Conocida de la universidad...

Hola, este es mi primer relato en el foro. Lo que narraré me ocurrió el año pasado, y tuvo como protagonista a una compañera de universidad, cuya sede está muy cerca a Plaza San Miguel. A esta chica la llamaremos Kathy, y ya había coincidido con ella en alguno que otro curso, y habíamos conversado un par de veces en ciclos anteriores, pero sin entablar tampoco una amistad o relación cercana.
Ahora coincidimos en una clase de un curso electivo, de esos que uno lleva para completar créditos cuando falta poco para egresar. Me fue grato verla el primer día, porque al menos había alguien conocido en el salón, y sabía que si había necesidad de trabajar en grupo podía contar con ella, ya que era pilas. Había sido madre cuando estaba en primeros ciclos, pero por lo que sé, su familia le había dado el apoyo necesario para poder seguir sus estudios sin mayor problema.
Había pasado más de un año desde la última vez que la había visto y se le veía riquísima. No era muy alta, quizá 1.55 o 160, tenía una cara pícara, ojitos marrones, pelo negro y liso hasta la altura de los hombros, senos en tamaño perfecto y un culo redondito que jalaba la mirada a cualquiera. En ese entonces ella tenía 23 años. Siempre le había tenido ganas pero nunca pensé que pasaría nada, además que antes estaba con el padre de su hija.
Conversamos un poco ese primer día, tampoco como patas, pero sí como conocidos que se ponen al día. Me dijo que del salón solo conocía a un chico y una chica que eran pareja. La profesora dio el plan para el ciclo y dijo que había un proyecto grupal que tenía un peso importante en la nota final. Quedamos en ser grupo con la pareja, de nombres Sebastián y Cindy.
Pasaron las semanas, hablabamos a veces un poco el clase, y conforme se iba acercando la fecha de entrega fuimos conversando más, en grupo y una que otra vez almorzabamos juntos (la parejita se iba por su cuenta). A veces me hablaba de sus salidas a fiestas, o de las cosas que tenía que coordinar para su hija, o de cómo le iba en otros cursos: entrabamos en confianza. Me parecía una chica no del todo tranquila pero sin ser tan movidita. A veces me hablaba y yo fantaseaba con cómo sería Kathy en la cama. "Capaz es una loba", pensaba.
Llegó el momento de reunirnos para avanzar bien el trabajo, y yo puse mi depa. Vivía solo en Lima, mis papás a veces venían de visita pero usualmente tenía libertad. Compramos piqueos, pedimos comida y estuvimos toda la tarde con la parejita. Teníamos exposición la siguiente semana y queríamos que todo saliera bien. En un momento, Sebastián y Cindy nos dijeron que debían ir saliendo porque tenían que ir a la graduación de la hermana de ella. No sé si sería verdad o si solo querían ir al telo, pero por mí normal, así podía estar a solas con Kathy y ver qué pasaba.
Ella y yo avanzamos un poco más, y en un momento nos aburrimos y me dijo que capaz veamos una peli. Puse algo en Netflix, pero resultó ser medio lento, y si bien no me desagradan las pelis así, si uno está algo cansado puede ser tedioso. Estábamos en el sofá y luego de un rato Kathy apoyó su cabeza en mi hombro. Estuvimos así un rato y luego ella espabiló (se estaba a punto de quedar dormida) y nos reímos. Pausamos la película y mejor nos pusimos a conversar. Ahora tocamos temas un poco más personales. Yo le hablé de una relación anterior, ella me contó del padre de su hija, que le había puesto los cuernos y por eso llevaban más de 6 meses separados, y estaba viendo cómo mantener una relación cordial con él, por el bien de la hija. En un momento vimos la hora y resulta que se le había hecho tarde. Por suerte, me dijo que tenía un descuento en Uber y no vivía muy lejos, así que no me tenía que preocupar. Nos despedimos con un beso en la mejilla y un breve abrazo. Yo estaba bastante arrecho, a decir verdad. Así que hice la de un pajazo y a dormir xD
Expusimos la semana siguiente, salió mejor de lo esperado. Nos quedamos un rato hablando con la pareja, y luego los acompañamos al paradero porque ellos sí vivían lejos de la Universidad. Como era viernes y eran como las 7, le dije si la hacía tomarse una chelita, ella me dijo "espérate le aviso a mis papás para que cuiden a mi hija". Lo hizo (creo que les dijo que iba a salir con unas amigas jajaja) y fuimos a comprar. Nos sentamos en unas bancas de un parque a unas cuadras y empezamos a tomar y conversar.
-Ha sido curioso, no?-le dije-. Te conozco desde cachimbos y recién este ciclo hemos hablado más.
-Jajajajajaja sí, otras veces era como que hola, cómo estás, y chau. Pero qué bueno. Ves que a la Viviana (nombre de la profe) le encantó nuestra expo. Somos buen equipo.
Seguimos conversando y se nos ocurrió ir al cine, considerando que Plaza San Miguel estaba cerca. Compré entradas desde el cel, y como todavía faltaba para que empiece la función abrimos otra lata cada uno. Ella apoyó de nuevo su cabeza en mi hombro.
-te molesta que haga esto?
-para nada, si quieres que sea tu almohada yo feliz jajaja
Nos reímos, nos miramos, y diez segundos después ya estábamos agarrando. Hacía tiempo que no besaba a alguien con una pasión y unas ganas así. Ponía mi mano firmemente en su cintura (y aprovechaba para sentir sus muslos) y ella me daba pequeñas mordidas en los labios. Obviamente para entonces ya se me había parado el muchacho, y si fuera por mí me la tiraba ahí mismo, pero había que mantener la calma. La función iba a empezar en un rato así que fuimos caminando. En el cine vimos a ratos la película, pero la mayor parte del tiempo solo nos comiamos la boca. Ni siquiera entendí el argumento. Al salir, no sabía si decirle para seguirla (a mi depa o a un telo), pero ella se me adelantó diciendo que se le había hecho tarde, pero que podíamos salir al día siguiente en la tarde. Así quedamos. Nos dimos un largo beso al despedirnos. Quedé contento pero más arriola que nunca.

