doy más vueltas al asunto, así práctico y sin sentimientos de por medio y esa indiferencia, si que atrae...

 

Nunca las noches son tan locas como para dejar de usar condón. Tranquilo que no estoy tan loca como para hacerlo así nada más jajaja

Pensé en si escribía o no ese detalle, pero no quería cortar la narrativa, pero que se sepa q siempre de los siempres lo uso.

Hay dos cosas que no van conmigo en esta vida y son el sexo sin protección y la infidelidad (y por eso me mantengo soltera)

 

Gracias amigos. Tenía como tarea pendiente terminar con ese relato del hombre difícil y al fin se dió la oportinidad de hacerlo. Contenta de que les haya gustado.

 

Si si RadioTops eso mismo es a lo que me refería.
Hay relatos unos más interesantes que otros, pero al ser reales no siempre son historias impactantes, simplemente relatos de tiempos pasados, obvio que hay unos momentos más instensos que otros. Por ejemplo si me pondría a relatar mi última expreciencia, la verdad es digna de una película de horror (espantoso) ajjaja y nada digno de comentar..... se dormirían del aburrimiento al leer jajaj.

Personajes como tu amigo, o el cofrade del relato, hay muchos, mismo perfil. Conocí a unos cuantos.

 

REMEMBRANZAS.... CERRANDO UN CAPÍTULO

Como lo he contado al inicio de la narración de esta saga que ya tiene casi 2 años, recuerdo muy bien mi primer "cliente", un novio próximo a casarse que prácticamente no quería tocarme, estaba muy enamorado y todo fue por insistencia de su jefe que era quien invitaba. Una experiencia un poco inusual para ser mi primera vez. Era yo quien debía mantener la calma y llevar el control, cuando por dentro era un manojo de nervios. Quería gozar y subir la adrenalina al sentirme comprada, usada por un extraño, pero aquel día no pudo ser.... sin embargo días posteriores si se dieron experiencias excitantes que llevaré en mi memoria con mucho morbo, las cuales narré acá mismo en capítulos anteriores.

Hubieron varios más. Historias simples de momento, recuerdo casi a todos ellos.; unos buenos amantes, otros regulares y uno que otro no tan bueno.... en fin, supongo que fueron gajes del oficio.

Paradójicamente no recuerdo mi último cliente, con el que dije, ya no más! sabía que mis días de descontrol debían llegar a su fin. Ya dejó de ser novedad, ya casi no me divertía, tenía nuevos proyectos, otros rumbos y obligaciones que tomar y ya no había tiempo de jugar a ser meretriz. Era tiempo de cambiar los tacos aguja por cómodos tacones ejecutivos, los micro vestidos fiesteros por un traje de sastre y dejar de lado el whisky y cerveza por una café o té de media mañana. Suena aburrido, es verdad que hay veces que lo encuentro monótono y gris. Seguir los estándares tradicionales de ser correcta social y moralmente puede ser muchas veces desgastante. Supongo que tengo un puti-espíritu mañero, atrapada en el cuerpo de una profesional común y corriente como las que abundan en cualquier ciudad.

Sabía que tenía los días contados en el club. Había decidido ya no más, y suelo ser muy determinada y hasta terca en las decisiones que usualmente tomo. No se lo dije a mis "caseritos", tampoco a mis amigas "colegas", a nadie en realidad solamente una noche fui a trabajar al club, llevé todos mis vestuarios, maquillaje, zapatos, todo en una gran maleta de rueditas y al retirarme, todo lo dejé ahí, abandonado, dejando todo atrás y cerrando un capítulo. Miraba en silencio con nostalgia a aquellas chicas "malas" que se habían convertido en mis amigas, sabía en silencio que era mi despedida y no las volvería a ver nunca más. Ellas nunca supieron mi verdadero nombre, yo no quise saber el de ellas para precisamente no tener manera de ubicarlas después. No eran malas. Talvez un poco equivocadas, simples, humildes, desacertadas, cómodas, juergueras o lo que fuere, pero malas no... la vida muchas veces te lleva a ponerte máscaras protectoras, escudos para no ser lastimada. Supongo (no sólo supongo en muchos casos lo sé) su vida no fue fácil, el ser ingenua o débil en ese ambiente, lo único que te lleva es a ser una presa fácil de la gente aprovechadora. Ohhh si he visto incluso chicas que han sido seriamente lastimadas o golpeadas por otras chicas de malas mañas.

Tomé mi último trago, me despedí de mis compañeras de los últimos meses, compañeras de juerga, de borrachera, de sexo en ciertos casos (no, no, no tuve sexo con ninguna, no me gustan las mujeres, pero si participé con algunas en tipos de encuentros más íntimos y cercanos con grupos de amigos y clientes) me despedí como si nada, como quien vuelve en unas horas a re encontrarse, pero me fui triste. Seré honesta, si sentía cierto aprecio y hasta cariño por ellas. ¿Vieron que no soy tan fría?

