Primero, agradecer a Eros por su buen resumen. Aunque no creo que el local desaparezca como él concluye, simplemente seguirá cayendo en calidad. Siempre irá gente nueva, siempre irán los caseros de las chicas y siempre habrá gente cada vez más maleada que irá por ahí. Esto último lo digo con respeto, pero las últimas veces que fui vi gente que no me daba buena espina.
Así que el Madonna vivirá, porque está así desde hace tiempo e igual continúa. Lo que pasará es que muchos de los que antes íbamos dejaremos de ir. En mi caso, ya ni por las chicas antiguas iría.
La salida no debería pasar de 60 soles y las flacas deberían conformarse con 150 soles. ¿Maribel por 300 soles o cualquiera de las otras? Por favor, mejor le pagan a una del Emmanuelle y hasta por menos.
Segundo, y con esto me despido de opinar de este local.
Lo que sigue lo dejo a criterio de los moderadores, pues no quiero que se piense que tengo algo contra este local. Siempre dije que tengo buenos recuerdos, pero esto que me contaron sí me parece grave porque ya parece una historia delictiva.
De buena fuente, un par de patas y un par de flacas de este antro a las que llamé para confirmar la historia, me contaron que a inicios de diciembre se armó un problemón. Ya comenté antes que en este local lo que no existe es orden y que varias flacas son pareja. De que sean pareja poco importa, pues cada quien hace con su vida lo que quiere. El asunto es lo que viene a continuación.
El tema es que a una de estas flacas del Madonna le hizo poca gracia que su pareja, es decir otra de las chicas, hiciera cosas (es decir, que la tipa haga su chamba) con un cliente en el privado. Lo que me contaron, y acá está lo confuso del tema, es que al tío lo llamó otro día nada menos que la flaca que lo atendió en el privado para que la fuera a buscar al local.
Lo malo es que en la entrada del local no lo esperaba la susodicha, sino la otra (es decir, la pareja enojada) con un matón dizque para ajustarlo. Me cuentan que al cliente lo insultaron, la flaca (la pareja enojada) lo llamó de todo y su pata (es decir el matón) lo insultó y quiso quiñarlo. Me dijeron que al tío lo hicieron correrse hasta el grifo que está más abajo en el mismo Arriola.
Resumen para no aburrir: a la flaca belicosa la botaron (aunque no me extrañaría que regrese a chambear), la flaca que llamó al cliente (imagino que sabiendo que lo iban a quiñar) aún sigue trabajando y al cliente lo dejaron recontra humillado.
No pongo nombres de las chicas (me los dieron) simplemente para no meterme en líos ni perjudicar a nadie. Para los que duden del asunto, simplemente consulten con sus conocidos o conocidas.
Ya comenté antes que hace tiempo decidí no volver por la decadencia de un local donde antes uno se divertía, pero ahora todo es malo: lo caro de las salidas, el mal trato de los mozos y mozas, el mal trato de muchas de las chicas y lo caro que quieren cobrar. Pero esta historia (la de las flacas y el tipo) sí me parece grave.
A los que vayan, suave con las flacas que los atiendan, pues están más locas que una cabra.
Saludos,