Las tetas del Misti

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gracias por leer cofra, publico el final para que puedan leerlo

 

Me encanto la historia, con un final acorde a los acontecientos. A veces la carne es debil

 

Gracias cofra. Pero no es solo a veces que la carne es débil jajajaja

 

Que buen relato cofra, muy entretenido y su amante sin duda alguna disfruto del sexo aquella primera vez, para que lo vuelva a buscar jaja...no demore con la continuación

 

gracias por el comentario, pero la cosa acabó allí jaja, ya hubiera querido continuar pero así es la vida

 

LOS DÍAS CON NADIA. NO HAY CONTINUACIÓN PERO SÍ MÁS QUE CONTAR

Haber sido un buen novio hasta ese momento rindió sus frutos con ***, que no sospechó los tremendos cuernotes que le estaba poniendo con mi ex amiga y ahora consumada amante. Lo admito, soy un hombre de tetas y las de Nadia eran muy superiores a las chiquititudes de ***, eso influyó mucho. Le chupaba bien las tetas cada vez que quedábamos, casi hasta el punto de sacarle la leche y tomarla como un bebito. La entrega de Nadia y su generosa pechonalidad empezaron a empujar algunos límites míos, pues pronto empecé a recibir mensajes de mi novia mientras pasaba el rato con mi amante. Una noche, específicamente, nos encontrábamos desnudos en un cuarto de hotel y empezaron a llegar mensajes de ella. Con una sonrisa que no esperaba, Nadia me invitó a llevarme su pezón derecho a la boca y yo no rechacé su ofrecimiento. Me quedé sorprendido cuando ella tomó mi teléfono y me pidió la clave, que iba a responder ella los mensajes. Yo, como hombre imbécil y amante de las tetas que era, solo me saqué su pezón de la boca para darle la clave. Nadia respondió los mensajes de WhatsApp mientras yo me engolosinaba con sus tetas, incluso mordiendo sus pezones como si fueran gomas y manoseándolas a placer. Era una porquería, lo admito, no tienen que decírmelo.

Nadia me pasó luego el celular y se puso a chuparme la pinga y ponerla en medio de sus tetas mientras que yo trataba de seguir respondiéndole a mi novia. Claramente no podía, arrojé el teléfono a un lado y me concentré en la rusa que mi amante arequipeña me estaba haciendo hasta sentir que iba a estallar de nuevo. Eyaculé en la cara de Nadia, que recibió mi semen con una sonrisa y cuidó bien de embarrarlo sobre aquellas tetas que tanta locura me inspiraban...

 

QUOTE="nachtgeist25, post: 5234836, member: 232091"]LOS DÍAS CON NADIA. NO HAY CONTINUACIÓN PERO SÍ MÁS QUE CONTAR

Haber sido un buen novio hasta ese momento rindió sus frutos con ***, que no sospechó los tremendos cuernotes que le estaba poniendo con mi ex amiga y ahora consumada amante. Lo admito, soy un hombre de tetas y las de Nadia eran muy superiores a las chiquititudes de ***, eso influyó mucho. Le chupaba bien las tetas cada vez que quedábamos, casi hasta el punto de sacarle la leche y tomarla como un bebito. La entrega de Nadia y su generosa pechonalidad empezaron a empujar algunos límites míos, pues pronto empecé a recibir mensajes de mi novia mientras pasaba el rato con mi amante. Una noche, específicamente, nos encontrábamos desnudos en un cuarto de hotel y empezaron a llegar mensajes de ella. Con una sonrisa que no esperaba, Nadia me invitó a llevarme su pezón derecho a la boca y yo no rechacé su ofrecimiento. Me quedé sorprendido cuando ella tomó mi teléfono y me pidió la clave, que iba a responder ella los mensajes. Yo, como hombre imbécil y amante de las tetas que era, solo me saqué su pezón de la boca para darle la clave. Nadia respondió los mensajes de WhatsApp mientras yo me engolosinaba con sus tetas, incluso mordiendo sus pezones como si fueran gomas y manoseándolas a placer. Era una porquería, lo admito, no tienen que decírmelo.

Nadia me pasó luego el celular y se puso a chuparme la pinga y ponerla en medio de sus tetas mientras que yo trataba de seguir respondiéndole a mi novia. Claramente no podía, arrojé el teléfono a un lado y me concentré en la rusa que mi amante arequipeña me estaba haciendo hasta sentir que iba a estallar de nuevo. Eyaculé en la cara de Nadia, que recibió mi semen con una sonrisa y cuidó bien de embarrarlo sobre aquellas tetas que tanta locura me inspiraban...[/QUOTE]

Muy bueno tu relato cofra, aunque me dejaste intrigado porque hayas dejado que Nadia use tu celular, en todo caso lo que respondió a tu novia por wasap no trascendió, solo te puso en apuros o te "cago" y tuviste que hacer de todo para reconciliarte?