Estuvimos mensajeando durante la madrugada, diciendo lo bien que la habíamos pasado, que nos gustabamos, y uno que otro mensaje en doble sentido, sin llegar a lo explícito. Nos vimos en la tarde por Miraflores, y caminamos por el malecón, bajamos por la playa y nos sentamos a ver el mar. Nos besabamos constantemente, y cada vez se hacía evidente que ambos queríamos algo más. Reíamos, hablabamos de la parejita que era grupo con nosotros para rajar de ellos (de modo amical, no en mala onda), y entre risa y risa empezó a oscurecer. Ella dijo:
-Oye, me estoy empezando a cagar de frío y no me quiero resfriar... Te parece si vamos a tu casa y capaz pedimos un delivery o algo?
Y tenía razón, había empezado a correr un viento fuerte y me sentía a punto de tiritar. Tomamos un taxi y enrumbamos al depa. Una vez ahí, pedimos algo de comer y de postre torta de chocolate. Empezamos a besarnos salvajemente, ahora sí toqueteandonos, ella rozaba mi entrepierna y yo le agarraba el culo. Qué riquísima estaba ese día... Un short que dejaba ver sus muslos bien firmes y sabrosos, un polo negro ajustado que hacía notar la silueta de sus tetas. Estabamos por empezar a desvestirnos y llegó el delivery de comida jajajaja. Bajé al toque, pagué y subí las cosas.
-Ven -me dijo Kathy-, comemos luego.
Me abalancé sobre ella, que estaba recostada en mi sofá, y le empecé a besar el cuello, teniendo cuidado de no dejarle chupetones en alguna zona expuesta.
-Mejor vamos al cuarto.
Fuimos caminando torpemente, ya que no dejabamos de besarnos, y en el camino empezaron a volar las prendas. Yo quedé en calzoncillo, y ella en calzón y sostén. Su juego de ropa interior era color rojo y me volvía loco. Se fue quitando el sostén y al fin pude ver sus tetas que tanto tiempo me tenían aguantado. Las empecé a lamer, besar y chupar con frenesí mientras ella soltaba hondos suspiros. Nos quitamos lo último de ropa y ahora sí estábamos desnudos.
Empecé a rozarle con mi dedo la entrada de su conchita, que estaba no totalmente depilada pero sí con pelo al ras. En círculos, lentamente ahora froté su clítoris, y sus gemidos se escuchaban bien rico en mi cuarto. "Espera espera", me dijo. Salió un momento del cuarto, así toda calatita y yo pensé "csm se habrá desanimado?"
Volvió luego de unos segundos, llevando consigo la torta de chocolate. Con su dedo sacó una buena cantidad de fudge, lo embadurnó en mi pene y empezó a chuparlo con una maestría impresionante. "Ah, no, ésta sí es toda una perra", pensé. Tenía a Kathy, una de las chicas más ricas que había conocido en la u, y con la que fantaseaba de cachimbo, chupándome la pinga con la boca de chocolate. Luego de un rato, ya estaba totalmente limpio. Se subió en mi encima, y estaba lista para ensartarse y montarme, pero caí en la cuenta que no tenía preservativos. Se lo dije, y ya estaba haciendome a la idea de ir corriendo al Tambo a comprar, y ella dijo:
-No, tontito, tengo el implante. Con confianza nomás. Hace tiempo nos conocemos, no?
