La primera y última con mi suegra... en su cumpleaños.

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Hola a todos, es la primera vez que me atrevo a escribir algo así, desde ya disculpen la informalidad de todo esto (no pondré nombres reales), pero vamos... ustedes quieren leer la carne del asunto, a partir de aquí, digamos que mi nombre es Diego y tengo 27 años, voy a contarles lo que sucedió un día de Mayo del 2018, en el distrito de Lince, espero no decepcionar a nadie, reitero, es mi primera vez escribiendo un relato erótico, más aun, compartiendo algo más en este gran foro, empezamos...

Para entrar en contexto, tuve una relación de 3 años con "Isabel", desde el 2016 hasta el año pasado, fue una relación con discusiones constantes, donde el problema usual eran los irracionales celos, sin embargo, siempre hubo un ápice de confianza, a pesar de considerarme un sujeto arrecho 24/7, si, muy arrecho, no tengo ningún roche en decirlo, debido a esto se me hace difícil conservar una relación, es un compromiso bastante complejo si tengo conectado el cerebro con la pinga.

Dentro de esta relación, pude conocer a la familia de Isabel, vivía con sus 2 hermanas y sus padres en una casa medio grande, en un segundo piso en el bonito (para mi) distrito de Lince.
Isabel, quien siempre fue una persona bastante abierta y arriesgada, no le importaba tirar conmigo en su cuarto sabiendo que sus padres estaban literalmente en el cuarto del costado, no importaba si yo me quedaba a dormir las veces que sea en su cuarto, sus padres no se inmutaban y siempre me recibían con una gran sonrisa, lo que me lleno de haaaaaarta confianza, en conclusión, estaba tan cómodo que prácticamente vivía en casa de Isabel, viendo muy seguido a su madre, "Maria".

Maria, ala Maria, llegado el primer verano, de ese 2017, empecé a alucinar a Maria, quien es una señora de 51 años, bien parada, buen porte, cara de tragona, cara de bandida, cara de pendeja, siempre maquillada, siempre se arreglaba, usaba unos vestidos que ponían fierro, shorts, falditas cortas, donde hacia resaltar tan bien esas gruesas piernas que tenía, sin duda era una tía con harto aguante, de barrio aunque medio que se computaba muy fina, delicada, la edad no se notaba en ella, excelente color, quizás un detalle que me hizo explotar de lujuria, sus pies, los pies bien cuidados, con eso ya te puedes imaginar lo bien cuidada que estaba. A pesar de no tener atributos exagerados, tenía las tetas de tamaño estándar, el culo igual, pero no me jodan, esas piernas era lo que mejor poseía. (Colocaré fotos más abajo, obviamente censuradas pero resaltando lo que realmente importa).

Siempre tuve una gran relación con Maria, la hacía reír, siempre, se alegraba bastante cuando llegaba, sobre todo cuando llegaba con detalles, hasta por un momento llegue a pensar que quizás estaba siendo más detalloso con Maria que con Isabel, mi firme. Creo que un don que tuve siempre fue el saber tratar con gente mayor, sobre todo con madres, desde que tengo uso de razón, siempre llegaba a ser el amigo preferido de las mamás de mis amigos.

Habían momentos donde me quedaba en la cocina con Maria, mientras esperaba a Isabel que salga de alistarse o que sea lo que haya estado haciendo, esos momentos para mí fue como plantar las semillas para lo que ocurriría después, en uno de esos momentos clave Maria estaba cocinando, me ofreció un vaso de chicha, yo veía sentado como lo hacía, obviamente mirando nada más que sus piernas, sus sandalias con plataforma que marcaban esas pantorrillas tan deliciosas... esto es lo que recuerdo...

- Maria: y a donde van hoy? yo pensé que se quedarían, para que prueben un poquito al menos del ají de pollo que estoy haciendo.
- Yo: Quedamos con unos amigos para ir a Miraflores, hay una mini feria de cositas que le gustan a Isabel, pero no se preocupe que yo pruebo ahorita, yo le doy el veredicto!
- Maria: Ya, ven, prueba ahorita dime que le falta

Para esto, me paré y me puse tan cerca de ella que pude oler ese perfume tan rico que usaba, un olor a vainilla algo fuerte, mezclado con un aroma a tía fuerte que añoraba una buena pinga joven.
- Yo: *mirando directamente a sus ojos después de probar* Esta buenazo, ese picor que le dejó le da el toque, tiene muy buena mano señito (como acostumbraba a decirle)

- Maria: *riéndose súper coqueta y mirándome con fuego en los ojos* Que bueno, si no te quedas, te voy a guardar entonces.