Vuelvo a hacer memoria y decididamente no recuerdo mi último encuentro pagado. Debió ser memorable, era mi despedida de una etapa, sin embargo ahí me doy cuenta que ya no debía seguir más en ese lugar. Cuando un cliente-amigo deja de ser digno de recordar y de hacer un relato erótico, re afirmo que fue acertado el momento de retirarme.

Cómo lo he dicho, así sea difícil de creer, el dinero nunca me atrajo. Me atraía más bien la acción de que alguien quiera pagar por mí, me llenaba el ego saber que pagaban un precio nada barato, porque no era tan accesible por pasar tiempo conmigo. Será algún complejo que cargo en el interior? no lo siento así. Nunca sufrí de bulling, al contrario, viví siempre rodeada de amigos, tuve siempre mis pretendientes, volteo miradas en las calles.... en fin, no sé, será algo digno de un análisis psicológico. El dinero no tenía para mi el valor monetario en ese tipo de transacción carnal, era más bien un símbolo de pertenecer por un momento a alguien, sumisión, posesión, morbo y todo ese contexto lograba una excitación a un nivel altísimo de placer. Casi no recuerdo un encuentro pago en el que no haya terminado yo en un orgasmo, independientemente de como sea el cliente o su desempeño, el ver a un extraño tocándome, lamiéndome, manoseándome y penetrándome, inevitablemente me conducía a un trance perfecto que concluía en un desfogue de placer sexual inalcanzable en otro tipo de contexto.

Seré sincera, hasta el día de hoy en mis encuentros íntimos recuerdo dichos momentos o me imagino que aquel compañero es un desconocido de un club y eso me enciende muchísimo. Pienso que sucede mucho a la inversa, quien de ustedes cofrades no han fantaseado con una kine al estar con su pareja? es lo mismo a la inversa... puede que así me entiendan.

Este relato por ahí no tiene tanto tinte sexual o erótico como los anteriores, pero uso este espacio a manera de desahogo, desfogue y catarsis de mi vida sexual. Pienso que este es el punto en la saga donde se encuentra mi mundo kine de fantasía, con mi verdadero yo y mis historias del día a día. Estoy aburrida y no se como calmar estas ansias de placer. No se mal entienda, tengo a quien recurrir cuando tengo ganas, pero a ese punto exactamente es a donde quiero llegar.... estuve aburrida estas últimas semanas y me contacté con varios amigos. Basta una o dos frases para que estén listos cuando yo disponga y como estaba con ganas, describiré dichos encuentros:

EL CHICO GYM: ya lo he contado varias veces en otras secciones del foro, es un chico con el que estuve saliendo varias veces pero era realmente como decirlo... muy precoz, la verdad era tan rápido que ni cuenta me daba cuando había terminado el encuentro ajjaja. Físicamente me encanta, cara, cuerpo, incluso forma de ser, muy agradable. Me alejé porque la verdad ni cosquillas me llegaba a hacer su performance jaaja. Pensé en él y en un consejo que me dieron acá mismo en el foro: ser yo quien tome la iniciativa y las riendas de todo. Hacer mucha previa, calentarme y dejar la penetración como ya último recurso, porque evidentemente el mete-saca no lo aguanta. Me desnudé lentamente mientras lo iba desnudando, sobaba mis pechos en su pecho mientras masajeaba su entre pierna, sus testículos y empecé a masturbarlo muy suave y delicadamente. Empecé a darle besos cortos y lamidas en su pecho y empecé a bajar por su ombligo hasta llegar a su miembro que ya estaba duro y venoso. Me lo metí a la boca, lamí, saboreaba despacio y pausadamente. Luego cuando ya estaba húmedo, empecé a rozar mis pezones con su miembro. Estaban erectos y eso hacía que le pueda masajear delicadamente hasta terminar en una rusa suave pero firme. Empecé a introducir sus dedos en mi vagina, esta estaba húmeda y caliente. Sin dedos entraban firmemente y me empecé a calentar mucho más. Con la correcta estimulación manual si no se olvidan de frotar mi clítoris, puedo llegar a tener orgasmos muy deliciosos... pero de repente todo cambió, empezó a frotarme de una manera muy fuerte, parecía esas mujeres de antes que lavaban ropa en una piedra de lavar jajjaja era una frotada intensa y me empezó a doler. Le dije que pare y le agarré la mano. Le dije que lo haga despacio, que era una zona muy sensible y se calmó un poco por un momento para nuevamente hacerlo fuerte. En ese momento ya no había marcha atrás, logró que mi clítoris se adormeciera, ya me había pasado antes cuando me he encontrado con un hombre con las partes íntimas rasuradas y el vello en crecimiento, se vuelve rasposo y duele, bueno ese mismo adormecimiento lo sentí en esta oportunidad. Una vez que pasa, es como si me hubieran echado anestesia o gel retardarte, ya no siento nada. Perdí la inspiración y dejé de echarle ganas. Me dejé llevar y a los 2 minutos estaba dentro mío y a los 3 ya se había venido......

Esta experiencia incrementó aún más mi frustración y aburrimiento, así que días después tuve que pasar a el siguiente intento....

