Polvos Enfermazos

CACHANDO UNA LOCA

Esta historia es verídica a un 100%, son pocos los arreglos que se pueden hacer algo así, fue de lo más loco que me ha pasado, así que la cuento con lujo de detalles.
Había terminado la universidad y tenía que estudiar para sustentar mis expedientes y obtener mi título de abogado, tenía una amiga que practicaba conmigo y quería sustentar expedientes muy similares a los míos, así que en diciembre dijimos chau a las prácticas y nos dedicamos a estudiar todo el verano, quedamos que iba a ser en su casa, sus padres tenían billete y eran recontrabuena gente, provincianos (Huancavelica) que a base de esfuerzo y estudio habían hecho arto billete. Así, comenzamos a estudiar, me fui a vivir donde mi tía por esos meses, que vivía cerca de ella, nos metíamos unas amanecidas terribles, felizmente su enamorado era mi pata y nunca hubo ningún problema (aclaro desde ahora, que mi amiga no es la loca de la que hablo).
A mediados de enero llegó a su casa su tía, una señora ya mayor, junto con sus hijas, la menor de 13 años y la mayor de 25, venían porque las habían contratado para que laven la ropa y limpien la casa, eran gente pobre y muy tranquila, evangelistas al 100%, todo era Dios, la niñita cada vez que comía algo rezaba, igual su hermana y su mamá, la tía cada vez que nos servía el almuerzo nos hablaba de Dios, su hija mayor igual. Esta era viuda, su esposo había fallecido en un accidente cuando tenía 5 años de casados (se habían casado muy jóvenes), y no tenía hijos, siempre había sido cucufata, pero desde que enviudo se volvió más, según me contaron.
Bueno, las tres llegaban muy tempranito, a eso de las 7 am., yo a veces llegaba a esa hora también para estudiar, me encontraba en la esquina con ellas y veníamos hablando (pura Biblia y Jehová). Poco a poco fui ganado confianza con ellas, más con la mamá y la niñita, que me agarró cariño, Clara (la mayor), si era más reservada, paraba en el tercer piso, en el cuarto de lavado, todo el día lavaba. Nosotros habíamos armado una pequeña biblioteca junto al cuarto de lavado, ahí arrimamos todos los libros, cuadernos, fotocopias, etc., y yo era el encargado de buscar todo ahí. Un buen día subo y la encuentro a Clara en cuatro pasas en el piso fregando unas sabanas en una batea (tenían lavadora, pero las cosas de cama les gustaba lavarlas a mano), recién me di cuenta que tenía un muy bonito culo, mediano pero bien formado, las tetas si eran muy grandes, fuera del promedio para una mujer que no se ha puesto o inyectado nada, de eso me di cuenta desde la primera vez que la vi. Es del caso que me quede mirándola, ella se dio cuenta voltea y me ve palteada “me asuste” me dice, “disculpe” (me trataba de Ud. la cojuda), yo entro a la biblioteca pero de reojo me quedo mirándola, ella ya se había parado, parece que se de cuenta que la miraba y se baja al segundo piso. Desde ahí, cada vez que podía, solapa la miraba todo arrecho, sólo ella se ganaba, nadie más, fui bien solapa en eso. Un día de tan arrecho que la miraba, subo y la encuentro lavando, le quiero hacer el habla pero me hizo el pare feo “por favor, déjeme de estar mirándome con esos ojos, no es bueno, el Diablo siempre está presente en todos lados y muchas veces nosotras las mujeres, somos su instrumento”, me quede cojudo, hasta me asuste, pero puse pies de plomo y afronte, le dije “disculpa, no quería ofenderte, pero eres muy bonita”, ella me responde “no diga eso por favor, me hace sentir instrumento del mal, por favor”. Puta madre, ni más dije, ni la saludo a partir de ahora, baje y me hice el cojudo.
Pasó una semana, y yo a las justas la saludaba, pero ahora era ella quien me buscaba la mirada, incluso a los día cuando le respondía la mirada ella se rió, poco a poco ella tomaba la iniciativa, así que un día decidí volver a subir cuando ella estaba lavando y la salude “hola, como estás” le dije, “bien, gracias” me responde y se ríe, luego me dice “disculpe si lo ofendí la otra vez, pero es que hay que ser fuerte ante las tentaciones, son pruebas que nos da la vida”, ahora o nunca me dije, así que le comencé a hablar, le pregunte de su marido, de cómo se había conocido con él y huevada y media más, entró en confianza y continuamos hablando, poco a poco la confianza fue mayor, en sólo 20 minutos, ya le estaba diciendo yo que era muy bonita, que me gustaba, y que disculpe si la había ofendido al mirarla, “ya paso eso” me dice “es bonito conversar con usted, las personas que han estudiado tienen buena conversación”. Le pregunte si iba a salir a la noche a comprar a Santa Isabel (el de San Felipe para referencias), me dijo que si, así que me mando y le digo que a ver si nos encontramos por ahí para conversar más rato, se río, volteo y no me dijo nada.