Si, quizás fue una interacción que muchos dirán que no dijo ni , pero para mí, fue como abrir una puerta nueva, se sintió una energía bieeeen lujuriosa, al volver a mi sitio la barrí completamente con los ojos, ella, quien se presentaba por primera vez de esa forma casi coqueta, siguió en lo suyo y de rato en rato me buscaba con la mirada, obviamente yo correspondía y seguíamos hablando de quien sabe que, hasta que Isabel salió, nos fuimos sin antes despedirme con un beso bien plantado en su mejilla, básicamente le chupe todo el cachete y su respectiva agarrada de cintura.
Si cuento las ocasiones en donde hubo interacciones similares, esto se extenderá demasiado, así que como dije al inicio, voy a ir directo a la carne...

(FOTOS REALES)

 

buen empiezo cofra, se ve interesanre

 

Buen relato Dr. a mi me pasó algo similar ya lo contaré en su momento. Saludos y esperamos la continuacion.

 

Se ve bien la señora

 

Gracias por los comentarios! continuo el relato...

Ahora que están maso menos enterados del contexto y de la relación que tenia con esta señora fuerte, me adelantaré un poco a pesar de haber tenido interacciones similares que podría valer la pena contar.

Llego ese verano del 2018, en esa época siempre espere que hiciera un calor de , ya que así mi flaca y su madre usarían prendas mas ligeras, lo cual me encantaba y a quien no?, llámese faldas, vestidos, me daba igual al final que se ponía, con tal de ver esas piernas deliciosas, paraba mucho mas que nunca en esa casa, ya había mucha mas confianza con Maria, esa confianza para tutearla, que para mi ya era un tanto difícil, esa confianza de poder hablarle con un poco mas de ají, hizo toda la faena mas sencilla a pesar de la magnitud que significa el levantarte a la suegra.

Lo que tanto había pensado en mis pajazos nocturnos estaba a punto de volverse realidad, adjunté precisamente una foto de un vestido floreado, con el cual me he recontra jalado el ganzo tantas veces, ese mismo vestido se lo volvió a poner el día de su cumpleaños, cayó un sábado, dia soleado, preciso, invitó a la mayoría de su familia, típico almuerzo/cena familiar que se volvería en chupeta y bailetón.

Yo llegué a eso de las 5 pm, obviamente con un regalo bajo el brazo y dispuesto a engreirla como merece tremenda madura, le llevé un conjunto pijama veraniego, que consistía en un shortcito bien bonito y un polo pegadito, ademas de una bata de baño, que usualmente usaba, lo tenía planeado, muy a pesar de las ganas incontrolables de lamerle las pantorillas, le tenia un cariño enorme por el buen trato que me dio siempre. Obviamente al llegar la saludé con un fuerte abrazo...

- Yo: Señito feliz cumpleaños! *abrazándola tan fuerte, poniendo mi mejilla contra su mejilla, oliéndola bien y tratando de apretarla hasta que sienta un poco la erección que empezó a suceder*

- Maria: Holaaa Diego, graciaaas corazón *mientras me abrazaba igual, me dio un beso super carnoso en el cachete pintandomelo de labial oscuro, mientras me tocaba el hombro con fuerza*

- Yo: Toma Maria, espero le guste harto y lo use también! *con una sonrisa pendeja, tirandole el doble sentimiento*

- Maria: Ayyyy, te pasas oye, no tenias que!, bueno gané entonces pues, viniendo de ti, estará bonito *sonriéndome casi coqueta con una convicción increíble, aun tomándome del hombro*

Dentro de toda la jarana, entre tragos y tragos, salia de rato en rato a fumar un cigarro con mi flaca, OH! me había olvidado que tenia flaca!, si, pero porque la respeto, no la voy a mencionar tanto.
Ya era medianoche, los invitados de a pocos empezaron a irse y los jaraneros aun quedaban, yo no me había proyectado mucho mas con la señora en ese momento, sin embargo, en uno de esos breaks de cigarrito, me había quedado solo en el balcón, escuché esos tacones veraniegos que inmediatamente dejaban ver esas ricas piernas de Maria, con ese vestido semipegado y con una voz ya distorsionada por el trago, mi reacción natural fue hacer un paneo de abajo hacia arriba con mis ojos, obviamente Maria no era ninguna novata para no darse cuenta que ya la estaba alucinando...

