De la selva, su encanto

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Esta historia se inicia a fines del 2002, precisamente en la fiesta de fin de año, con unos amigos fuimos a unos de esos locales del cono norte donde se presentaba uno de los grupos de cumbia del momento, en realidad me no me gusta la cumbia, yo crecí a fines de los ochenta cuando los tonos eran full salsa, pero Ustedes comprenderán que uno debe buscar donde va la carnesita y en esos locales siempre hay chicas para todos los gustos. (Otros lugares que me han funcionado son los Supermercados y las iglesias, pero ese es otro tema que debería debatirse en el foro en su momento).
El asunto es que computamos unas chicas que venían de Ventanilla (eran charapasas) y eran recontra pilas excepto una de ellas que si bien era conversadora, la verdad era medio seria. A continuación la descripción correspondiente: baja (no llega al 1.60), senos en su punto y un culito que si bien no era muy grande, si tenía esa forma de perita que aunada a lo pequeña de su cintura hacían un conjunto muy apetecible, además tenía un cabello largo y negro que resaltaba con su piel blanca, ojos medio rasgados y sonrisita provocadora (cuando sonreía, porque como les dije era medio altanera o eso me pareció al inicio), para piña como estábamos empatados (4x4) me toco en suerte hacer pareja con Edith (llamémosla así).
La noche avanzaba, las chelas también y mientras mis patas estaban ganadasos (todos ya estaban chapando y uno hasta había medido la temperatura, yo estaba que reventaba de cólera porque con la charapa de no pasaba del roce en los bailes (para concha la cumbia no es bailar muy pegados), además la flaca era la que menos tomaba y se mataba de risa viendo como sus amigas agarraban con mis patas y al parecer mi situación también le provocaba risa hasta que en una de esas me dice: Gracias por ser tan caballero, le pregunto a que se refiere y me contesta que ella siempre era la que cuidaba a las demás cuando salían y que por lo general los patas se abrían de su lado y pasaba los tonos sola (¡Lógico!), no me quedo otra cosa que decirle: mira que coincidencia yo también soy algo así como el amigo elegido, por eso es que tomo moderado, a lo que me dice: mentiroso, tomas así porque eres recontra pollo, - na´que ver, tomaría mas si tuviera al frente a alguien que tomara como yo -, a lo que muy valiente me dice: No me retes que te gano, y empezamos a tomar cepillado.
No sé cuanto habremos tomado, ¡pero como chupaba esta charapa!, se servía a full y parecía como si recién hubiese llegado, yo todavía seguía consiente, pero con decirles que ya la música me empezaba a gustar, no cabía ninguna duda: ella había ganado, se había burlado de mi, había quedado como el más tonto de la fiesta, del cono norte, del año, Edith también lo sabía y sonreía de manera muy coqueta, ya para esto mis amigos habían salido cada uno por su lado así que solo quedamos los dos en el local.
Totalmente derrotado le digo: OK ganaste, fue un gusto, me voy, a lo que me responde: bien pero primero acompáñame a tomar un taxi. Llegamos a la salida y mientras caminábamos en la vereda en busca de un taxi me lleva contra la pared y me empieza a besar en un beso prolongado y riquísimo, pucha que fue algo que no esperaba, solo atine a decirle: ¿un poquito tarde no crees?. – Este es tu premio por haberme soportado toda la noche, parecías un cachorrito (tremendo imbécil diría yo ¡Charapa de !), seguimos agarrando por un rato ella por momentos me agarraba la pieza, hasta que de pronto me dice: Oye ya tengo que irme (¡encima calienta pichulas!), yo entre en corto circuito y empecé a tartamudear - ¡ya pues decídete: primero que no, luego que si, luego de nuevo que no! - No sé cómo lo habré dicho pero empezó a matarse de risa y al final me pide mi teléfono diciéndome: Te llamo el fin de semana para terminar lo que comenzamos, le doy mi número, lo apunta en un papel y al despedirse, dándome un beso en la mejilla me dice: Eres muy lindo (¡Fuera CTMR!!!).
Quede en medio de la pista, sintiéndome igual de meado que los borrachos que estaban a mi alrededor, ya sé que esta es una de esas historias que no se deberían contar, pero el asunto es que el viernes de esa semana….ella me llama…….(continuará).

