Florece la prostitución en China

Florece la prostitución en China

By Maureen Fan​

La prosperidad y la crisis de valores factores del boom de la prostitución

BEIJING – Tiene 22 años y es prostituta independiente, aunque a primera vista cualquiera pensaría que se trata de una universitaria más. Pero sus pasos la delatan, del salón de belleza a donde los clientes soliciten sus servicios. Se puede decir que vive pegada a su teléfono celular, pendiente de las llamadas de sus contactos en hoteles, restaurantes y todo tipo de establecimientos públicos. Es el retrato de la prostituta promedio en China, no es la chica A1 que sólo atiende clientes de los mejores hoteles ni la callejera que ronda las calles donde abundan los trabajadores migrantes y cobra un dólar por servicio.

Hace dos años comenzó su camino en el oficio más antiguo del mundo en su provincia natal, Shandong, donde cobraba 27 dólares por servicio. Apenas tiene unos pocos meses en Beijing y, por esa razón, paga su derecho de piso, 20 dólares el servicio. Normalmente atiende a dos clientes diariamente y su ingreso mensual es de US $ 1,350. Ahorra la mayor parte de sus ingresos y una parte la envía a su familia. No obstante teme que su situación económica por la competencia de chicas más jóvenes, por lo que su tarifa ha bajado a US $ 13.

“Me estoy haciendo vieja. Las tarifas han bajado, pero tengo más clientes y atiendo tres o cuatro diarios. Mantengo mi nivel de ingresos, pero trabajo más, esa es la explicación que me da mientras almuerza un simple plato de verduras y pollo picante en un restaurante de los suburbios de Beijing.

La prostitución en China ya no está limitada a ciertos bares o karaokes, sino en todos los lugares públicos, desde las universidades a los barrios residenciales. La mayor parte de las prostitutas vienen del campo y son mujeres que buscan labrarse un futuro mejor en las ciudades. Las edades varían, algunas son mayores pero otras muy jóvenes. Todas quieren dinero.

“Hace 25 años no había prostitución en China. 15 años atrás sólo había trabajadoras sexuales en el campo ni en la ciudades del interior”, declara Jing Jun, sociólogo de la Universidad de Tsinghua. Hoy los estimados más conservadores indican que hay cerca de un millón de prostitutas, incluyendo aquellas mujeres mantenidas por hombres casados. El boom de la prostitución avergüenza al Partido Comunista, pero poco o nada puede hacer, salvo ocasionales redadas en las zonas rojas de la ciudades. El Estado no puede condenar a las prostitutas pues es conciente de que gracias a su trabajo se cubre los gastos de millones de familias pobres del campo. Además, las mismas autoridades están involucradas en el negocio.

China tiene una larga y complicada relación con la prostitución. En el siglo XIV el gobierno imperial decidió regular el ejercicio de la prostitución. Durante la Revolución comunista, el Ejército Rojo clasificaba a las prostitutas dentro del grupo de indeseable, que incluía a los asaltantes de caminos, adúlteros y adictos al opio. Cuando el Partido Comunista llegó al poder, una de sus primeras políticas fue la prohibición de la prostitución.

60 años después la prostitución florece en el país, no sólo a causa de la miseria de la población campesina sino por el deseo de millones de mujeres de tener dinero y ropa de moda.

El profesor Jing justifica la existencia de la prostitución. “Moralmente hacen lo correcto. Muchas prostitutas envían dinero a sus familias. Cumplen con su deber filial mucho mejor que yo. La clase política, académica y las autoridades sanitarias no consideran que no se prostituyen por inmorales, sino porque no tienen oportunidades de empleos, oportunidades ni de educación”.

Los riesgos sanitarios son altos. El servicio cuesta 10 yuanes [$1.33] en Sichuan, debajo de un puente o al lado de un carretera. 40 % de las trabajadoras sexuales mayores de 35 años han dado positivo en los tests de SIDA. Para el profesor Jing esto prueba que la prostitución es un recurso se mujeres desesperadas, que no exigen a sus clientes usar condón para tener un centavo con que alimentar a su familia. Asimismo, los casos de sífilis han aumentado desde el 2005.

China carece de una estrategia para combatir las ETS. Los afectados visitan médicos con poca experiencia en la materia y los escasos hospitales especializados están mal administrados. La cifra real de afectados de ETS se estima 10 veces mayor a los guarismo oficiales. No hay información disponible al público sobre el SIDA y las ETS.

En un karaoke en el norte de Beijing una prostituta de 37 años cuenta que entró en el negocio porque necesitaba dinero para ganar la custodia de su hijo de 9 años, que quedó en manos de su marido. Teme aún por su vida porque su ex – marido es un hombre violento. Aún así reconoce que no tenia opciones. Su vida es precaria, apenas visita a su ginecólogo y no toma las precauciones de sus colegas más concientes de las ETS.

Otra prostituta dice que el cliente promedio piensa que las ETS son como un resfriado y que se pueden curar con una pastilla. Esta actitud se refleja en la encuesta nacional del Instituto de Investigación de la Sexualidad y Género, de la Universidad del Pueblo en Renmin.

La prostitución en la China de hoy es una actividad microempresarial. En todos los vecindarios de los grandes ciudades las prostitutas alquilan departamentos para atender a sus clientes y ofrecer un poco más de intimidad y de comodidad que en los lugares tradicionales de ejercicio de la profesión.

Paralelamente la prostitución masculina también florece en China. Sus principales clientes no son señoras de mediana edad sino prostitutas que buscan borrar la sensación de explotarse a sí mismas.

Una joven prostituta cuenta su historia: “Sólo he estudiado hasta la primaria y, antes de entrar a la profesión, trabajé en una fábrica textil y en la cocina de un gran hotel. Tenía largos turnos de 12 horas y en los pocos minutos de descanso veía a las chicas pasearse en el lobby del hotel. Ellas no hacían nada y ganaban más dinero que yo trabajando arduamente. Por eso decidí convertirme en chica mala. Quería dinero”.

Fuente: The Washington Post
Fecha 05 de agosto de 2007
Estimados cofrades:
Espero que les interese.
Saludos,
Drais

 

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Y no solo en China, en Europa se esta llenando de la oferta de prostitutas chinas, alquilan un depa. entre dos o tres y te atienden con masajes y todo y encima a buen precio, una alternativa para los que gusten del pollo al curry. Aqui en Italia parece que son buscadas contrariamente a los que todavia piensan que hay racistas, aqui le entran a todo tipo de mujer basta que sea buena.

 

No importa si es en China o en Peru, con oferta solapada o abierta, con chibolas, o tias que se ofrezcan.

La prostitucion mueve al mundo, la economia, el internet, etc.

Sin la prostitucion no existiria este foro

 

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Imaginense... UN MILLON de kines chinas!!... mientras sean como esta muñequita de chifa....