A eso de las 8 pm. pasa por la sala donde estábamos estudiando y dice que va a Santa Isabel, que se iba a demorar un poco, si queríamos que traiga algo, le decimos que no y salió. Me puse a pensar como hago para salir, lo que se me ocurre solapa es programar mi celular para 10 minutos más adelante, en cuanto sonó hice la finta que hablaba con mi viejo, le dije a mi amiga que me espere un rato, que tenía que recoger un billete, ella me dice que aprovechaba para descansar, que no me preocupe. Así, salí en búsqueda de Clara, a la que encontré en Santa Isabel, con señas le dije que la esperaba a la vuelta, no me respondió, pero a los 5 minutos la veo que se acerca, “hola, vamos más allá a unas banquitas a conversar un rato” le digo, “bueno, un rato”, me dice ya con otra cara, con cara de picara. Nos sentamos y nos pusimos a hablar, empezó con la cantaleta de siempre de que Jehová todo lo puede, que el templo, que el pastor, puta, que yo no hacía más que mirarla a las ojos para ver si me daba alguna entrada, pero ella no paraba de hablar, así que le pregunte por su marido, medio triste me contó lo que había pasado, un accidente regresando de Arequipa, me dijo también que no habían tenido hijos porque ella tenía un problema de quistes en el ovario, nada grave pero se tenía que operar si quería tener familia. En una de esas me mando y le agarro la cara, nos quedamos callados y me la chapo. Ahí empezó todo, ella me abrazaba fuerte, me besaba , me abría la boca, ,me metía la lengua, me mordía, movía la cabeza para todos lados, me abrió el primer botón de la camisa y empezó a jugar con los vellos del pecho, ni huevón me mandé al cuello, ahí empezó a gemir “ah, ah, ah” decía la huevona, así que nos paramos y nos metimos caleta por unos edificios, seguimos chapando, le desabotoné la blusa y ¡Por Dios, que tetas! Eran enormes, le levanté el sostén y a chuparlas, ella gritaba, yo le decía que se calle pero ella me responde que no podía, estaba yo arrechazo, así que le levante el faldón (esas que llevan las evangélicas) y le metí mano por el poto, luego por la concha, ahí tuve que parar porque empezó a gritar “ahhh, ahhh, siiiiiii”, puta madre, se escuchó que alguien gritó “que pasa ahí”, así que solapa nos tuvimos que quitar, la abracé pero ella se soltó y me dijo que cada uno regrese por su lado a la casa.
Desde esa vez, cada vez que podía me la chapaba en la jato de mi amiga, le decía para irnos a un telo pero ella me decía que no, que nunca iba a ir a un hotel, puta que yo estaba arrechazo, no sabía que hacer. Hasta ahí lo máximo que había hecho era meterle el dedo en la concha, pero se lo tuve que sacar al toque porque ya iba a gritar. Un día ya estando muy arrecho, la tenía arrinconada contra la pared, apretándole las tetas y besándola, no aguante así que me baje el cierre, saque mi pinga e hice que me la agarre con las manos, ella al principio dijo “no, estás loco, eso si no”, pero bien que se prendió de la rata, empezó a corrérmela, quería bajarla para que me la chupe pero no quería, pero siguió acariciándomela, lo hacía de la puta madre, cuando siento que me voy a venir, jalo más rápido, me beso para que no se escuchen mis jadeos y termine en sus manos, ella jugaba con mi leche entre sus dedos “vete” me dice, “no nos vayan a ver”. Casi le ruego para salir e ir a un telo, pero ella se cerraba en que no, yo ya no aguantaba, tenía que cachármela, así que no se me ocurrió mejor idea que meterla a la caja de mi tía, antes hable con mi primo (compadre de aventuras cacheriles) y le explique la situación, él me dice que era santo de su abuela por parte de padre el domingo y que todos se iban desde el almuerzo hasta la noche, así que tenía que convencer a Clara que se venga el domingo.
continuara...

