Adolescente espía y se aprovecha de mi novia

Hola, mi nombre es irrelevante, lo que importa es mi relato. Miren, mi flaca proviene de una familia acomodada; buena familia, por ende, buenos genes. Toda su famila es atractiva, y eso hace que ella también lo sea. Bueno, está buenísima. La primera vez que la conocí me enamoré primero de todo su cuerpo y luego de su personalidad. ¿Lo mejor? Es demasiado abierta con el tema sexual y le fascina lo erótico.

Ella es tan pervertida como lo buena que está y eso hace las cosas más divertidas aún. Siempre fantaseamos, siempre jugamos. El coito es como la parte final del placer, lo más importante es lo que se viene antes, el erotismo. El juego, el role play, lo diferente es lo que determina un buen sexo de un mal sexo (el normal aburrido donde solo hay penetración). Gusta de seducir, gusta de romper las pelotas y a veces gusta exhibir, digamos que accidentalmente (algunas veces). Entonces con ella hay momentos de diversión asegurada así como un temor indiscutible de que se me escape por allí, pero ese es otro tema. Ok, el relato.

Luego de haber tirado una noche, nos quedamos conversando de nuestras fantasías. Yo le dije que me gustaba la sensación de ser observados en pleno sexo. Ella me dijo que en pleno sexo, perdía toda noción de vergüenza y era capaz de dejarse ver tranquilamente. Aunque esa idea me gustaba, también me excitaba cuando otros sujetos la miraban lascivamente fuera del coito, claro, a sabiendas de que ella no les pertenecía.

Seguimos tocando ese mismo tema hasta que ella recordó algo muy interesante: Que en su casa, el hijo de la empleada, venía recurrentemente para acompañarla. No sabía su edad pero bordeaba entre los 16 o 18 años. Era tímido y flacucho, pequeño para su edad, de hecho, parecía de 14 o 15. Lo que la llamó la atención fue que ella ya había notado, muchas veces, las miradas del muchacho. Lo notaba observarla cada vez que salía y entraba a su cuarto, al baño y a X habitaciones. También notó que gustaba pasar mucho por la lavandería, ¿Por qué? (pregunté) Y era que quería observar las truzas recién lavadas allí colgadas en el tendedero. ¿Y cómo lo sabes? (pregunté) Pues porque lo había visto de reojo quedarse parado allí cuando estaban colgadas algunas prendas íntimas. -Eso suena... interesante- Dije.

Mi flaca es de tener demasiada ropa y, definitivamente, lo mejor. Eso hace que también tenga una cantidad ridícula de calzoncitos. Y la mayor parte de estos son tangas de todos los colores. Mis favoritos son los que traen partes traslúcidas. Ya, cada calzón usado es lavado rápidamente, haciendo que estos estén colgados con regularidad en el tendedero, lugar donde el "respetable" jovencito para haciendo sus inspecciones de seguridad. ¿Qué cosa no? Un muchacho que mira los calzones de mi flaca. !Incluso más que yo!

Bueno ya, muchos calzones. Mi flaca también me contó lo que hizo sin que lo supiera, hasta ahora. Ella también es muy perceptiva, y como yo, también tiene una picardía erótica especial. Sabiendo que el muchacho es un mirón empedernido, decidió hacerle una "compensación" por su "interés". Como hasta ahora sólo la había visto (o eso pensaba) en pijama o short, nunca había tenido la oportunidad de verla calata. Y eso era justamente lo que me dijo que hizo. Ciertos días que iba el muchacho, ella se encargaba de dejar la puerta de su cuarto entreabierta y ella adentro "haciendo sus cosas habituales" solo que usando solamente medias, polo y tanga. Como sabía que tenía que ser "accidental", nunca miraba a la puerta. Es más, se echaba en su cama mirando su celular o leyendo un libro, boca abajo. A veces el viento hacía lo suyo y abría más la puerta. Ella no hacía más que estar calata en su cuarto sin mayor interés. Cuando me dijo eso tuve una erección dinosáurica.

¿Y cómo sabes que te vió calata? (pregunté) En primer lugar, me dijo, porque a veces sentía que alguien pasaba por la puerta. La empleada casi siempre paraba en la cocina en las mañanas, así que tuvo que ser "él". Que, y cuando sentías que alguien pasaba, ¿qué hacías?. Ella me respondió: Nada, solo estaba echada en la cama o (esto me mató) haciendo yoga con música. , me puse en el lugar del chibolo: qué sería estar en una casa ajena, con gente que muy ajena a mi, que viva una flaca buenísima y que todavía se ponga a hacer poses de yoga usando una tanga pequeña.

Ya, le dije, pero ¿eso nomas?. ¿No te aseguraste que realmente te viera calata? Sí, me respondió. Sí se había asegurado, porque cuando estaba sin la vergüenza del mundo, salía de su cuarto a hacer X cosas. Y allí sí se aseguraba de que sea vista calata. Necesitaba detalles. ¿Qué pasó?

Fue un día que había salido del país, una mañana que para mí era de noche. Estaba teniendo una videollamada con ella y ciertamente tuvimos cibersexo. Yo no sabía nada de aquella situación, pero ella me dijo que estaba con la puerta cerrada y que nadie la veía, pero tuvo la puerta casi abierta durante toda la sesión. No había nadie más en la casa que el muchacho, que sí se había quedado allí porque su madre se había ido a hacer compras a Wong. Eso me excitó demasiado porque sabía que en esa videollamada ella se quedó desnuda mostrándome cómo se masturbaba. !Y me dijo que no había nadie en la casa! Previo a eso hice que ella me haga un baile de strip tease, donde se quitaba toda la ropa de forma sensual. Finalmente acabamos hablándonos las cosas más cochinas mientras nos masturbábamos. Yo pensé que allí se había quedado satisfecha, pero no.

Luego de estar desnuda, me contó, supo que el muchacho estaba por allí en la casa (y quizás había visto la sesión a escondidas, pero eso no lo sabemos) y decidió jugar un rato. Así que se "vistió", se puso su polo de tiras negro, sus medias blancas y buscó en su ropero "algo especial". Se puso una tanguita rosada con ciertos bordes finos y transparentes. Y así salió de su cuarto para ir a "hacer algo", que era cualquier cosa. Pasó por toda la casa pero no lo encontró, incluso fuera de la lavandería. El muchacho estaba en el jardín haciendo no-se-qué. No hubo problema, el jardín da directamente a la sala, pues hay una mampara en forma de arco. Ella supo qué hacer, solo tenía que estar en la sala y llamar su atención. Se echó en el sofá y puso música en volumen alto. Entonces hizo lo que mejor saber hacer, ser irresistible y mirar su celular.

Ahora sí se aseguro de ser vista. Lo miró pasar desde lejos, observándola, y ella haciendo que ignoraba ser observada. Ella se acomodó, permitiendo también mostrar sus nalgas. Luego de un rato (y el mirón ya habiendo fijado su atención) ella se paró y abrió la mampara para llamarlo directamente. ¿Me ayudas, porfa? Le dijo. Ya, dijo él. Ahora sí hizo que se le acercara. Ella estuvo frente a frente. ¡Y estaba calata! Cuando me imaginé eso luego de contármelo, no tuve opción que sujetar mi miembro y frotármelo suavemente (para no venirme en pleno relato). Así que otro sujeto tenía a mi flaca calata delante de él, me entró mucha perversión. Ahora los imaginaba teniendo sexo muy, muy salvaje.

(...continuará)

Sorry, ya es tarde.

 

buen relato cifra continúe xfavor

 

Promete el relato!!! Siga cofrade!