 

Hijolee manoo , empezo bien su relato ... nos deja con la intriga de lo que continuara ... se nota que se viene lo bueno ...

Esperamos con ansias su segunda parte

 

Si amigo, hay cada mujer que calienta a los hombres y despues dicen por que reaccionamos de esa manera, me acuerdo una que me tenia asi hasta que planee todo y cambie la historioa, amigo buena tu relato...esperamos el desenlace

 

la charaputa se la pego de estrecha jajajaja en fin si te endulzo pues dale duro cofrade y sacale la m por todos sus orificios cuando la encuentres jajajajaj

 

No nos deje con la intriga de como era esa nena, ojala la haya podido pasar mucho mejor que en la discoteca. No olvide contarnos la segunda parte

 

esta chevere el relato compadre , pero continua que se me acaba el alquiler de mi cabina de internet jajajjaja

 

...Continuacion.....

- ¿Halo Pepeperez?, soy yo Edith.
- ¿Edith quien?, le respondo.
- A graciosito.
- Es mi turno Señorita, ¿dígame a que se debe este honor?
- Llamaba para saber si querías salir a caminar por ahí.
- Bien, pero ahora que sea en mi ritmo.
- Ok, ¿dónde nos vemos?

Ese sábado la llevé al Boulevard de los Olivos a una conocida discoteca de salsa y comprobé que en este ritmo, Edith estaba en nada, así que fue como darle unas clases particulares o algo así, por suerte se dejaba llevar fácilmente y no fue difícil hacer que disfrutara el baile, en los intermedios hablo de “lo bien que lo pasamos”, y de lo bien que le había caído, se notaba por su sonrisa que estaba disfrutando la noche. Como comprenderán yo solo quería reventarle el culazo (disculpen la vulgaridad), ya no estaba para perder el tiempo así que al primer movimiento me la empiezo a agarrar y para mi sorpresa estaba recontra calenturienta, ¡que charapa para más rica por Dios!, besaba como si en cada beso diese el alma, en eso me dice al oído: ¡Te deseo!!!
(Era la primera vez que me agarraba una chica de la selva, y debo reconocer que tienen un no sé que las hace muy excitantes, quizás me estoy dejando llevar por los convencionalismos, pero todas charapas con las que estado (en la intimidad) han estado a la altura de lo que se dice de ellas… simplemente hermosas criaturas dispuestas a entregarse sin inhibiciones).
Regresando al relato les diré que desde el momento que me dijo lo que les conté líneas arriba y el llegar al cuarto del telo habrán pasado a lo más 10 minutos que me parecieron eternos, pedí un vinito y al cerrar la puerta empezamos a quitarnos la ropa mientras nos besábamos, luego entramos a la ducha y literalmente me la comí a besos, su cuello, sus orejas pequeñas, sus senos con sus pezones paraditos, su estomago, sus pies, sus muslos, sus caderas hasta llegar a su entrepierna, mientras mis manos jugueteaban con esa papita rosadita (totalmente afeitada), era impresionante la imagen de esa pequeña figura tan dispuesta a dejarse amar, ella solo cerraba los ojos y dejaba escapar unos gemidos que no hacían sino echar más leña al fuego, vuelvo a subir hasta encontrarme con sus ojos, ¡Que mirada!, era la mirada de una hembra totalmente entregada, nada que ver con la chica creída de la fiesta de fin de año, ahora era yo el que estaba al mando, nos secamos a la ligera y levantándola en mis brazos la tiro en la cama y me tiro a continuación encima de ella (me salió igualito al Austero Flores de Carlos Álvarez).
Seguimos devorándonos a besos cuando de pronto, ella se sube sobre mí, coge el condorito me lo pone y en una se lo introduce de golpe (¡Tá mare!, eso no estaba en mis planes), al parecer estaba recontra caliente porque empezó a moverse como licuadora, mientras su cabello le tapaba toda la cara y ella movía su cabeza a veces hacia adelante otras hacia atrás. No es que no lo disfrutara, pero ver este espectáculo me intereso sobremanera y me dedique a observar lo más posible sus movimientos, en un momento dado encojo mis rodillas, la sujeto con ambas manos de las nalgas y empiezo a bombear hacia arriba, pucha que se aloco más aun, hecha todo su cuerpo sobre el mío me abraza y me empieza a besar mientras la seguía bombeando en esa posición.
A estas alturas del partido sus gemidos se habían transformados en pequeños gritos ininteligibles, la quise voltear para darle en misionero, pero se puso rígida y agarrándome las manos me dio a entender que estaba a punto de acabar, le toco el vientre y estaba recontra dura, así que la cojo por la cintura y le digo: ¡¡¡Mírame!!!, se llevó el cabello hacia atrás y mirándonos me empieza a montar con más fuerza hasta que abre sus ojos en forma exorbitada, abre su boca en una “o” prolongada y muda y todo su cuerpo se pone rígido, para luego cerrar los ojos y echar la cabeza hacia atrás, ¡Que espectáculo!, no puede aguantar más y se me empiezo a correr mientras mi cuerpo empieza a temblar en una serie de espasmos que provocaron que su cuerpo encima mío saltara. Segundos después caía rendida sobre mi pecho mientras yo pensaba: ¡Ta´ mare que ricoooo!!!!!
Luego de unos segundos de descanso, aun abrazados, totalmente sudados y sonriendo de oreja o oreja me dice: Gracias, no tenia uno de estos desde que me separé de mi marido….¿What?...(continuara)