 

vamos lucheti.... no te demores en continuarla...

 

weeeeeeeeeeeeena siga cofadre continuala esta chevere

 

historia a medias no ps asi no juega peru termina de contar ps.

 

esta emocionante hermano.. siguela

 

Buena hermano, pero no demores con la continuación.
Saludos, Doc69

 

ta chevere la historia cofrade lucheti.... se espera la continuacion

 

que tal historia caraxo .... a la espera de la culminacion

 

ta buena tu historia pero amigo pon alguna fotos si las tienes

 

el cofrade lucheti creo q es productor de telenovela mexicana, hace larga la telellorona.... pero q buena pluma tiene ud cofrade mis felicitaciones

 

CACHANDO A UNA LOCA (continua...)
El viernes llegó a la casa de mi amiga temprano a estudiar, Clara y su familia habían llegado más temprano, así que no nos encontramos previamente. La señora me invita unos jugos, y me dice que Rosa (mi compañera de estudio), se sentía un poco mal, pero que no importa, yo suba y me ponga a estudiar, que ella se levantaba más tarde, así que subí pero con toda la intención de hablar con Clara, ya no se me quitaba de la cabeza la idea de cachármela, como sea tenía que ser el domingo. A la primera oportunidad que vi que su mamá y hermanita salían y ella se quedaba limpiando, me mandé, comenzamos con los agarres, ella siempre un poco con miedo, pero luego se soltaba, ahí le digo “te espero el domingo en mi casa, es acá cerca, no va a haber nadie”, me dice que el domingo no puede porque se va al templo desde temprano, yo la manoseaba, la besaba y le decía “no se como pero el domingo nos encontramos”. “pasa a recogerme, a las 9 a.m. se para un rato, yo salgo con algún pretexto y nos vamos”, ya la sentía recontraarrechaza, porque sino no me atracaba, para ella su templo era lo primero, aunque ahora se veía que estaba necesitada de pinga.
Ya no volvimos a hablar hasta el domingo, en que pase a recogerla por su templo, era en San Juan de Miraflores, di rápido con el local, de lo arrecho llegue temprano por lo que me puse a dar vueltas alrededor, me paré en una tienda frente al templo y compré mi gaseosa, al rato veo que la gente empieza a salir, Clara estaba con su falda azul hasta los tobillos y su blusa blanca, con una bincha, parecía una monja, me ve y soladamente se despide de sus amigas y veo que camina al paradero, la sigo y una vez lejos, ella camina unos metros, yo me acerco, paro un taxi y subimos, le dice al taxista “cuanto nos cobra hasta el puente por favor”, el tío nos dice la cantidad, llegamos pago y bajamos, no sabía que decir yo, así que ella empezó. “no podemos hacer nada, he reflexionado en el templo y me doy cuenta que estoy tentada, por favor hay que pensar bien, mejor caminemos y hablamos”. Medio que me empinché y le dije “no te pases, mejor entonces te dejo de nuevo en tu templo y me regreso a mi casa”, caminamos un buen rato sin hablar, hasta que llegamos a un parque, nos sentamos y me la quise chapar, ella me rechazó primero pero ante mi insistencia empezaron los besos, como era de día no me podía malear con el paleteo, pero le metía la lengua hasta el fondo, sentía sus gemiditos de costumbre, así que una vez la sentí bien arrecha nos paramos, salimos a una pista y paré un taxi, “a Magdalena, la panadería San Antonio”, le digo al taxista, y subimos, el taxi me cobró como 15 lucas pero como las huevas, todo el camino callados, pero yo al palazo, llegamos, bajamos y entramos a la casa, ya no había nadie obviamente, yo de maleado la quiero subir de frente pero ella me dice que no, que conversemos primero.