- Maria: Me muero de calor como no tienes idea, como puedes estar fumando! como te matas los pulmones caracho! *Poniéndose a mi costado, con ese tufillo a vino y colorete*

- Yo: Jajaja, yo sé que hago mal fumando pero sorprendentemente aun tengo harto físico! *Mirandola con una sonrisa coqueta y tratando de pensar que dije algo digno de un galán pendejo, obviamente no sabia gilear*

- Maria: Ah si? bueno tienes razón ah, el otro día Isabel me enseño la rutina que te grabaste haciendo ejercicios, como haces ah? cargas harto peso! me muero *genuinamente interesada en saberlo*

- Yo: Jajaja, se pasó! que roche que lo enseñe, pero si, cargo como 55 kg aprox *haciéndome el pendejo, sabiendo que no es nada cierto*

- Maria: Miralo al Diego, fuertecito el hombre jajaja, me puedes cargar a mi entonces! *muy entusiasmada mientras se movía, me abraza para reírse sin darse cuenta que el vestido se le subía de a poquitos*

- Yo: Jajaja señito! se pasa! pero de que puedo, puedo ah! me va a poner a prueba *mi pichula ya empezaba a chorrear su lubricante natural al sentir su cuerpo cerca al mio*

Seguían pasando las horas, mientras combinaba chela, ron, pisco y vino, ya estaba bien movido, para que negarlo, me empecé a soltar mas, quizás hasta dar roche, entre bailes, chongos, ya estaba en mi tono, empezaron a subir esos deseos lujuriosos, obviamente tenia la opción de terminar cachando con mi flaca, pero después de tantas posibles señales que Maria me había dado, no solo ese dia, iba a jugar mis cartas si o si esa noche...



Continuo al rato, voy a despejar mi cabeza un poco, pido disculpas si me explayo demasiado, me esfuerzo en dar mucho detalle para que estén mas inmersos en lo que les cuento.

 

Continue cofra creo que usted es dueño del relato puede darse el lujo de contar con mas detalles pero eso si no se demore mucho pq su relato es bueno y hacer esperar al publico por mas nos dejas ansiosos espero sea pronto la continuacion

 

Gracias estimados!
Hoy cierro el relato, prometo adjuntar mas fotos también para que se enfermen un poco mas.

 

Que aumente el morbo cofra, buen relato

 

Buena historia cofra, interesante saber como se comio q la suegra

 

Cierro mi relato con esta ultima parte...

Ya era de madrugada, más o menos las 3 am, ni el suegro ni Maria se rendían tan fácil, el trago seguía sirviéndose, Isabel como buena cabeza de pollo, se estaba quedando dormida, así que eso se prestó totalmente para llevar a cabo mi cometido, al menos era lo que pasaba por mi ingenua cabeza. La casa ya estaba medio vacía, las hermanas de Isabel se habían encerrado a dormir temprano en sus respectivos cuartos, que para mi suerte, estaban alejados de la sala y la cocina, donde yo estaba con el papá y mamá de Isabel, tomando y tratando de aguantar, mientras Maria estaba lavando platos mientras se tomaba su najar, todo un estilo el de ella.

Foto por aquí, foto por allá, aprovechaba para ponerme al costado de Maria y al momento de posar, tomarla fuerte de la cintura, total, ya estaba bien picado y más arrecho de lo normal, solo quedaba arriesgarme, ya había llegado muy lejos al parecer, Maria no se resistió, en lo absoluto, se pegó más, incluso pego bastante su cintura con mi pelvis, lo que pasó por mi cabeza automáticamente fue "Si o si quiere sentir mi pinga".
Yo solo contaba con tumbar a mi suegro, haciéndome el pendejo, sirviéndole de más y esperar a que se quite a jatear, para quedarme a solas con su esposa y sus deliciosas piernas.
Para mi suerte, es exactamente lo que sucedió, ya no quedaban invitados ni familiares cerca, fui a dejar a Isabel a su cuarto, literalmente cargada, la acosté y la tapé, listo, se quedó seca.