 

que buena segunda parte falta la tercera me dejaste alucinado buena charapa espero lo que sigue excelente relato gracias por el aporte

 

Se nota la experiencia que usted tiene por la manera de describir la actidud de una mujer exitada en la cama. Su relato esta bien realizado y es un homenaje a quellos hombres que saben esperar por lo mejor de una hembra. Felicitaciones.

 

Muy buena la continuacion de esta segunda parte de su relato .. algo extrañado su final como usted sobre que tuvo marido la charapita
son cosas que pasan sin que uno sepa pero se dan , pero no creo que a usted le haya importado mucho ya que obtubo lo que usted buscaba en la charapita en comersela Diablito

Esperamos su 3 parte cofadre , se le agradece.

 

JAJAJAJAJA,.Buenaaaaaaaa "Austero Flores",ptmr, está chevere elrelato .osea que resulto que era separada la charapita en mencion?? 'ta que pendeja. jejejje...venga la conclusion delrelato....!!

 

Termina compare que esta historia esta para el premio nobel de la literatura.....jajajaja.....muy buena, charapita tenias que ser.... Vivan las charapas

 

Esta chevere tu relato coleguita bien eleborado vamos no pares hasta el novel y continualo que me dejaste con el muchacho alborotado

 

muy bueno el relato, muy bien escrito, una historia exitante..las charapas son divinas..y siga usted con la tercera parte de la historia

 

yo tambien me tope con charapas y en mi caso todas eran mas ardientes y saben lo que quieren, charapas en la costa y charapas en la misma charapolandia, me has hecho acordar a una que le daba duro y cuando llegaba gritaba y temblaba todo, era un espectaculo verla, tanto que cuando se tiraba al lado de la cama le daba replicas del terremoto que habia sufrido com pequeños temblores de cuerpo, maravillas de la selva y de la naturaleza humana

 

man, que si las charapas cumplen las espectativas de lo que dicen la gran mayoria me consta, son para gosarlas las primeras, no se cohiben, provecho sigue contando, se que las charapas se amarran com marido desde los 15 a 16 y a los 20, 22 ya son solas otra vez la clasica

 