Pasamos a la sala, le digo si quiere algo de tomar y ella me dice que no toma, le insisto y le digo que tome un poco de vino, que eso no era malo, me atracó y le serví un copón, pero no de vino sino de oporto para ver si se huasqueaba, le dio un sorbo y se vio que le pareció muy fuerte, lo dejó en la mesita y conversamos. Lo mismo de siempre que el templo, que Jehová, que los hermanos, no la deje seguir porque me le abalancé y la eché en el mueble, la besaba, le mordía las orejas, le chupaba el cuello, ella se resistía, me decía que no, que por favor, yo estaba loco, creo que si no cedía la terminaba violando, estaba estupido, pero poco a poco fue cediendo, me abrazó por el cuello y respondió a mis besos, le acerqué su copa y tomo un trago más, ahí empezó la huevada, se prendió de mi cuello, me levantó el polo y me mordía el pecho, me dejó varias marcas pero que , trataba ella de sacarme el polo y como no podía me lo rompió, yo ya le había levantado la falda hasta arriba, ella sola se rompió el calzón y lo tiró al piso, se paró y se sacó todo, totalmente desnuda, yo hice lo mismo, se me abalanzó, salto y me atenazo con sus piernas por mi cintura, se rayó “cáchame, cáchame por favor” decía, le dije para ir arriba pero me respondió que después, que primero acá, así que la eché en la alfombra y la empecé a sopear ¡Puta madre, empezó a gritar la ! “hay que rico, así chúpame la , tomate todo mi jugo amor”, yo le decía que se calle pero ella no paraba, así que me fui a prender el equipo para que no se gane la vecina, ni bien prendó el equipo, la siento a ella detrás mío lamiéndome la espalda, las nalgas, me gritaba “sigue por favor, no pares”, la eché y le chupe las tetas, eran unos melonazos, cuando le mordía los pezones, gritaba como loca, “hay que rico, así chúpame las tetas, muérdeme los pezones papito, ayyyyyyy” pensé que Clara estaba loca, pero yo estaba arrecho, no podía parar, la sopie un buen rato, ella se calma y me dice, “quieres que te la chupe, yo quiero sentirla en mi boca”, ni huevón me eché boca abajo y esta pendeja se metió toda a la boca, parecería que quería meterse hasta los huevos ¡Qué tal mamada!, le pasaba la lengua desde la base de los huevos hasta la punta del glande, cada lamida yo me sacudía, estuvo a así un buen rato, agarró su copa y me vació el oporto en la pinga, sentí el ardor, pero ella empezó a lamer, me metía pequeños mordiscos en el vientre que me hacían doblar de placer, le dije que se la quería meter pero no me respondió, estaba con un huevo metido en su boca, mientras me corría la pinga.
Sin decirle más la eché con las patas abiertas y se la metí hasta el mango, metió un tremendo grito “ayyyyyyyyyyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyy” gritaba duro, a mi ya me llagaba al pincho en tanto estábamos con el volumen alto, nadie se iba a ganar, le levanté las patas juntas y apretaditas, su papita se veía abultada, ajustaba bien rico, como si estuviese pita, se la metía y le mordía los pies, ella me decía “así, sigue por favoooooooooor, no acabes”, yo le hacía caso