Al regresar a la cocina para "despedirme", ya no estaba mi suegro, Maria me miraba sonriente ni bien entre...

- Maria: Ya lo tumbaste al pobre oye *con una voz muy sensual, se sentía la lujuria en cada palabra que pronunciaba*

- Yo: En serio? pero no paso tanto rato! jajaja *me senté otra vez en la mesa de la cocina y solo me quede mirándola, aproveché en servirme un vasito más*

- Yo: Ahora te toca a ti entonces señito! Salud! *Me levanté rápido y me acerqué* a los ojos!

- Maria: jajaja terrible eres ah, ya, salud, a tus bonitos ojos *me miro de pies a cabeza y básicamente me quede petrificado*

En ese momento no pude pensar en nada mas que verme bombeando sin parar a esta señora, me tomé mi trago rápido, lo dejé en el lavadero e inmediatamente le zampé un pico y un abrazo de costado.

- Yo: Feliz cumpleañosss, espero la haya pasado muy bien *mientras la apretaba fuerte contra mi*

- Maria: *más risueña que nunca pero empezando a hervir* ayy gracias Dieguito, que fuerte me apretas oye *sin oponerse en lo absoluto, me tomo de los brazos y medio que empezó a jalarme un poco para ponerme detrás de ella*

- Yo: *Baje mis brazos y manos hasta su cintura y la apreté mucho más contra mí, ya estaba parándose mi pinga y estaba haciendo todo para encajárselo en la separación entre nalga y nalga que marcaba su vestido*

- Maria: *levantando la cabeza y susurrando cerca de mi oído, dándome toda la espalda y dejándose puntear sin intentar separarse* Oye Diego ten cuidado, no hay nadie afuera? ay ...

- Yo: *casi sudando de lo caliente que estaba, punteándola sin parar, apretándola contra el lavatorio* quieres sentirlo más? *Le agarre la mano y se la puse en mi pinga, puso resistencia un poco pero al sentirlo empezó a apretarla y sobarla de arriba hacia abajo por encima de la ropa*

- Maria: *con la boca abierta echando unos suspiros muy excitantes, mirándome sorprendida, aun susurrándome un poco asustada* como puede estar así de dura?

- Yo: Así me pones, tócalo más, lo quieres? *susurrándole al oído bien cerca*

- Maria: *aun algo asustada y sorprendida* oye pero Isabel? que quieres hacer? en serio quieres hacer esto?

- Yo: *me rehusaba a perder la oportunidad, la puntee mucho más fuerte y en una sacudida sintió entre sus nalgas mi pene bien parado y duro* lo hacemos rápido, que dices, nadie nos va a ver...

La fricción se puso más intensa, se escuchó un mínimo gemido de la señora, lo cual me puso como loco, no podía creer realmente que estaba sucediendo, lo imaginé siempre pero jamás pensé que llegaría.
Después de haberla punteado tanto y tener la pinga realmente bien parada, se notaba la carpa armada en mi pantalón y se notaba también lo mojado que estaba, la solté brevemente y me separé, ella lo primero que vio fue mi bulto duro, juro que lo miro con un hambre...

- Yo: *acomodando la pinga hacia abajo* Espera, voy a chequear al toque como están por allá *salí de la cocina para revisar si estaban durmiendo*

- Maria: *mirando fijamente mi bulto y sonriendo* Mira como estas, ya, dale...

Inmediatamente fui casi corriendo pero bien caleta a ver cuarto por cuarto para ver la situación, suerte la mía que el cuarto de las hermanas estaba cerrado, mi flaca bien seca roncando y el viejo bien tapado en la misma situación, aproveché en juntar la puerta y subirle un poco al volumen de la música que aún estaba sonando en la sala y volé hacia la cocina...