 

Muy bueno tu relato cofra, aunque me dejaste intrigado porque hayas dejado que Nadia use tu celular, en todo caso lo que respondió a tu novia por wasap no trascendió, solo te puso en apuros o te "cago" y tuviste que hacer de todo para reconciliarte?[/QUOTE]

gracias cofra, bueno como puse con su teta en la boca era difícil negarme jajajaja, por suerte no me cagó, podía haberlo hecho pero no lo hizo, ella también le entró a la huevada

 

Junto a Nadia empecé a saborear las mieles de la infidelidad. Como dije, yo había sido un novio ejemplar hasta aquel momento, hasta aquella tarde fatídica en el departamento de ella. A veces yo volvía a la escena del crimen, pero a medida que avanzaba nuestra relación ella se atrevió incluso a venir a mi casa. Daba casi la hora del ocaso cuando ella me escribió diciendo que estaba cerca, que si podía visitarme, que si *** no estaba. Por suerte podía decirle que no, quería que viniera al menos un rato para chuparme la pinga con sus ricos labios.

Lo que no esperaba era que prácticamente tocara el timbre de inmediato. Le abrí, ella estaba vestida con ropa de oficina. Mal día, se notaba desde la expresión que tenía, pero lo segundo que no esperaba fue que arrojara su cartera al sillón y me dijera que quería cachar para sacarse la sal.

Nadia se empezó a sacar la ropa mientras yo le decía que claro, que subiera, pero ella me respondió que allí nomás. Bastó que se desabotonara un par de botones de su camisa formal para que se formara un escote que me subió la temperatura.

-, qué ricas tetas tienes. Chúpamela.

Nadia obedeció, yo me senté en el sillón de la sala y ella se arrodilló ante mí para meterse mi pinga en la boca. Carajo, si así iba a ser cada vez que tuviera un mal día de entrevistas de trabajo, prefería que las tuviera a diario...la veía esmerada, babeando como una perra, metiéndosela entera, succionando mis testículos mientras que yo daba cuenta de su sostén para liberar sus exquisitas glándulas mamarias. Le pellizqué los pezones y le metí mano, pero ella se acabó deteniendo para terminar de sacarse la ropa.

-Cáchame, lo necesito.

 

Y me la caché. Lo hice en el sofá donde había compartido decenas de besos con mi novia, no me importó culearme a una amiga que ella conocía, ya era un infiel consumado. Me eché en el sofá y Nadia me montó como un caballo, sudando su frustración en una vorágine de sexo sin protección, como a mí y a ella nos encantaba. Aquella vez no quería llenarla, quería venirme en su cara, pero ella me detuvo y me dijo que lo quería todo dentro. ¿Quién era yo para negarme? mientras me embutía una de sus tetas en la boca me dejé llevar y eyaculé copiosamente en su vagina, llenándole el útero con todo el semen que podía. Ella se desplomó encima mío, sudando por la intensidad del polvo que acabábamos de consumar. Pero, ¿había sido suficiente?

 

Es muy exigente cuando una amiga sabe que es la amante y contrario a generarte problemas le genera más morbo la situacion.
Eso sí hay que saber hacerla porque es peligroso. En tu caso con su chamba tomando buena parte de su tiempo tenías todo a tu favor cofra.

 

claro, tuve suerte y tenía que tomarla jaja

 

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No, por supuesto que no. Por una vez yo pensé que sí, que Nadia había venido por un polvo rápido y de desahogo por el mal día, pero ella me dijo que también tenía hambre y le dolían las piernas, que se quedaría un poco más para recuperar fuerzas. Le di mi polo para que se pusiera mientras le preparaba algo, pero ver sus tetas apretadas contra la tela de mi prenda solo me generaba más morbo. Verla regresar del baño fue una erección inmediata que ella no dejó de notar. Me miraba mientras preparaba su comida con unos ojos que no supe interpretar.

-¿Qué estás preparando?
-Un sánguche de pavo, me dijiste que te gustaba.

Ella rio, a pesar de ser un infiel de mrda no dejaba de ser un amigo que sabía escuchar. Quizá por eso se levantó de la silla y se acercó a mí de nuevo, sabiendo que yo sabía que quería más batalla. La besé en sus labios carnosos y pesé sus tetas en mis manos. Levanté el polo por encima, para dejarlas afuera, y volteé a Nadia contra el repostero. Le bajé el calzón hasta las rodillas y jugué con mi glande sobre sus labios vaginales para humedecerlos antes de meterla la pinga dentro otra vez.

-Qué rica y caliente estás dentro, puta.
-Mmmmmh no pares, ¡dame duro!

No dejé de pellizcarle los pezones a Nadia mientras se la metía. Mi ritmo la hacía gemir y sudar, sentía su agua en mi pene y en mis manos. Pero me detuve y ella se quedó sorprendida de que lo hiciera.

-Sé una buena puta y chúpame la pinga.

Ella sonrió. Se arrodilló frente a mí y se metió mi pene en la boca, como había hecho ya varias veces antes. Me la chupó con ganas pero tuve que hacerle acordar que usara sus tetas para hacerme una rusa, puta mala, le pegué un pellizco en el pezón fuerte para hacerla escarmentar. Es más, la agarré de los pezones y la hice incorporarse para llevarla hacia mi cuarto en el segundo piso. Ella solo se dejó llevar mientras la manoseaba y la calentaba con besos apasionados. Quizá Nadia sí había venido por un polvo rápido, pero los planes iban a cambiar.