y seguía, sus gritos me ponían más arrecho, hacían que yo empujara más fuerte, como si quisiera hacerla gritar más, ella gritaba y se daba de cabezazos contra el piso, le veía la cara de placer, los ojos cerrados, la boca apretada y como les digo, golpeando la cabeza contra el piso, como gritaba la , me empujó y me echó, se sentó encima mío, gritaba más, se movía a toda velocidad, sintió que metí un grito de placer, “no acabes porque te mato” me dijo, y se rió, yo sentí como ella ya había acabado 2 veces, y ahora terminaba de nuevo, cuando se le venía paró de cabalgar y me puso la papa en la boca, “chúpamela y tomate mi jugo” me dice, yo ya estaba en otro mundo, así que le chupe la zorra a forro, siento como me cae un chisguetazo de liquido viscoso en la cara ¡la muy puta se estaba vaciando!, terminó y paro de gritar un rato, yo seguía al palo, así que la puse en perrito y le hice el beso negro, le lamía el culo y ella gritaba nuevamente “rómpeme el ojete, métemela todita al culo, por favor, hazme gritar más ”, mientrás ella misma se metía primero un dedo al culo, luego dos, tres y hasta cuatro, ella agarró mi verga y se la puso en la entrada del ano, ya bastantante dilatado y me dice “espérate un rato, métemela toda de un porrazo, hazme llorar por favor, quiero sentirla toda adentro de mi culo”, así que ni bien ella la acomodó, se la metí a su gusto de un porrazo, ¡concha de su madre! La cojuda vociferaba, parecía un animal, llegó un momento que me asuste, porque parecía que se ahogaba, tenía los ojos blancos, yo la agarraba del cabello y cabalgaba con fuerza, en eso siento que me vengo, la saco de todo enfermo y hago que me la chupe, la cojuda sin asco se la metió a la boca, me vine con todo, se tomo toda la leche, lo poco que se le salió por la comisura de los labios, lo recogió con un dedo y se lo trago, caímos rendidos, pero al minuto ella ya estaba chupándomela de nuevo, “vamos ahora si arriba, en la cama es más rico”, así calatos, chapando, subimos al cuarto, no me dejó ni ir al baño a limpiarme, porque me tiró en la cama y siguió chupándome la pinga.
continuará...

 

Falta una parte más, a ver si mañana la pongo, nada cuesta agradecer cofrades. Para mañana la última parte, como les digo, es recontraverídica esa historia.

 

se da las respectivas gracias cofrade lucheti execelte relato esperamos la pronta continuacion

 

maestraso, q tal pluma para escribir cofrade luchetti, estaremos a la espera de la tercera parte que la historia esta de la ptm

 

buen relato que casi se me sale la leche dicho el quaker jajaj buen relato viejo, felicitaciones'

 

vale vale vale valeeeeeeeeeeeee!!
buen relato!! terminala!!

 

mejor que Vargas Llosa, maestro Luchetti estas perdiendo dinero. Una vez mas se cumple mi filosofia que las cucufatas son las mas bravas en la cama. Caras vemos culos no sabemos, jajajaja. Ojala que puedas continuar tu historia con la monjita.

 

monjita caheraza resulto jajaja las apariencias engañan. siga con sus hazañas.. de seguro q hay mas

 

jjajaja asi ps ojala que mi monjita no sea asi . buen relato cofrade'

 

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Excelente relato Lucheti. Tiene una pluma que da miedo además que sazona bien sus relatos. Chevere con usted Lucheti y pues a continuar con la loca. Saludos.