Golpes femeninos V.S. golpes masculinos

A propósito de parte de lo que se ha venido diciendo a raíz del "impasse" que protagonizó el ex embajador de Ecuador en el Perú ¿qué opinan de la agresión entre géneros?

Anatómicamente los hombres y las mujeres no somos iguales. Psicológicamente tampoco. Sospecho que algunos grupos han pretendido convencer a la población de que socialmente debemos ser iguales, lo cual me parece imposible, precisamente por las diferencias anatómicas y psicológicas. De otro modo, concuerdo con la igualdad de oportunidades laborales y, en general, con la facultad social femenina de hacer lo que le venga en gana en igual medida que los hombres.

Precisamente por eso, creo que si vamos a convivir con la idea de que los hombres y las mujeres somos iguales debemos arrancar de raíz preceptos propios de siglos pasados que colocan a la mujer como alguien desprotegida, débil y privilegiada de las cortesías propias del príncipe encantador para con la doncella en peligro. De tal modo, creo que la agresión femenina hacia el hombre no debe discriminarse. Aparentemente la agresión femenina hacia el hombre suele ser psicológica y verbal, dado su social, cifrado en ser la receptora y evaluadora final durante el acto sexual y la que trae a los niños al mundo. Aunque nada de esto quita que agreda físicamente a un hombre.

Personalmente creo que si una mujer te agrede físicamente uno debería reaccionar como lo haría en caso de con un hombre. Si una mujer se apresta a golpear, por qué no tirarle un puñetazo en la mandíbula, o una patada o lo que sea. Seguro ella daría una patada en la entrepierna. No creo que la diferencia anatómica valga para justificar que a una mujer se le responda con menor violencia o no se le responda. Bajo ese concepto ningún hombre alto y/o fuerte estaría permitido de defenderse de alguien de menor peso y/o estatura, independientemente de su género.

No digo que la agresión se justifique, solo que la defensa no debe tener límites ni consideraciones, si es legítima.

 

totalmente en desacuerdo, a veces sorprende leer algunos post, para mi agredir o pegar a una mujer es por decir lo menos una cobardia

 

A una mujer no se le pega choche.

Por ejemplo a mi mujer yo no me atreveria a levantarle la mano.
Una razon bien simple.
Ella es cinturon negro en Tae Kwon Do ... jeje

 

Entonces también podemos darle a un lisiado que te quiere dar un lapo desde su silla de ruedas. O a un chibolo que te quiere regalar una patada, etc. A sacarles el "ancho". Y solo porque "se apresta", ni debemos esperar que nos caiga el lapo. La mejor defensa es el ataque, manyas??? El retorno a la época de las cavernas. Vaya.....de verdad que Usted hace honor a su nick....una raza de seres de otra dimensión.....

 

A las mujeres jamás se les debe pegar. Creo que la esa del "embajador" mono debió agarrarlas de los brazos o de las manos (que no es lo mismo que golpear). Si bien la señora y su hija comenzaron el pleito por colarse, el maricón ese no tenía nada de diplomático, y nunca debió reaccionar como lo hizo, insultando a la señora. Al final, el que salió perdiendo fue él, porque tuvo que largarse de aquí con el rabo (de mono) entre las piernas. Creo que en la mayoría de países del mundo, salvo en los países más salvajes e islámicos, quien le pega a una mujer es considerado muy poco hombre, un cobarde. No por nada se les llama a las mujeres el "sexo débil" (salvo margaret thatcher y laura bozzo, pero esas son excepciones).

 

estoy de acuerdo, a una mujer no se le debe de levantar la mano o golpear, eso es de cobardes, un hombre se debe meter con otro hombre si quiere dar golpes, la mujer tiene menos fuerza que el hombre por naturaleza, y todos salimos de una mujer

 

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Quizá no me dejé entender. Digo que la mesura en cuanto a la defensa no debe radicar en la diferencia de género, pues eso devendría en ventaja. También digo que eso de que "a la mujer ni con el pétalo de una rosa" o "a la mujer no se le pega" no aplica al momento de defenderse. No digo que uno vaya a golpear indiscriminadamente a las mujeres o que al menor atisbo de agresión uno vaya a noquear al potencial agresor, sino que en el ejercicio de la legítima defensa toda caballerosidad sobra; incluso al extremo de acabar con la vida del agresor si la circunstancias lo ameritan. Asimismo, la administración de la acciones necesarias para defenderse no deberían regirse sino por lo que mane del sentido común; esto es, optar por medidas proporcionales a las de la agresión, independientemente del género o condición del agresor.

Admito que pudo sonar salvaje escribir: "por qué no tirarle un puñetazo en la mandíbula, una patada o lo que sea". Mea culpa. Pero no creo que mi punto deba ser tan desvalorizado, pues lo que quiero decir es que, seguramente, en el imaginario popular resulta impensable que un hombre le tire un puñetazo en la mandíbula, una patada o lo que sea a una mujer, independientemente de la circunstancias de la agresión; es eso con lo que no concuerdo. Si una mujer amenazara con un cuchillo en el cuello algún ser querido, yo comprendería que cualquier hombre le diera un puñetazo en la mandíbula; si una mujer estuviera se aprestara a coger un arma cargada con la clara intención de disparar, creo que sería comprensible que cualquier hombre le tire una patada o si una mujer le lanza cuchillos a cualquier individuo, al estilo de V de venganza, creo que nadie debería cuestionar al hombre que le parta un brazo, por completar tan alucinado ejemplo.

Y relacionado con la manera de abordar las agresiones, no creo que deba tipificarse como un abuso que un hombre le pegue a una mujer. No creo que la manera de condenar la violencia en esos casos sea decir: "el hombre que agrede a una mujer es un salvaje, un bruto, un cobarde". No. No creo que por ser hombre y por que le pegó a una mujer sea un ser deleznable. Todo individuo que agrede a cualquiera, sea hombre o mujer, que empieza la relación con un ataque físico o verbal, todo aquel que abusa de su ventaja, cualquiera que esta sea, y no es capaz de reaccionar con equidad , ya sea por exceso o por defecto, merece tales calificativos por la naturaleza irracional de su agresividad, no por el hecho de ser hombre y el contrincante mujer.