- Yo: *entré disparado a la cocina en busca de tremenda señora, me acerqué mientras ella seguía lavando y la volví a agarrar de la cintura y bajando hacia la cadera para sentir como inician esas piernas* todos están secos señito... *empecé a besarla por detrás de la oreja, mientras la punteaba y recorría sus muslos con mis manos*

- Maria: *mientras seguía lavando, se entregaba a de pocos y subía la mirada con los ojos cerrados disfrutando mi manoseada* ya, ya, no hagas bulla nomas...

En este momento de lo desesperado y ansioso que estaba, no se me ocurrió mejor idea que agacharme y lamerle las piernas, subiendo y bajando, lamiendo pantorrillas y casi el talón, metiendo prácticamente mi cabeza por su vestido y llegando a sus nalgas...

- Maria: *dando un brinco casi empujándome, tratando de sacar mi cabeza de su culo, susurrando* que haces oye! estás loco!

- Yo: *me puse duro y empecé a lamer y morder sus nalgas, no me había percatado que las tuviera tan firmes* espere, espere...

Obviamente al verla sorprendida, quizás lo confundí con incomodidad, me levante para no matar el momento y se molestara, solo la mire y empecé a lamerle el cuello, que sabor tenía la señora, se sentía bien caliente, sin percatarme que ya me había tomado del pene, empezó a bajarme el cierre y a usar su otra mano para sacar el pene del bóxer, me puse tan nervioso pero arrecho a la vez que empecé a temblar un poco, pero no podía detenerme, era lo que estaba esperando con tantas ansias, estaba en la cúspide de mis deseos, solo quería penetrarla y mirarla desde atrás para ver como temblaban esas piernas...

Mientras me masturbaba, me miraba fijamente, hasta ahora no olvido esa mirada.

- Maria: estas bien duro ah, parece de caballo esto ya *mientras me miraba, sonreía y bajaba la mirada para ver mi pene bien duro y erecto, mordiéndose los labios en el proceso*

- Yo: *gozando plenamente la masturbada, no pude resistirme a su mordida de labios y le zampé un beso un poco tosco*

No tengo palabras para describir lo rico que se sintieron esos labios, obviamente me había olvidado del tufillo a alcohol, quizás y espero que ella también, pero ese agarre estuvo bien sabroso, termino de excitarnos más, la intensidad del beso fue subiendo, empezó prácticamente a chuparme la lengua, como si fuese un pene.
Sin resistirnos más, se volteó y se apoyó en el lavatorio, se alzó el vestido y dejo ver esas piernas deliciosas, de color medio caramelizado por sus constantes visitas a la playa, que de por sí ya estaban brillosas por la transpiración...

- Yo: *sacando un condón de mi billetera, tratando de romper la envoltura para ponérmelo con hartos nervios encima* espere ya voy ya voy...

- Maria: *bajándose de a pocos el calzón con la intención de excitarme más* ya, dale apúrate... no importa así nomás...

Lo que me dijo hizo explotar mi cerebro, quería tirar a pelo, no lo dude, no la pensé, simplemente le hice caso, automáticamente envolví el condón en su envoltura y lo devolví a la billetera, no pensé en el después, no lo iba a pensar tanto sabiendo lo bien conservada que estaba la señora, lo bien que se cuidaba, no tenía dudas en ese momento.

Me acerqué, con el pantalón abajo y el polo remangado, Maria tomo mi pene con una convicción tremenda y lo empujó hacia su vagina, empezó a usar el glande para estimularse, empezó a sobarlo con fuerza hasta que no pude aguantar más y se la clavé, se la metí completa, retumbo un poco y Maria soltó un sonido bastante raro, era un grito muy aguantado, empecé a penetrarla fuerte, un poco lento pero fuerte, ella se arqueaba un poco más, abría más sus piernas y trataba de aguantarse el gemido, al ver eso le puse mi mano en su boca, sentí esos labios ricos y por inercia simplemente empezó a chuparme los dedos.
Podia sentir como mi pene crecía más y más dentro de ella, estaba tan rico, estaba bien estrecho, se nota que el viejo de no la complacía nunca, mientras seguía el bombeo, solo notaba lo mojado que estábamos los 2. Aunque hayamos estado por lo menos unos 15 minutos así, el miedo volvió a entrar de ser descubiertos por alguien, nos detuvimos por un momento y me asomé por la puerta de la cocina para ver si había algún movimiento extraño, evidentemente solo escuchaba ronquidos y la música, un Frankie Ruiz sonando de fondo...