En ese momento no evalúe si era lo más sensato (al final igual no hubo consecuencia alguna) y fue música para mis oídos. Se lo metí de una hasta el fondo y soltó un "ahhhhhh" de puro placer. Empezó a montarme rítmicamente, poco a poco ganaba velocidad, y yo me ganaba con sus tetas rebotando mientras que aprovechaba para chuparlas y agarrarlas.
-Siii, qué rico! Te gusta como te monto? Te gusta cómo te monto, amorcito?
Me dio una pequeña cachetada, mientras yo seguía impresionado por lo fogosa que era.
-Me encanta, Kathy, sigue así! -le dije
-Nalgueame!
Ahí yo empecé a unirme al juego.
-No... -dije burlonamente
-por qué no? -dijo haciendo un puchero-. Por favor nalgueame!
-Pidemelo de nuevo! Di que eres mi perrita!
-Soy tu perrita, solo tuya! Ahhhh, qué rico! Por favor nalgeame, nalgueame!!!
Ahora sí le di con ganas, hasta dejarle el culito rojo.
Hicimos una pequeña pausa, le chupé su conchita un rato mientras ella me agarraba el cabello. Luego de unos minutos se la metí piernas al hombro, al borde de la cama. La sacaba completamente y la volvía a meter hasta el fondo, así hice varias veces
-Ay, mi amor!! Me encanta! Sigue, sigue, clavame!
Después, la puse boca abajo, y puse una almohada debajo de su barriga, para que el culito se empine un poco. Empecé a darle de esa manera, mientras le agarraba sus tetas con mis manos y de rato en rato le daba más nalgadas. Qué delicia era ver mi pinga ser engullida por esas nalgotas!
Luego de un rato Kathy se volvió a subir y ahora me dio la espalda y se ensartó solita, dandome dandome sentones, de los mejores que me han dado en mi vida. Su culo rebotaba contra mi pelvis, sonando casi como aplausos. Ella gemía como loca, y cada vez sus sentones se hacían más firmes y rápidos. Yo sentía que no iba a poder aguantar mucho tiempo más.
-Kathy, creo que me vas a hacer venir...
-Esa es la idea, bobo... Te voy a sacar todita la leche! Uyyyy qué rico, también estoy a puuunto.... Mmmmmmm! Qué ricooo...
En ese momento ella dio un largo gemido y apretó su culo contra mi pelvis, moviendose hacia adelante y hacia atrás, y yo no aguanté más y boté la leche dentro de su deliciosa concha. Fue una gran faena, aguanté lo justo para que ella también se venga. Nos dimos un largo beso y entramos a darnos una ducha.

Después de esa vez me la comí algunas veces más. Desafortunadamente hace un par de meses decidió darse una oportunidad más con el padre de su hija. Luego de que volvieron me la tiré solo dos veces más (ambas ahora sí con condón), pero me dijo que lo mejor es mantener nuestra distancia o dejarlo solo como amigos. Con ella he tenido de los mejores polvos de mi vida, y debe ser el culo más rico que me he comido, incluyendo la vez que le di por el *. Qué delicia eres, Kathy!

 

Buena historia cofrade, siempre la univesidad trae tantas historias..
Uff. Muy buenas

 

Genial buena historia saludos continúe así

 

Buena historia amigo continue

 

Buena historia cófrade, buen relato y claridad y coherencia en la redacción

 

Se vengó del padre de su hijo, poniendole los cachos contigo hahaha

 

Bro estudiaste comunicación :v

 

Asu que buena historia

 

Buena historia cofrade lástima para ti que ya regresó con su ex pareja

 

Buena historia, buen relato, muchos hubiésemos querido tener a la flaquita rica da la u