... Continuacion...
Resultó que Edith (en ese entonces de 23 años), tenía un hijo, llevaba dos años separada de su esposo (casada por civil), él pata también de la selva, se había ido a trabajar en el negocio de la madera en Pucallpa y había tenido otro canal por allá. Ella al enterarse de esto no quiso saber nada más de él, por más que le pidió y rogó que lo perdonase ella no dio su brazo a torcer y al parecer ahora solo se veían como amigos cada vez que venía a visitar al niño.
- No quiero volver a tener otro compromiso en mi vida- Decía Edith.
- Pero tú aun eres joven y seguro no te faltaran hombres que quieran estar contigo- le dije.
- No quiero, ahora soy una persona libre, dedicada a mi hijo y si quiero algo pues lo hago con quien yo quiera en su momento y después nada más. (¡Bingo!, díganme sino era un amor esta mujer)
El caso es que nos volvimos amigos con derechos, nos veíamos cada 10 o 12 días, primero salíamos a comer o a bailar, pero luego a pedido de ella misma, que no podía estar fuera de su casa mucho tiempo, íbamos de frente al matatiru tirulá. En ese lapso tuve dos enamoradas pero a ella eso parecía no importarle con tal que le cumpla, incluso disfrutaba (o eso me pareció) que le cuente la relación con mi pareja de turno para luego dejarme más exprimido que limón de emolientero, luego la muy pendex riéndose me decía: Ahora ya puedes ir a ver a tu “amorcito”, pucha que a la flaca le tenía que decir que la chamba estaba pesada o cosas así, a decir verdad ahora que lo pienso yo prefería tirármela a ella que a mis enamoradas, pero bueno…no, na´que ver, Edith era solo mi pataza del alma.
Siempre me asombró el doble discurso de su personalidad, en su barrio era una señora joven muy seria y respetada, (me consta porque asistí a unas polladas por su barrio y todos le tenían ley), sin embargo conmigo perdía todos sus escrúpulos, se entregaba y pedía como si mi chulapi se fuese a acabar, algo muy peculiar en ella era sostener por momentos mi soldadito mientras lo chupaba, lo contemplaba totalmente arrobada unos segundos cual objeto muy reverenciado y luego suspirando y con los ojos cerrados se lo pasaba por toda la cara como si fuera un pañuelo o un jabón (era como un rito al falo o algo así, el hecho es que me quemaba el cerebro esa costumbre suya). No es que yo la halla conquistado, fue ella la que me eligió.
- En su momento tendré otro hijo y ahí cierro la fabrica- me comentó una vez.
- ¿Y con quien lo vas a tener? Pregunté.
- Pues con el papá de mi hijo, respondió.
- ¿No que ya no pasaba nada con él?
- No quiero vivir con él, pero desde que nos separábamos hemos tenido un par de encuentros. ¿No te molesta verdad?
- ¡Noooo, para nada! (Uhhh)
Sucedió que un día, en una de nuestras cesiones, yo me encontraba dándole en “canis positio”, me acuerdo que le estaba dando con alma corazón y vida cuando de pronto ¡Zas!, se rompió el jebe. ¡! dije, ella preguntó ¿Qué pasa?, -se rompió el condón, voy a ponerme otro-, a lo que me responde: - no te preocupes acaba de terminar mi regla, vente adentro-. No lo pensé dos veces y esa noche le inundé por primera vez su papita con mi lácteo elixir. A partir de esa fecha siempre lo hacíamos a carnesita, porque me decía que tomaba la pastilla, habremos estado un par de meses en ese plan cuando de la noche a la mañana ella desapareció del mapa. Entiéndase: no me contestaba el teléfono, ni el e-mail, pero unos días antes de su desaparición, me envió unos mensajes de texto que decían cosas como: Te has convertido en alguien muy importante en mi vida, siempre te llevaré en mi corazón y cosas de ese tipo.
La verdad, yo estaba algo dolido por la forma en que repentinamente se fue de mi vida (uno se acostumbra al cuerpo de una mujer y si es buena amante pues más aun), pero la verdad en ese entonces lo que menos pensaba era en formalizar una relación, en una oportunidad ella hizo un amague durante una conversación, pero en una le dije lo que pensaba así que ella lo tenía todo bien clarito. En su barrio averigüé que se había ido a la provincia, no pude averiguar más porque habría sido notorio mi interés. Pasaron de seis a siete meses sin saber nada de ella, hasta que un día recibo su llamada.
- ¡Hola pepeperez te acuerdas de mí!
- Hola ingrata, ¿dónde te habías metido?
- He estado algo ocupada.
- Bueno, bueno, ¿te puedo ir a ver?, Cuánto antes mejor.
- Ok, pero primero contéstame una pregunta: ¿Alguna vez te has acostado con una mujer embarazada?...... (continuará).

 

Buen relato y se va poniendo mejor

 

excelente cofra.. siga asi.. estas charapas son al cag... son recontrasorpresivas.... prosiga maestro!

 

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EXCELENTEEEEE.......!!! PTMR Cófrade, se pone emocionante la cosa, misma telellorona Mexicana,jajajaja.No nos deje en ascuas,a ver que sigue .. Mis felicitaciones por tremenda historia. Ahora falta que elbebe sea un "Pepeperezito"...ah?? jajaja . Continue.....!!