- Yo: *volteando para ver a Maria, con el vestido alzado* todo bien, no pasó nada...

- Maria: *sacándose los tacos* qué barbaridad Dieguito, estas ardiendo *sonriendo coquetamente*

Le estampé otro beso, prácticamente chupando sus labios, la agarre de la cintura y la volteé contra la pared, le agarre los brazos y se los cruce contra pared para que se apoye, sólita ella se arqueo y me entrego su bonito culo, le alce mucho más el vestido para ver completamente sus nalgas y sus ricas piernas, con esos bonitos pies empinados, marcando mucho más esas pantorrillas.
Como soy un enfermo, volví a agacharme a lamerla desde los talones, pantorrillas, muslos y glúteos, esta vez sí terminé lamiendo su clítoris, veía como se retorcía y pegaba su cara contra la pared, mi pene totalmente hecho piedra volvió a entrar en su vagina, seguí bombeándola, esta vez más rápido, tan rápido que empezó a escucharse el choque más fuerte, la música parecía no hacer tanta diferencia...

- Maria: *detenidos, me miró un poco asustada* dale despacio oye

- Yo: *apoyado en su espalda, sudando y totalmente desorbitado* ya, ya, disfruta nomas

Volví a penetrarla fuerte y trataba de medirme con los sonidos, ella volvía a abrir más las piernas y a agacharse un poco, como un acto reflejo de bastante goce, la pegue bien contra la pared y no le importo, la aplasté tanto que el movimiento y contacto estaba a tope, ella solo miraba para arriba con los ojos cerrados, pude ver que uno de sus ojos se desorbitaba un poco, solo lo vi y automáticamente me quería venir.
Esta huevón me dije, tan pronto no va a pasar, después del bombeo paré un poco para tomar un respiro, Maria se volteó, se agacho, me tomo de la pinga y se lo metió a la boca sin asco, empezó a succionar con fuerza la cabeza, lo sacaba y lo masturbaba, de un momento a otro pasó a verse como una entusiasta del pene, empezó a frotárselo contra el cachete y a golpearlo contra su lengua, el hilo de baba que se formaba empezó a caer al suelo, me miraba tanto cuando lo hacía...

- Maria: *sacándose la pinga de la boca, mirándome y pasando saliva como loca* ya quieres venirte? te gusta cómo te la chupo?

- Yo: *transpirando fuerte, enfermandome de solo ver mi pinga al costado de su cara, siendo tomado con fuerza por su mano* aun no, quiero clavártela más, está bien rico

La levanté con fuerza casi cargándola, se rió un poco fuerte pero se tapó la boca bien rápido, la subí de espaldas a la mesa donde hasta hace unas horas chupaba mi cuba libre con su esposo, jale sus piernas hacia mí y volví a metérsela, ella solo se dejaba, no se resistía a nada, ahora la tenía mirándome frente a frente, casi abrazándome con sus ricas piernas, era todo un sueño para mí.

No deje de bombearla, me tomaba de los brazos fuertes, tenía buena flexibilidad la señora, cada vez que volteaba la cabeza me volvía loco, lo disfrutaba bastante, se mordía los labios, se retorcía y se tapaba la boca cuando lo hacía, quería gritar, mientras iba poniéndose más intenso, agarraba sus piernas y las lamia, las apretaba, las mordía, lamia sus pies también, el miedo se había ido ya, solamente era puro placer rondando en el aire. La agarre de la espalda, la levante y me abrazo, empecé a metérsela con fuerza, quizás dando círculos también, me mordió la oreja y me hablaba bien despacio...

- Maria: *aferrada a mí con fuerza, sentía demasiado su tensión* Diego, me estas volviendo loca, quiero gritar carajo, me estoy mojando mucho

- Yo: *mientras la penetraba con intensidad, sentía que se escurría harto liquido de su vagina* seño está bien rico, me vas a hacer venir, donde lo quieres?

- Maria: *apretándose más contra mi* dónde quieres? quieres que me lo tome?