EL AMIGO DE TODA LA VIDA: amigos desde el colegio. Siempre quiso algo conmigo. El chico popular, amiguero, burlista, siempre rodeado de niñas lindas. Una amistad de años, pero donde siempre me mandaba insinuaciones divertidas. Nunca pasó nada, pero el clavo estaba. Planeamos una reunión varios amigos y era casi cantado que esa era la noche donde al fin algo más pasaría. Fue una noche divertida, tragos van, tragos vienen, bailecito, chistes, todo de lo más bien. Al final de la noche me subí a su camioneta y ahí nos besamos por primera vez después de muchos años de amistad. La situación se fue volviendo más fogosa, manitos traviesas por aquí y por allá y terminé en su casa y en su cama. Yo estaba con unos traguitos de más, el empezó a desnudarme, me besaba los senos, el cuello.. hasta ahí todo bien, pero el no se había desnudado aún. Se metió dentro de las sábanas, posición misionero y me sorprendió con una penetración bastante prematura. Sin casi previa, sin sexo oral, es más ni siquiera llegué a ver su miembro!!! jajaj en serio solamente lo sentí adentro y el tapado cual turbante con la sábana. Duró muy poco, yo no sentí nada y al finalizar me quedé dormida a su lado. A la mañana me desperté y le pedí que me lleve a casa. No hubo mañanero, nada de nada.

Una situación muy extraña. Así que tuve que recurrir al próximo intento.....

EL PRACTICAMENTE DESCONOCIDO: nos conocimos en una reunión por amigos en común. Desde ahí nos agregamos a redes sociales y mantuvimos algunos meses comunicación. Las conversaciones usualmente se volvían medio calientes. Le encantaba mi apertura sexual en hablar de ciertos temas y el también era bastante entretenido y hasta sensual al escribirme. No pudimos coordinar un encuentro. Se volvió un poco complicado y engorroso el encuentro. Admito que muchas veces me negué o puse pretextos porque no tenía ganas y él al volverse medio insistente, peor me ahuyentaba. Pero después de estar dos experiencias fallidas y ya con mis ganas hasta el límite máximo de tolerancia (si fuera hombre diría con la leche hasta en los ojos jajaj, pero como no tengo leche, diré que estaba con muchas muchas ganas) acepté al fin su invitación.

Nos encontramos en mi casa, tomamos algo, conversamos un poco más e inevitablemente empezamos a besarnos y a desnudarnos en el sillón. Esta vez todo fue mucho más aceptable. Hubo sexo eral de mi parte y de su parte, suave pero firme, preciso, me lamió completa, introdujo su lengua en mi interior, hicimos un 69 y a la hora de la penetración sexo en distintas posiciones: yo encima, el encima, de costadito, cucharita, parados, al pie de la cama y por último perrito. Fue algo largo e intenso. Suena bien, cierto? NOOO, porque a pesar de todo eso, yo no me pude venir. No entiendo el porqué, el chico me gustaba, me realizó sexo oral como me gusta, me cachó como me gusta, tuve el tiempo suficiente para venirme, sin embargo estaba desconcentrada, no sé, no se dio y estuve bloqueada. Se quedó feliz, satisfecho y yo pensativa y media molesta conmigo misma al no poder conseguir complacer mis ganas.

Metí algún pretexto tonto con el fin de que se vaya pronto de mi casa, estaba un poco preocupada... se me vino a la mente encuentros como por ejemplo el del cofrade X ya contado por este medio. Fueron como 5 orgasmos seguidos y no paraba, se acrecentaban mis ganas.... muchas veces me pasó algo así, entones porque ahora estos chicos todo bien parecidos, simpáticos y agradables no me excitaban en lo absoluto. Recordé algunos episodios vividos en mis épocas locas y empecé a masturbarme. Me toqué e introduje mis dedos, me masajeaba y sentía que era un mar de fluidos y así llegué a un intenso y delicioso orgasmo que siguió de otro y otro más!!

Respiré con una sonrisa. Al fin había desfogado mis ganas locas por mi propia cuenta había logrado lo que tres hombres no pudieron hacerlo. Quién me entiende? yo no tengo idea de lo que me pasa. De eso ya ha pasado un tiempito y otra vez me estoy llenando de ganas. No es usual en mí masturbarme, prefiero siempre la compañía masculina para desfogar mis deseos, pero no quiero mas intentos fallidos con gente que no deseo. Pienso que necesito nuevas fantasías, nuevos retos y desafíos. Ideas cofrades?

Aclaro, mediante este relato no busco encuentros íntimos con ustedes queridos lectores, no es el objetivo del mismo, simplemente desahogarme y capaz alguien que me de una luz para entender lo que me pasa y como poder solucionarlo. Quisiera decir que soy una chica común y corriente, pero siento que mi instinto sexual es más alto de lo normal, es una de mis prioridades y si no estoy 100% satisfecha, no estoy del todo bien. Ayuda cofrades!!! jeje

PD: Tengo como prospecto un chico muy joven, de hecho solamente tiene 21 añitos. ¿será???????