- Yo: *casi al borde de la locura, sin importarme ya si estaba haciendo bulla* si, tomatelo todo

Ala ...
No pude aguantarme las ganas de botar toda la leche, saque mi pene casi explotando y me vine encima de ella, solté unos buenos chorros, le cayó en el abdomen, en las tetas y cuello, unas gotas llegaron a sus labios, me miró sonriendo, un poco recostada, empezó a relamerse los labios, se paró, vio que le manché su vestido y volando se lo limpio con papel, hasta ese momento no había visto con detenimiento las buenas piernas que tenía junto a ese culo, realmente sorprendente para alguien de su edad, de inmediato me subí el pantalón, me acomodé y la ayudé a limpiarse, pasando papel por sus tetas aprentadolas...

- Yo: *mientras le apretaba una teta tratando de limpiarle el semen, hablando bien bajo* te gustó señito? es mi regalo de cumple

- Maria: *riéndose y dejándose tocar* que cojudo eres, sí, todo bien rico pero mira como me dejaste el vestido...

A decir verdad, estaba bien cansado, ya eran las 4 y algo de la mañana, aun no sabía si quedarme a dormir con Isabel o irme nomas, empezó a entrarme una vergüenza y una culpa tremenda, como haré después para ver a Isabel sin pensar en su mamá, incluso verla después de habérsela metido tan rico?, decidí irme, sin antes terminar de ayudar a Maria con los trastes, me despedí de ella como si no hubiera pasado nada...

- Yo: Ya me voy señito, gracias por todo *poniendo mi cara de pendejo para bromear* ojala haya repetición no?

- Maria: *sonriendo, con una mirada bien cansada* si, anda nomas con cuidado, gracias a ti.

Salí, caminé un poco para fumar un cigarro, mientras pedía un beat y solo me quedé pensando en que pasará después, será todo igual? creía que sí, esperaba que sí, pero jamás volvió a darse una situación parecida, su siguiente cumpleaños el año pasado fue algo más tranquilo, no fue mucha gente y no hubo tanto alcohol, jamás percibí una señal que me diga que volvería a pasar, porque realmente si tenía ganas de volver a hacerlo, pero bien, libres, con la bulla necesaria para gozarlo al máximo, como debió ser, aun así, no le cierro nunca a esa posibilidad a pesar de no verla hace casi un año…



GRACIAS por leer mi relato, esta de más decir que es 100% real a pesar de haber cambiado los nombres, adjunto mas fotos de esta señora con las piernas mas ricas que he visto y he podido disfrutar, disfruten.

 

Que relato cofra de comerte la a tu suegra pero le hubieras dado x el culo si o si

 

Buen relato man..yo tambien me comi a mi suegra. Una morena que va al gym .
Era una sadica con la boca le gustaba atorarse con la verga.

 

En verdad fue bien arriesgado, no pudimos hacerlo como me hubiese gustado, estábamos en constante riesgo de ser descubiertos, pero aun así, eso lo hizo igual de rico.

 

Y q paso después amigo q fue Cúando se vieron al siguiente día cuenta pz cauza

 

Buena cofra, ojalá vuelva a verla pronto. Aún así un buen tire.

 

Buen aporte y gracias por compartirlo cofra. Ojala pueda darse su remember.

 

Muy buen relato.siga asi maestro!

 

Gracias a todos! me impulsan bastante a contar algunas anécdotas que tengo en mente, aunque no me hayan marcado tanto como esta, aun así, en agradecimiento les dejo mas fotos obviamente de las ricas yucas de esta señora bien pero bien cuidada.



Para resolver algunas dudas, la última vez que la vi fue a mediados del año pasado, ya que terminé mi relación en julio, jamás volvimos a tocar el tema aunque la buena vibra siempre estuvo, quizás por ahí siempre hubo un intento de acercamiento de mi parte y una mínima respuesta de ella, al parecer le chocó bastante ya que la vi mas unida que nunca a su esposo, decidí no insistir mas y mi cabeza ya estaba en otro lado.

Aun así, jamas hay que cerrarle la puerta a cualquier oportunidad, se que en algún momento la volveré a ver, ojala se siga manteniendo como lo hace, realmente admirable lo de esta señora.

 

Por que no le escribes? , quizás se alegre y salga algo no pierdes nada, saludos

 

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Buen relato cofra se agradece ojala me toque una suegra así de buena no tuve tu suerte hasta ahora. Saludos